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Polanski esquiva el banquillo por una violación pero la víctima convierte el juicio en un alegato contra la impunidad

Roman Polanski, en el Festival de Cannes.

Zeina Kovacs (Mediapart)

"Esto no es un juzgado de lo penal.” Esta frase, repetida varias veces durante las ocho horas de la vista oran en el Juzgado de Instrucción de París, es señal de un caso enrevesado. La violación de la actriz Charlotte Lewis, de la que se acusa a Roman Polanski, se remonta a 1983, por lo que el delito ha prescrito. Sin embargo, durante la vista se habló largo y tendido de la violación en sí. 

Como ocurre a veces en casos de violencia sexual, a falta de juicio por prescripción, la vista se celebró por difamación

En esta ocasión, no es el acusado quien demanda a la denunciante por difamación, sino la actriz Charlotte Lewis, que se siente mancillada por lo que Roman Polanski dijo en una entrevista a Paris Match en 2019, durante la promoción de su última película, J'accuse. Una entrevista que, según su abogado, se vio "obligado a conceder para salvar su película debido a acusaciones oportunistas". En el banquillo de los acusados también se encuentra Caroline Mangez, directora de publicación de Paris Match en aquella época, que publicó esta extensa entrevista de unas diez páginas (y cuarenta y tres preguntas) en plena polémica en torno al director. Roman Polanski fue acusado de violación por la fotógrafa Valentine Monnier, al igual que había sido acusado por otras cinco mujeres –todas niñas o adolescentes en aquella época− de violación y agresión sexual en los años 70 y 80. 

Roman Polanski, el principal acusado, no estuvo presente en la vista y estuvo representado por dos abogados, Alain Jakubowicz y Delphine Meillet. Contestando a preguntas de Paris Match sobre las acusaciones de Charlottes Lewis, el director señaló las "contradicciones" de la actriz e invocó una posible "frustración" para explicar sus acusaciones de violación contra él. "Habría que preguntar a psiquiatras, científicos, historiadores, qué sé yo", prosiguió. 

"Ni siquiera conocía la palabra violación"

"Estoy firmemente convencido de que Roman Polanski violó a Charlotte Lewis en 1983", comenzó Benjamin Chouai, abogado de Charlotte Lewis. "Y yo estoy firmemente convencido de que no la violó", replicó el abogado de Roman Polanski, Alain Jakubowicz, "pero esa no es la cuestión", afirmaron a coro ambos oponentes. Daba la sensación de que la vista se transformaba en un enjuiciamiento por faltas chapucero. La verdadera cuestión jurídica del día eran los comentarios de Roman Polanski en su entrevista con Paris Match. La actriz, presente en la sala, fue interrogada durante casi dos horas sobre la coherencia de sus acusaciones de violación. 

Charlotte Lewis, de 56 años, comenzó recordando su encuentro con el director en 1983, cuando solo tenía 16 años. Le ofreció el papel protagonista de su película Piratas. "La primera noche que conocí a Roman Polanski fue con mi agente Karen Smith. Roman opinaba que el hotel en el que nos alojábamos no era bueno. Así que nos llevó a su piso de París. Karen se fue a dormir y me dejó sola con Roman, y fue entonces cuando me violó.” A la mañana siguiente, Charlotte no se sentía bien, estaba confusa, por lo que confió a Karen lo que había pasado, una escena que la agente describiría bajo juramento en 2016 en declaración ante un profesional del Derecho en Texas, de la que luego se retractaría en 2022, alegando problemas de memoria. 

"No era consciente de que me había violado, ni siquiera conocía la palabra violación, solo tenía 16 años", continuó explicando la actriz en el estrado. En su alegato, los abogados del director se refirieron a los artículos de prensa publicados para promocionar la película en 1986, en los que la actriz elogiaba a Polanski y la aventura que supuso el rodaje del filme, un "rodaje feliz", según los letrados. Añadieron al expediente una veintena de declaraciones de testigos miembros del equipo de rodaje, afirmando que no habían detectado ningún comportamiento inapropiado del director con la joven actriz. 

"Roman era amable conmigo durante los ensayos, le veía como un padre, quería que estuviera contento conmigo. Era el único hombre adulto en mi vida en aquel momento, era mi mentor, mi maestro...", prosigue la actriz. "Por supuesto que sonreía en las fotos", dice su abogado, Benjamin Chouai. 

Un artículo incriminatorio

En 2010, cuando anunció a la prensa que había sido violada por el director hacía más de treinta años, fue un descenso a los infiernos. El escritor y filósofo Bernard-Henry Lévy tradujo un artículo de 1999 del desaparecido tabloide británico News of the World, en el que la actriz decía que había sido prostituta a los 14 años y que quería ser la "amante" de Roman Polanski. Este documento, presentado por los abogados para subrayar las "incoherencias" de la actriz, también estaba impreso en un documento que Roman Polanski había sacado de su bolsillo en el momento de su entrevista con Paris Match en 2019. 

