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Evasión fiscal

La ‘lista Falciani’ cuestiona los métodos de la gran banca para atraer capitales

Clientes sacan dinero en los cajeros automáticos de una sucursal del banco suizo HSBC en Londres, este lunes.

Fue hace dos años y empleó el plural. Hervé Falciani, exempleado del Hong Kong and Shangai Banking Corporation (HSBC) que ha puesto en la picota a 106.000 clientes de la entidad con cuentas opacas por valor de 78.000 millones de euros, concedió en 2010 una entrevista a Der Spiegelpara advertir sobre la forma en que los bancos (plural) captan capitales. "Los bancos como HSBC", explicó Falciani, "han creado un sistema para favorecer a los ricos a costa de la sociedad, ayudando en la evasión de impuestos y lavado de dinero".

La lista aportada por Falciani a las autoridades de varios países, entre ellos España, no sólo descubre la hipocresía –y probablemente los delitos fiscales– de dueños de grandes fortunas, sino los reclamos que ofrecen bancos como el HSBC para gestionar esas fortunas y obtener beneficios.

En EEUU, esa forma de atraer clientes y capitales ha costado multas cuantiosas al HSBC, Credit Suisse, UBS y Wegelin & Co, entre otros. En España no ha habido investigación. En 2010, cuando la lista Falciani llegó a España vía Francia, las autoridades optaron por apretar a los que figuraban en ella para recaudar lo más posible, pero no se abrió investigación sobre el HSBC.

Las últimas revelaciones del consorcio internacional de periodistas de investigación estiman que los españoles de la lista Falciani tenían 1.800 millones de euros en cuentas opacas suizas entre los años 2006 y 2007.

Invitaciones a clientes

"Invitan a sus clientes a eventos deportivos y culturales, donde se reúnen los intermediarios que explican cómo conseguir trasladar dinero a Suiza sin tener que transportar físicamente el dinero al otro lado de la frontera" explicaba Falciani en Der Sipegel. Los bancos, añadía, ofrecen en ocasiones –HSBC lo hizo– empresas pantalla para eludir el depósito del dinero en cuentas de la entidad.

Es así como el difunto banquero Emilio Botín y su familia utilizaron un entramado de sociedades opacas en Panamá y las Islas Vírgenes con testaferros para esconder quién estaba detrás de los 2.000 millones depositados en sus cuentas, según informó El Confidencial, el medio que junto a La Sexta forma parte del International Consortium of Investigative Journalists.

La familia Botín, como otros centenares de españoles descubiertos en la lista Falciani, regularizó su situación aprovechando la oferta que hizo el Gobierno de Rodríguez Zapatero tras ser detectados: presentar declaraciones complementarias para evitar sanciones.

La familia Botín pagó 211 millones para borrar la mancha fiscal. El Estado español no emprendió medidas contra la entidad. En su declaración como testigo en la Audiencia Nacional en el juicio por la extradición de Falciani, el secretario de Estado de Hacienda en la época, Carlos Ocaña, aseguró que la decisión de tomar medidas contra la entidad "excedía de nuestras competencias".

HSBC, en el radar

HSBC está en el radar de los supervisores bancarios de países como EEUU o Gran Bretaña desde hace tiempo. Pero en España, su actividad, más que polémica a la vista de los datos publicados, le ha salido muy rentable. En el auto de la Audiencia Nacional que denegó la extradición a Suiza de Falciani, se especifica que el HSBC cometió infracciones y fue sancionado en 2002, pero con cantidades mínimas.

En concreto, Economía multó al HSBC en 2002 por una infracción grave por incumplimiento de la obligación de identificación de clientes (sancionada con 925.000 euros), tres infracciones graves por incumplimiento de las obligaciones de examinar con especial atención cualquier operación vinculada al blanqueo de capitales, penadas con 300.000 euros y una infracción grave por incumplimiento de establecer procedimientos de control interno con una multa de 875.000 euros. El Supremo acreditó que la filial abrió 138 cuentas y puso como cliente a la matriz suiza, en lugar de a los clientes españoles.

