Para el ministro de Hacienda Cristóbal Montoro cumplir con el objetivo de déficit público comprometido con Bruselas es la principal tarea. El objetivo es cerrar el ejercicio 2013 con un déficit del 6,5% del producto interior bruto (PIB). Bruselas, en la última revisión, considera que no lo logrará y que el déficit llegará al 7,2% del PIB (6,7% si se excluyen las ayudas a la banca, que no contabilizan en déficit).
Pero por Montoro no va a quedar. El ministro, que se peleó con su colega de Industria José Manuel Soria para no aumentar el déficit con un préstamo al sector eléctrico de 3.600 millones, encaja los números en el objetivo a toda costa. Una prueba: en los datos de Contabilidad Nacional Trimestral publicados por el Instituto Nacional de Estadística se recoge un descenso del gasto en consumo final de las Administraciones Públicas en el cuatro trimestre de 2013 del 5,2% (datos corregidos de estacionalidad y de calendario).
Al mismo tiempo, el apartado de ocupados de la Contabilidad Nacional (empleo equivalente a tiempo completo) recoge un aumento de empleados en la Administración Pública, Sanidad y Educación de 29.000 personas, de 3.499.000 empleados en el tercer trimestre de 2013 a 3.528.000 en el cuarto. Hacienda mantiene que ese aumento ha sido sólo en "la parte de empleados privados" englobados en la Administración pública y Defensa, Seguridad Social obligatoria, educación y sanidad.
La gran partida
El pago de salarios de los empleados públicos es la gran partida de gasto tras pensiones y desempleo, por lo que llama la atención que en el mismo trimestre suba el empleo y al mismo tiempo caiga el gasto público. "Habría que preguntar al INE y a Hacienda a qué se deben datos tan contradictorios" señala Antonio González (Economistas Frente a la Crisis).
Para el economista, "la Contabilidad Nacional es una gran chapuza, con datos que no son coherentesContabilidad Nacional y que se corrigen en trimestres posteriores o incluso años después".
El economista José Carlos Díez fue más allá en el comentario y explicó a través de las redes sociales que los datos contradictorios de la Contabilidad Nacional son un maquillaje de los datos. "Siguen mintiendo para ocultar déficit, pero estallará" concluía el economista en uno de sus comentarios.
Tras las críticas de González y de Díez está la sospecha de que el Gobierno estaría trasladando gasto de 2013 a la contabilidad del siguiente trimestre, una maniobra para posponer el reconocimiento de problemas y el incumplimiento del objetivo del déficit justo cuando se anuncian rebajas de impuestos.
El más bajo de la serie
"Este trimestre (cuarto de 2013)" explica el economista José Antonio Rodrigo "es el más bajo en consumo final de las administraciones públicas de la serie desde el año 2008 y nunca, en ningún ejercicio, había caído tanto respecto al trimestre anterior". "La pregunta es ¿es posible que se estén pasando facturas o mejor dicho, posponiendo el reconocimiento de gasto al año que viene?". "La respuesta es sí" concluye.
El Ministerio de Hacienda, preguntado al respecto, se limitó a precisar que los datos de empleo público recogidos por la Contabilidad Nacional no son los más cercanos a lo que se considera "empleado público".
"Aunque los datos publicados de EPA y Contabilidad Nacional de Administración Pública y defensa; Seguridad Social obligatoria, educación y sanidad (APEDUSAN) han aumentado entre 28.000 y 50.000; en realidad, solo ha aumentado la parte de empleados privados" sostiene el Ministerio.
"Según los datos facilitados al Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas por el INE de la Encuesta de Población Activa, EPA, (sectores APEDUSAN) depurando y dejando solo empleados públicos, éstos se mantienen entre el tercer y cuarto trimestre de 2.427,6 a 2.427,2 (miles)" añade.
"Además" concluye "el conjunto de asalariados públicos de EPA (publicado) que incluye APEDUSAN más otros empleados públicos ha caído en 34.800 Estas fuentes se consideran más cercanas a lo que es empleado público que la Contabilidad Nacional que incluye privados".
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Vigilancia de Bruselas
Bruselas mantiene la alerta sobre la evolución de las grandes cifras de España hasta 2016 porque estima que no se cumplirán los compromisos de reducción del déficit al ritmo pactado.
La Comisión Europea sostiene que el próximo año, cuando España tiene que rebajar el déficit público del 5,8% del PIB previsto para este año al 4,2%, no sólo no se conseguirá el objetivo sino que el desajuste alcanzará el 6,5% del PIB, el mayor de la eurozona por delante de Chipre (6,1%) e Irlanda (4,3%) y muy lejos de los rescatados Grecia (1%) y Portugal (2,5%).
Para el ministro de Hacienda Cristóbal Montoro cumplir con el objetivo de déficit público comprometido con Bruselas es la principal tarea. El objetivo es cerrar el ejercicio 2013 con un déficit del 6,5% del producto interior bruto (PIB). Bruselas, en la última revisión, considera que no lo logrará y que el déficit llegará al 7,2% del PIB (6,7% si se excluyen las ayudas a la banca, que no contabilizan en déficit).