Este sábado en la segunda jornada del festival donostiarra participaron en su sección competitiva tres cintas: la argentina Alanís, la española El autor y la francesa La douler, de las que sobresalió la segunda, de Martín Cuenca, mientras en las actividades paralelas de la sobrecargada agenda sabatina, el internacional astro malagueño Antonio Banderas recibió el premio Nacional de Cinematografía.
La primera del día fue la cinta española El autor, del andaluz Manuel Martín Cuenca, y que interpretan Javier Gutiérrez, María León y Antonio de La Torre. Llegó con la renta de un premio de la crítica (Fipresci) hace unos pocos días en el Festival de Cine de Toronto, y no hubo discordancia entre los medios canadienses y los donostiarras para esta adaptación de la novela del mismo nombre que firma Javier Cercas.
Nos adentra en el universo de un hombre gris, Álvaro (Javier Gutiérrez), que quiere ser escritor, pero que hasta la fecha trabaja como chupatintas en una notaría de Sevilla. Su mujer, Amanda (María León), está triunfando con un best seller de masas, el matrimonio esta en crisis y la descubre una noche en actitud mas que tórrida dentro de un coche con otro hombre.
Desde ese instante el hombre dejará su casa y su trabajo por recomendación de su jefe, que le dará "vacaciones". Es entonces cuando decide instalarse en un piso de un edificio, donde empezará a investigar la vida de sus vecinos. Son personajes casi de 13 Rue del Percebe, aunque él les ve como los de su colmena particular, como aquella de Camilo José Cela.
Entre esos personajes están una portera cotilla, que será en momentos su cómplice, un anciano exfranquista jubilado al que le gusta el ajedrez, o un matrimonio mexicano a los que podrá espiar desde la ventana de su baño.
Álvaro asiste a talleres de escritura para lograr alcanzar su objetivo, ser un autor literario de éxito. Su profesor –un histriónico Antonio de La Torre– le pone en el atolladero cuando un día al final de una clase le dice lo que realmente piensa de sus escritos.
El protagonista reacciona, y comienza a inspirarse en las vidas ajenas de los vecinos que habitan junto a él. Provocará las situaciones para que sus personajes le den escenas y diálogos jugosos e interesantes.
Se convierte en un voyeur, un hombre que vive obsesionado espiando la vida de los demás, sin él tener una vida propia. Un tipo gris que dará a conocer su faceta manipuladora, sus bajos instintos, con tal de lograr su fin. Actuará creyendo que maneja a todos los personajes, como peones en una partida de ajedrez.
La historia transcurre en el verano de este mismo año en curso, 2017, en una Sevilla calurosa y triste, en la que acontecen de pronto momentos cómicos que relajan al espectador y lo suben en un tiovivo de sensaciones muy bien logradas.
La cinta –tragicomedia, aunque su director la ha catalogado de "dramática"– ha gustado mucho, hasta ahora se lleva la unanimidad y los aplausos mas sinceros de este festival. En El autor se mezclan muchos ingredientes certeros, humor negro, ambiciones, un guion incisivo y ocurrente, miserias... La vida misma traspasada a la pantalla.
Todo el mundo quiere ser inmortal dejando una novela una obra maestra de las letras, pero muy pocos son los que tienen el talento para hacerlo, y muchos los que se engañan pensando en que es una quimera alcanzable para cualquiera.
Este trabajo del director de Caníbal ha dado en el clavo, ha conseguido un trabajo muy digno. Muy probablemente se llevará alguna recompensa del palmarés, y posiblemente sea la más comercial de un director que hasta hora ha interesado más a la crítica que al público.
Y en el resto de la jornada...
La segunda del día es la cinta francesa La douler, de Emmanuel Finkiel, una de las pocas inéditas internacionalmente de la competencia donostiarra. Narra la historia de otra escritora, esta vez real, una joven y atractiva chica llamada Marguerite Duras a la que da vida Mélanie Thierry, en un relato adaptado a partir de la novela autobiográfica de la autora de El amante / L'Amant o Hiroshima mon amour. Estamos en el París ocupado (última etapa de la presencia germana) por los nazis, en el año 1944. Al marido de Margueritte lo captan los agentes de la Gestapo. A partir de este suceso comienza para ella un peregrinaje tanto a nivel físico como emocional, al relacionarse con un funcionario que intermedia entre ellos.
Ver másRicardo Darín: "Tenemos un 10% de políticos hijos de puta que nos están aplastando la cabeza"
Es una cinta muy digna la de Finkiel, y ha sido discretamente aplaudida. La ambientación está bien conseguida, y las interpretaciones son destacables.
Y la jornada del sábado acabó con el drama sobre maternidad y prostitución Alanís, de la directora argentina Anahí Berneri, interpretada por Sofia Gala Castiglione y su bebé Dante Della Paolera, entre otros. En ella se narran tres días en la vida de una prostituta que vive con su hijo, un niño de muy corta edad. Alanis intenta dignificar su vida, y tender la mano a una amiga suya que tiene problemas con la justicia. La cinta, que en un principio se planteó como un documental, terminó siendo un largometraje de ficción. La película argentina, estrenada en Toronto, no aporta nada novedoso y no sabemos si encaja demasiado bien en la sección oficial de este festival.
En el marco del festival se entregó al actor malagueño Antonio Banderas el premio Nacional de Cinematografía en la terraza de Tabakalera. El acto contó una emocionante y breve introducción de la actriz Paz Vega, que hoy también recibirá el galardón del Premio al cine Latino de esta 65 edición. Un ocurrente y relajado Antonio Banderas deleitó a los presentes con unas palabras que escribió en el avión que le traía desde Sudáfrica hasta aquí. Relataba cómo se enteró en una mañana gris londinense que había sido el elegido para este premio, y que sus dolores físicos y emocionales de ese día desparecieron al conocer la noticia. En otro orden de cosas, confirmó que está feliz por interpretar pronto por partida doble a Picasso, en la serie estadounidense de NatGeo y en la película de Carlos Saura tantas veces postergada.
Este sábado en la segunda jornada del festival donostiarra participaron en su sección competitiva tres cintas: la argentina Alanís, la española El autor y la francesa La douler, de las que sobresalió la segunda, de Martín Cuenca, mientras en las actividades paralelas de la sobrecargada agenda sabatina, el internacional astro malagueño Antonio Banderas recibió el premio Nacional de Cinematografía.