El PP liga el futuro de Cifuentes a la investigación de la universidad y la presidenta dimitirá "si se lo pide Rajoy"

La estrategia del PP para hacer frente al escándalo de máster de Cristina Cifuentes pasa este miércoles por dos frentes: presión a Ciudadanos para que se pronuncie sobre si apoyaría una moción de censura con "los extremistas y radicales" de Podemos y poner el futuro de la presidenta de la Comunidad de Madrid en manos de las conclusiones que se extraigan de las investigaciones abiertas. Todo, claro, dejando en manos de la protagonista la posibilidad de dar un paso al frente y que se marche. Algo, que en estos momentos no encaja en los planteamientos de Cifuentes. Quienes la conocen creen que Rajoy, y sólo Rajoy, puede provocar que dé ese paso. "Si se lo pide Rajoy", resumen.

Así, el coordinador general del PP, Fernando Martínez-Maillo, vinculó hoy su confianza en la presidenta madrileña, Cristina Cifuentes, y el futuro del Gobierno madrileño a lo que diga la investigación que está llevando a cabo la Universidad Rey Juan Carlos.

En declaraciones en los pasillos del Congreso, evitó responder directamente sobre si el partido mantiene el apoyo a Cifuentes apuntando a las conclusiones que arroje la investigación interna de la universidad. Será ese el momento de tomar una "decisión".

En la misma conversación con los periodistas, negó que se estén buscando nombres alternativos para la presidencia de la Comunidad de Madrid. "No aceptamos ni ultimátum, ni fechas límite", advirtió en alusión a las palabras de Albert Rivera, que aseguraba ayer que se están barajando otras opciones.

Sin avances

"Desmiento que el PP esté buscando nombres alternativos. Lamento este tipo de declaraciones. No corresponde con la verdad, no estamos en esa fase. En las últimas horas no ha habido ningún tipo de avance ni de contacto", dijo.

El coordinador general insistió en que el PP es proclive a llegar a acuerdos de estabilidad y que con este tipo de declaraciones, "Ciudadanos se está precipitando en las peticiones de dimisión".

Asimismo, ha recordado que "los teléfonos siguen abiertos y nuestra disponibilidad es buscar una solución para garantizar la gobernabilidad de la Comunidad de Madrid".

Sobre el posible apoyo del partido de Rivera a una moción de censura promovida por PSOE y Podemos, Maillo instó a la formación naranja a que diga si la apoyará o no, ya no con el PSOE, sino con un partido "extremista y radical como Podemos". Como ejemplo de ese "extremismo y radicalidad", citó la detención a una persona de la "kale borroka" en Cataluña que forma parte de sus listas electorales. "Eso es lo que tiene que aclarar Cs", instó a Rivera.

"Han sido muy claros hablando del PSOE, pero no de Podemos. Todavía hay muchas cosas por hablar y escenarios por ver. En el paquete político global de la moción de censura también está Podemos", añadió.

Un proceso "lento"

El PP marca diferencias con el caso Murcia y sostiene que, aunque es un partido de Gobierno, no descarta del todo permitir que Cs se retrate en la moción del PSOE. "No hay ninguna decisión tomada a día de hoy", añaden las fuentes consultadas.

Un día antes, desde Buenos Aires, Rajoy evitó pronunciarse sobre la presidenta autonómica señalando que se trata de un asunto "de partido". No obstante, demandó "celeridad" para la resolución de la polémica. Esto ha implicado que, desde el Gobierno, este miércoles se evitaran lanzar mensajes de apoyo a Cifuentes.

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De todos modos, fuentes de la dirección nacional del PP señalan que la petición de Rajoy de "celeridad" no implica que el fin de la crisis esté cerca. "No es descartable para nada que el proceso sea lento", añaden.

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Mientras, el entorno de Cifuentes liga su futuro a lo que decida Rajoy. Entra dentro de la lógica porque Rajoy tiene siempre la última palabra sobre este tipo de decisiones. Pero es una muestra de que no se rinde. De que no se irá para facilitar las cosas al partido porque está convencida de que "no ha hecho nada mal".