"Fue horrible, cuando escribías mi nombre en Google, aparecía 'prostituta de 14 años'", recuerda Charlotte Lewis tras sus declaraciones de 2010, "la gente me miraba de reojo por la calle, ya no salía de casa". 

Sin embargo, la actriz siempre ha negado haber contado lo que dijo en el artículo de News of the World: "Era un periódico sensacionalista, cambiaron mis palabras", se defiende. El artículo en cuestión es tan importante para la defensa del director que sus abogados han pedido al periodista que entrevistó a Charlotte Lewis en 1999 que acuda a París. Stuart White, de 77 años y jubilado desde 2003, subió el martes al estrado para declarar. 

Admite que en su momento tuvo que rehacer la entrevista a petición de sus colegas de la oficina de Londres, que querían que mencionara la prostitución. Pero "si la escribí es porque Charlotte Lewis me lo dijo", afirma, admitiendo que no recuerda con detalle las palabras de la actriz, refiriéndose a las grabaciones de audio de la entrevista, que obviamente han desaparecido pues no forman parte del expediente. También admitió que News of the World había pagado a Charlotte Lewis 35.000 euros por la entrevista y una sesión de fotos. 

Interrogado por el abogado de la actriz, Stuart White ha admitido que News of the World cerró su web en 2011 después de que una publicación de The Guardian revelara sus métodos ilegales: el tabloide pirateaba los teléfonos de las famosas para revelar su contenido. 

Señalado el movimiento #MeeToo

Los dos abogados del director se turnaron para señalar las "mentiras" de la actriz. "Charlotte Lewis actúa de mala fe, miente"; "¿podemos saber al menos cuándo dice la verdad?", dijo Delphine Meillet durante su intervención de más de media hora. 

La letrada, que se proclamada "feminista", a continuación arremetió contra #MeToo. "El movimiento #MeToo dice 'te creemos'", señala, "estoy en contra de esta impostura epistemológica". "Las palabras ya no tienen sentido", prosigue la abogada, que suscribió un artículo de opinión publicado en Le Monde señalando "una preocupante presunción de culpabilidad" en materia de delitos sexuales tras la entrega de los César de 2020, cuando saltaron a la palestra las acusaciones contra Polanski.  

"El movimiento de liberación de la palabra de las mujeres no puede ir acompañado de la privación de la de los hombres", añadió su segundo abogado, Alain Jakubowicz, en un segundo alegato tan extenso como el de su colega. “Roman Polanski tiene 91 años, ya no se atreve a salir de casa", afirmó, refiriéndose a "asuntos anacrónicos". "Sólo estrena películas, obras maestras, a intervalos regulares". 

Sobre este punto, Jakubowicz señala las "coincidencias" cronológicas entre los testimonios de las mujeres contra Polanski y los estrenos de sus películas. "El 13 de noviembre de 2019 se estrenó en los cines la enésima obra maestra de Roman Polanski, J'accuse. Dio la casualidad de que el 8 de noviembre, una mujer, Valentine Monnier, de la que nunca habíamos oído hablar, testificó contra él." 

"Basta con que estrene una película para que alguien afirme haber sido violada por el director", añade el abogado, refiriéndose en la misma línea al testimonio de Charlotte Lewis "al día siguiente de la inauguración del Festival de Cannes en 2010, cuando Polanski estrenó The Ghost Writer, que también ganó varios premios". "Una mujer violada por Roman Polanski da una rueda de prensa pero no presenta denuncia", añade el abogado. 

Benjamin Chouai, abogado de Charlotte Lewis, habló varias veces de su "sensación de estar gafado" en un alegato mezcla de derecho y emoción. Describió al director como "el todopoderoso señor Polanski", en referencia a las otras mujeres que le habían acusado de los mismos actos, en particular Samantha Geimer. 

La fiscal cree que hay que reenfocar el debate: "Ha sido difícil saber durante esta vista si los hechos tuvieron lugar en 2010, 1999, 1983 o 2019." "La cuestión es si Roman Polanski hizo un uso desproporcionado de su libertad cuando hizo los comentarios de los que se le acusa". Aunque sin decirlo, pide que el director sea absuelto al considerar que es difícil detectar, en los comentarios sobre la actriz, sustancia alguna susceptible de ser considerada difamación. "Una tiene la impresión de que los comentarios de Roman Polanski son opiniones personales", concluye.  

Por su parte, Paris Match recuerda que, en el caso de una entrevista, las palabras del director no son responsabilidad del entrevistador. El caso queda visto para sentencia, que se conocerá el 14 de mayo.

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Traducción de Miguel López

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