A pesar de los avances alcanzados en los primeros años desde su aprobación en el año 2015, la pandemia de la COVID-19, los conflictos internacionales y el ascenso del populismo han generado un estancamiento global en la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
En el ecuador de su cumplimiento, nos encontramos en el momento de dar un nuevo impulso a un instrumento que busca mejorar el futuro de las próximas generaciones, conscientes de la importancia de integrar la dimensión económica, social y medioambiental para no dejar a nadie atrás.
Hace más de un mes, líderes globales, gobiernos, compañías y organizaciones de la sociedad civil se dieron cita en Nueva York, en el SDG Summit 2023, para evaluar el progreso hacia estos objetivos y trazar un camino hacia un futuro más prometedor.
Es España, La Red Española para el Desarrollo Sostenible (REDS) – SDSN Spain, Iberdrola y el Centro de Innovación en Tecnología para el Desarrollo Humano de la Universidad Politécnica de Madrid han celebrado un diálogo bajo el título “Un nuevo impulso para la Agenda 2023”, para profundizar en las claves políticas que surgieron en el mencionado SDG Summit y explorar las implicaciones, aspectos prácticos y visiones desde diversos sectores de la sociedad sobre el cumplimiento de la Agenda 2030.
El evento ha estado moderado por la presidenta de REDS-SDSN Spain, Leire Pajín, quien ha destacado “la necesidad del compromiso y del talento de todos los actores de nuestra sociedad de cara al cumplimiento de los ODS”. Asimismo, ha señalado “los contrastes que se producen alrededor de los ODS, puesto que convive la urgencia de algunos con la pasividad de otros, si bien el hecho de haber visto a científicos activistas reivindicando la necesidad de urgencia ha hecho que muchos actores se hayan concienciado”. Por último, Pajín ha puesto en valor el papel de la academia, del conocimiento, de la formación para lograr la tan necesaria transformación.
En representación del mundo académico, el investigador de la Cátedra Iberdrola para los ODS de la Universidad Politécnica de Madrid, Felipe Suárez, ha compartido con los participantes los tres aspectos más relevantes de sus investigaciones en esta área: “el interés por investigar sobre la agenda es muy grande, la investigación sobre ODS es fundamentalmente europea y no es tan interdisciplinaria como sería necesario”.
Por su parte, Sonia Fernández, jefa de Personal y Organización de ENSO, empresa energética que ayuda a las empresas en su proceso de descarbonización, ha destacado la “dificultad que tienen las PYMES de identificar los ODS en acciones concretas por el desconocimiento que se tiene en esta materia” y cómo ofrecen sus servicios como partners para poder cumplir los ODS, incidiendo en que la formación, el acompañamiento y la financiación son básicos en esta materia.
En representación de la administración regional ha participado en esta mesa redonda el secretario general de Transición Social y Agenda 2030 del Gobierno Vasco, Jonan Fernández, quien ha incidido en que “el principal problema es que hasta ahora ha habido demasiada abstracción y gran dificultad de concretar; por ello, defienden la metodología de lo concreto junto a un principio de proactividad y de localización, para concretar”. También ha destacado la necesidad de una mayor divulgación de los ODS como elemento fundamental para su logro.
Ana Estebaranz, subdirectora de Agenda 2030, de la Federación Española de Municipios y Provincias, ha destacado la importancia de la Red de Entidades Locales para la Agenda 2030 que “está permitiendo que las entidades locales estén trabajando con un compromiso especifico y con una línea de trabajo concreta, lo que les lleva a poder trabajar desde diferentes sectores en un solo hilo conductor, tanto los denominados socios titulares como los socios colaboradores que participan en la red”, trasladando con optimismo el compromiso local plenamente convencido de la consecución de los ODS.
Desde el tercer sector, Beatriz Novales, directora de Programas, Ciudadanía e Incidencia de Oxfam Intermón, ha explicado que “su actividad no solo se centra en el nivel de cooperación internacional, sino que también trabajan en tratar de minimizar las desigualdades dentro del territorio nacional, con personas en riesgo de exclusión, es decir, compatibilizando lo global y lo local” y ha incidido en la importancia de la reducción de las desigualdades en todas sus dimensiones.
Por su parte, Carmen Leiva, responsable de Sostenibilidad en la Cadena de Suministro de Pacto Mundial, ha manifestado, desde su posición del sector privado, la importancia de guiar a las empresas para lograr los ODS, puesto que “nos encontramos en un momento de transformación de los negocios, en el que éstos no solo buscan incrementar su ambición sino también en la concienciación sobre el impacto de la cadena de suministro”, todo ello enmarcado en su programa de “Proveedores Sostenibles”, contribuyendo con formación, compromiso e información para las empresas.
