Ni un calvo ni un parado. Este año, todo el protagonismo de la lotería de Navidad se lo lleva una entrañable abuela que, a buen seguro, habrá hecho llorar a algunos:
Sin embargo, la parroquia tuitera, que está hecha de otra pasta, dice que sensiblerías, las justas:
Ni un calvo ni un parado. Este año, todo el protagonismo de la lotería de Navidad se lo lleva una entrañable abuela que, a buen seguro, habrá hecho llorar a algunos: