Zahara se toma el verano para componer “con mucha calma”

Desde que a los 12 años compuso su primera canción, su dedicación a la música no ha tenido límite ni descanso. Zahara Gordillo Campos (Úbeda, 1983), más conocida como Zahara a secas, lleva una década contribuyendo al sonido independienteespañol con sus composiciones. Entre su último disco, Santa (2015), que se convirtió en el número tres de los discos más vendidos y el primero, el modesto Desde Úbeda grabado en 1999, median otros cuatro. Su lanzamiento a la primera fila del mundillo musical llegó con La fabulosa historia de... (2009) tras su fichaje con Universal. Su primer single, "Merezco", se coló en las casas españolas como banda sonora de la Vuelta. Sus directos le harían recorrer, ahora con banda, gran parte del país. 

Ella misma se ocuparía de parar la rueda de las grandes productoras: en 2011 anunció su salida de la multinacional y publica La pareja tóxica (2011), de nuevo autoproducido y editado por Music Bus, el sello de Love of Lesbian. En Santa daría un paso más con la creación de su propio sello, G.O.Z.Z. Records. Zahara, inquieta por naturaleza, participa yambién en multitud de proyectos muy diversos: desde creaciones musicales junto a otros artistas y amigos, a trabajos de estilismo y edición de vídeo (incluidos algunos de sus propios clips). Uno de ellos ha sido su novela Trabajo, piso, pareja (Aguilar), en el que refleja esa generación nacida en los ochenta a la que se les prometió todo y la crisis se lo negó más tarde.

A la cantante le aguarda un 2018 movidito en el que intentará cuadrar su vida personal con la profesional, puesto que en la segunda mitad del año, tras ser madre, llegará su próximo álbum. De momento, a la vuelta de verano espera tener compuesto el nuevo disco para poder tomarse una baja de maternidad en condiciones.

Pregunta. En verano, ¿descanso o trabajo?

Respuesta. Normalmente suele ser trabajo, pero este año y por motivos personales me lo voy a tomar con mucha calma. Leer, escuchar música y que todo el trabajo que tenga sea el de componer.

P. ¿Un rincón para refugiarse del mundanal ruido?

R. La casita de mi suegra en Soto del Real. A solo una media hora de Madrid es una suerte contar con ese refugio. Chimenea en invierno, piscina y temperaturas algo más bajas que en Madrid en verano… Allí he compuesto algunas de las nuevas canciones del disco y terminé la novela Trabajo, piso, pareja.

P. ¿Cuál es el momento de las vacaciones con el que sueña?

R. Despertarme en Hondarribia, sentir el fresquito en la cara y no tener que contestar ningún mail.

P. Ahora toca hablar del más temido…

R. Los desplazamientos. A mí lo que me gusta es estar en los lugares, no tener que llegar hasta ellos.

P. ¿A quién dejaría sin vacaciones?

R. Siendo un poco egoísta, a [Damon] Lindelof. Tras The leftovers me siento un poco huérfana y necesito que se ponga a crear una nueva serie ya.

P. ¿Se lleva algún Cuadernillo Rubio, algunos deberes para septiembre?

R. Me llevo la guitarra y una libreta. Ese es mi cuadernillo.

P. ¿Hay algo que le quite el sueño en estos meses?

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R. Estoy bastante tranquila en este momento, pero si me pongo a pensar en todo lo que me espera para 2018 y cómo tiene que cuadrar mi vida personal y profesional, igual me cuesta dormirme un poco.

P. ¿Qué le espera a la vuelta?

R. Tener compuesto el disco nuevo y listo para poder tomarme la baja de maternidad en condiciones.