Yolanda Díaz busca ahora traducir su éxito en el debate sumando hasta diez diputados más

Sumar coge impulso en la recta final de campaña gracias al debate protagonizado por su candidata, Yolanda Díaz, en RTVE. Desde el equipo de la coalición están convencidos de que el debate, que vieron más de cuatro millones de personas, servirá para movilizar al bloque de la izquierda y, especialmente, para decantar la balanza por Díaz, que destacó frente a un Pedro Sánchez con el que dejó ver su sintonía, y, sobre todo, frente a un Santiago Abascal con el que confrontó. "Hay partido", repiten en la coalición, un mensaje que esperan que cale entre el electorado progresista, que según los sondeos está más desmovilizado que el de la derecha.

Una de las claves es que Díaz se asiente en la tercera plaza en las circunscripciones medianas y pequeñas, puesto que las elecciones del domingo se decidirán en la pelea por el último escaño de cada provincia. Esto no supone una novedad pero sí lo es que la izquierda logre dar un vuelco a las circunscripciones que la derecha creía ganadas.

De hacer llegar este mensaje de optimismo se han encargado los portavoces de Sumar, que este jueves han realizado una tourné por diferentes platós de televisión para destacar la victoria de su candidata como punto clave de una campaña que está a punto de expirar. "Hay unanimidad en que Yolanda Díaz fue la ganadora del debate. Hemos visto propuestas, hemos desarrollado nuestro proyecto de país y hemos evidenciado que el proyecto de Abascal está avalado por el señor Feijóo", ha expuesto su portavoz de feminismos, Elizabeth Duval, en La Sexta ."El voto a Sumar decidirá qué coalición va a gobernar España en el futuro", ha señado también su portavoz económico, Nacho Álvarez, en Telecinco. "Como Rosalía, vas a salir coroná", ha llegado a decir la exalcaldesa de Barcelona, Ada Colau.

Según trasladan fuentes del equipo de Sumar a infoLibre hay "entre cinco y diez escaños bailando" entre Sumar y la derecha que podrían ser decisivos para decantar la balanza en favor de la izquierda o, al menos, impedir que PP y Vox sumen mayoría absoluta, lo que dificultaría los planes de Alberto Núñez Feijóo de llegar a La Moncloa ante la falta de otros aliados parlamentarios. Estas circunscripciones, ateniendo a las mismas fuentes, serían Alicante, Álava, Barcelona, Cádiz, Castelló, Baleares, Las Palmas, Madrid, Málaga, Sevilla, Toledo, València y Zaragoza. Datos que, según aseguran, confirman varios sondeos.

La lectura que hacen en la coalición es que el debate "removiliza a la izquierda" por ver a dos candidatos que se entendían, en referencia a Díaz y Sánchez, lo que contrasta con la actitud del exlíder de Podemos, Pablo Iglesias, más beligerante con los socialistas y "desmoviliza el voto centrista" porque "ven a un Abascal como vicepresidente del Gobierno". Esto, a su juicio, puede dejar en la abstención al votante que en 2019 optó por Ciudadanos, con un perfil más liberal en lo económico pero que también defiende políticas sociales como es la propia ley trans, a la que Cs votó a favor.

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Desde Sumar insisten en que su campaña de propuestas y "en positivo" ha dado resultado, pero lo cierto es que han virado de estrategia para darle más protagonismo al Partido Popular y a Vox. La pasada semana Díaz ya introdujo los vínculos de Alberto Núñez Feijóo con el narcotraficante gallego Marcial Dorado. Una amistad de la que se tiene constancia desde mitad de los 90 cuando el actual presidente del PP era número dos de Sanidad en el Gobierno de la Xunta. Precisamente fue en una entrevista con infoLibre cuando Díaz habló sobre esta cuestión por primera vez en la campaña y se trata de un asunto que ha seguido explotando hasta sacarlo a coalición en el debate del miércoles, cuando le preguntó a Abascal qué le parecería compartir gobierno con una persona que ha estado relacionada con personas del mundo de la droga.

Abascal titubeó en tres ocasiones, incapaz de replicar a Yolanda Díaz durante el debate. Primero cuando no supo decir cuál es la importancia del empleo era la agricultura. Después cuando le hizo ver que Vox había votado con Bildu contra la reforma laboral. Y finalmente cuando la candidata de Sumar le emplazó a pedir perdón por haber difundido el bulo de que un migrante había sido el autor de un asesinato en el barrio madrileño de Lavapiés que en realidad había sido cometido por un ciudadanos español.

En el espacio repiten que "el 30% del electorado" define su voto en los últimos días —aunque los expertos rebajan ese porcentaje a la mitad y lo sitúan en torno a tres millones y medio de votantes— por lo que creen que hacen falta mensajes "más políticos" para evitar que la derecha sume mayoría absoluta. Uno de los objetivos de Díaz era contrarrestar los efectos negativos para el conjunto del espacio del cara a cara entre el líder del PP y el presidente Sánchez y desde Sumar creen que lo han conseguido con el debate a tres, que escenificó un reparto de roles entre la vicepresidenta y el socialista.