Como conclusiones del foro de debate, Pajín ha señalado la importancia de rendir cuentas en diferentes espacios, haciendo informes y construyendo narrativas que conecten el contacto con los ciudadanos en los gobiernos locales con la Agenda 2030; también ha destacado que es importante el compromiso de formar, en el que la academia juega un papel importante para poder implementar tanto en el sector público como en el sector privado; y por último, ha indicado que también necesitamos tener una ciudadanía activa, que se asome a la información, para acabar concienciándose y sentirse partícipes y “activistas claros” de la sostenibilidad.
La importancia de la Agenda 2030
Este año se cumplen ocho años desde que 193 países, con gobiernos de diferentes ideologías políticas, perspectivas y creencias, acordaron por unanimidad una hoja de ruta con el objetivo de acabar con la pobreza, impulsar la paz, garantizar la igualdad de oportunidades para todos y todas, y proteger el planeta que habitamos; una hoja de ruta en la que la ciencia desempeña un papel clave.
La Agenda 2030 nos brinda una visión de largo plazo, a la vez que establece desafíos que unen a actores de todos los ámbitos, desde gobiernos y empresas hasta ciudadanos comprometidos. En un mundo donde los desafíos globales como el cambio climático, la desigualdad y la pobreza persisten, la Agenda 2030 se erige como un faro de esperanza y acción conjunta. Además, promueve la innovación sistémica, alentando soluciones creativas y colaborativas que trascienden las barreras tradicionales.
Este diálogo ha supuesto una oportunidad excepcional para ser parte de esta crucial conversación sobre el papel de los ODS en los próximos años, al tratarse de un espacio donde las ideas se pueden convertir en acciones concretas, ya que se han podido compartir perspectivas y conocimientos y se han forjado alianzas para acelerar el progreso hacia los ODS, en un mix entre el mundo académico, el sector privado, la administración pública y la ciudadanía.
El impulso del SDG Summit 2023
Días antes, el secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU) Antonio Guterres, advirtió durante su intervención en el SDG Summit 2023, hace algo más de un mes, que “tan solo 15% de todos los objetivos (ODS) van por buen camino. Muchos incluso van retrocediendo”, ya que por tercer año consecutivo no ha habido avances significativos en el cumplimiento de los ODS a nivel mundial, lo que puede poner en riesgo los avances conseguidos en la década previa y su necesaria aceleración en el futuro próximo.
En un mundo donde los desafíos globales como el cambio climático, la desigualdad y la pobreza persisten, la Agenda 2030 se erige como un faro de esperanza y acción conjunta. Además, promueve la innovación sistémica, alentando soluciones creativas y colaborativas que trascienden las barreras tradicionales.
Para Mónica Oviedo, responsable del Área de Desarrollo de Sostenible y Agenda 2030 de Iberdrola, “la Agenda 2030 nos ha enseñado a trabajar de manera distinta, tanto para el sector privado, como para el resto de sectores. Nos ha facilitado una nueva perspectiva, nos enfrentamos a un reto sistémico en el que es necesario poner a las personas en el centro de nuestra acción. Los diecisiete Objetivos de Desarrollo Sostenible y la Agenda 2030 son temas muy importantes desde el punto de vista comunicativo, pero debemos verlos más allá de un simple un lenguaje. Son en realidad hitos que, como empresa privada, tenemos que contribuir a lograrlos de forma colaborativa a través de alianzas. La urgencia es más apremiante que nunca y necesitamos alianzas innovadoras para alcanzarlos. De la misma forma que tenemos que cumplir con unas ratios de solvencia, de apalancamiento o de endeudamiento, tenemos que cumplir también unos ratios indicadores de sostenibilidad, tal y como está detallado en nuestro plan estratégico ESG+F”.
Para Candela de la Sota, directora de REDS-SDSN Spain, “estamos en el momento de brindar un nuevo impulso a una hoja de ruta de consenso, evitando que las crisis nos alejen de estos 17 objetivos comunes. La Agenda 2030 es, precisamente, una hoja de ruta que nos permite abordar mejor y ser más resilientes ante las crisis”.
La Agenda 2030 nos brinda una visión de largo plazo, a la vez que establece desafíos que unen a actores de todos los ámbitos, desde gobiernos y empresas hasta ciudadanos y ciudadanas comprometidas.
A pesar de los avances alcanzados en los primeros años desde su aprobación en el año 2015, la pandemia de la COVID-19, los conflictos internacionales y el ascenso del populismo han generado un estancamiento global en la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).