En EEUU, vulnerar las reglas sobre blanqueo de capitales le salió al banco suizo mucho más caro. Para evitar un juicio penal, el banco accedió a pagar 1.470 millones de euros. Según los investigadores estadounidenses, el HSBC ignoró las leyes diseñadas para evitar el blanqueo de dinero y bloquear las transacciones con países sancionados por Washington.

La sanción estableció un récord en la época, aunque fue superada en 2014 por la multa a Credit Suisse: 2.200 millones de euros. No obstantelas acusaciones contra el HSBC eran tan gruesas que el juez que fijó la sanción, John Gleeson del distrito de Brooklin, fue criticado por blando.

Cárteles y drogas

Entre otras, las acusaciones contra el HSBC sostenían que se había convertido  en la "institución financiera preferida" por los cárteles mexicanos y colombianos, grupos de blanqueo de dinero y otras prácticas ilegales a través de lo que el Departamento de Justicia calificó como "impactantes brechas de supervisión".

El Departamento de Justicia Departamento de Justiciade EEUU elaboró el informe que sirvió de base a la sanción. El documento detalla cifras espectaculares sobre el manejo de capitales. Por ejemplo, sostiene que el HSBC envió desde México a EEUU 3.000 millones de dólares anuales entre 2004 y 2007 en billetes. La sombra de los carteles de la droga planeaba sobre las operaciones. La filial mexicana de HSBC, según los investigadores, recibía dinero de los carteles en efectivo –en cajas específicamente diseñadas– y transformaba los pesos en dólares, que enviaba a supuestos exportadores de Nueva York, que a su vez hacían negocio con empresarios de Colombia. Una red.

En México, Univisión ha detallado algunos de los supuestos clientes con cuentas opacas del HSBC. Entre ellos figuran el expresidente de la Bolsa Mexicana de Valores Luis Téllez Kuenzler; su antecesor en esa posición, Guillermo Prieto Treviño; y el exdirector de la Comisión Federal de Electricidad Alfredo Elías Ayub.

Miles de clientes

El comportamiento de HSBC, sancionado en EEUU, no es una excepción. En 2009, el banco UBS, también suizo, accedió a revelar el nombre de 4.450 clientes estadounidenses a los que ayudó a "gestionar" sus impuestos. La entidad pagó 544 millones de euros a la Administración estadounidense para evitar un proceso. El Falciani del caso UBS en EEUU fue un directivo que denunció la operativa del banco llamado Bradley Birkenfeld. Cobró 104 millones de dólares por el soplo.

Habla Falciani, el testigo clave

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Aunque los casos del HSBC y de UBS son espectaculares por lo que se ha descubierto en sus operaciones, las multas que han pagado quedan a años luz del trato cerrado por Credít Suisse el pasado año para evitar, lo mismo que sus colegas, sentarse en el banquillo y correr el riesgo de ver a sus directivos entre rejas. Credit Suisse aceptó pagar más de 2.000 millones de euros tras reconocer que había ayudado a evadir impuestos a sus clientes entre 2001 y 2008.

En 2006 Credit Suisse contaba con cerca de 22.000 cuentas bancarias de clientes estadounidenses por valor de 13.500 millones de dólares, de las que el 95 % no estaban registradas en la Internal Revenue Service (IRS), institución encargada de la recaudación de impuestos en EEUU.

Entre los condenados en EEUU por fomentar la evasión fiscal en 2013 se contó el banco privado más antiguo de Suiza, Wegelin y Co. La entidad, multada con 44 millones de dólares, cerró sus puertas. Pero lo interesante del caso es que en su declaración de culpabilidad, la entidad dijo que su actividad era el habitual de las entidades suizas. EEUU tomó nota.

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