La traición de FeliPPe

Possunt quid posse videntur - (La Eneida)

Dice FeliPPe González que Podemos es puro leninismo. Leninismo 3.0., por afinar un poco. Vamos, que hay más de cinco millones de leninistas en este país, de los cuales el 99%, tirando por lo bajo, no saben ni lo que significa. Menos mal que no le dio por acusarles de marxistas-leninistas. En fin. Sí, ya sé, se trata de una chorrada del gran dirigente para despistar. En lugar de razonar con y sobre el adversario, le carga un sambenito lo suficientemente llamativo para que la imaginación popular obre el resto. Se conoce que pensó don FeliPPe que lo del comunismo ya estaba muy manoseado por la derecha golpista del pasado, ésa que nos gobernó durante cuarenta años como cuarenta siglos, en connivencia con la iglesia católica y el ejército, tras desatar una cruenta contienda civil.

Perdona el tuteo, pero quién te ha visto y quién te ve, estimado FeliPPe. Cómo puedes haber caído en el mismo recurso de la derecha rancia, el miedo al comunismo. Te ha faltado añadir la conspiración judeo-masónica, aunque lo del chavismo bolivariano suena parecido. Y luego dices que malinterpretamos tus palabras, que no dice lo que dicen que dijo. Pues habla, claro. Deberías llevar siempre contigo un notario para que levante acta fiel de tus excelsas declaraciones. Así, por ejemplo, entenderíamos qué coño quisiste decir cuando reclamabas que ni el PP ni el PSOE debían impedirse gobernar el uno al otro. Quiere decir el expresidente, supongo, que si cada cual obtiene apoyos para su investidura, que el otro se calle; y como el primero que puede optar es el PP, pues quiere decir que su PSOE debe otorgar un cheque en blanco al PP. Vamos, que don FeliPPe I, por distinguirlo del otro, el VI, coincide con Rajoy: que debe respetarse la voluntad democrática expresada en las urnas, que ya vale de hacerle la Pascua, que el pueblo quiere que gobierne la lista más votada, o sea, Rajoy, porque se lo merece, porque es un muchacho excelente y siempre lo será. Y no hay más que hablar, por ahora. Y digo yo: cómo nos vamos a fiar de estos tipos en lo esencial si hasta en lo circunstancial no paran de hacer trampas. Lo vemos en la ubicación de los diputados de Podemos en el Congreso. El número de votos recibidos por la formación morada es lo suficientemente relevante como para que se respete la voluntad expresada en la urnas, como ellos insisten una y otra vez. Eso significa que Iglesias y los suyos deben situarse a partir de la misma fila en que se hallan las otras dos grandes fuerzas. Pues no, quienes no se fían de los nuevos demuestran una vez más que no son de fiar.

Pero volvamos a FeliPPe y su traición al socialismo español y a su país. Defiende el político sevillano la constitución de un gobierno cuyos principios atentan contra todo lo que defendió mientras gobernó, o eso parecía. Qué raro. Lo normal es que uno sea incoherente cuando gobierna, no cuando ya ha dejado la política activa. ¿A qué se debe esta beligerancia activa, valga la redundancia, en pro de un gobierno de derechas, cuando justamente él ya se encuentra fuera del ruedo de la política? Yo se lo digo. Pues se debe a que cuando uno entra por puertas giratorias de todo tipo no termina nunca de salir de la política, sino que la sigue ejerciendo en la sombra y en pro de intereses ocultos inconfesables. Lo cierto es que FeliPPe no puede considerarse un tipo del todo decente, al menos en su retiro. Debería explicar para quién y por quién trabaja. Desde luego, no por y para la ciudadanía, eso queda bastante claro. González, como Aznar, otro que tal baila, no luchan por el bien común desde hace ya mucho, y empiezo a dudar de si alguna vez lo hicieron, supongo que sí.

Empezaba este artículo con un verso luchador de Virgilio: "Pueden porque vieron que podían". No hace falta aclarar a quién me refiero. La inspiración de la nueva política es creer en que hay otra manera de hacer las cosas para mejorar el futuro que nos espera. Ni qué decir tiene que FeliPPe González representa justo lo contrarioFeliPPe, la rendición y la desesperanza. Y como argumenta el Doctor Johnson, "cuando se admite que las facultades pueden ser asfixiadas, abandonamos sin ofrecer resistencia". Y así no se va a ningún sitio. Con FeliPPe y sus tesis, el PSOE está abocado a morir asfixiado. El partido centenario necesita oxígeno y el viejo líder solo le ofrece tufo fermentado en una poza séptica.

Gonzalo de Miguel Renedo es socio de infoLibre