Alfonso Guerra llama “niños malcriados” a los dirigentes de Podemos

El exvicepresidente socialista Alfonso Guerra cargó contra los que denominó "niños malcriados" y "altaneros" de Podemos. En su opinión,  cometen una "infamia" al hablar del PSOE como "el búnker", algo que considera una "pataleta infantil". Además, trasladó su rechazo al "uso del papel de seda para envolver los crímenes" de ETA.

Alfonso Guerra habló en estos términos en el acto en memoria del militante socialista Fernando Múgica que el PSE-EE llevó a cabo en su sede de San Sebastián con motivo del 20 aniversario de su asesinato por ETA.

A la cita acudieron el secretario general de los socialistas guipuzcoanos, Iñaki Arriola; su portavoz en el Consistorio donostiarra, Enerto Gasco; los diputados forales de Guipúzcoa Denis Itxaso y Marisol Garmendia; el ex presidente del PSE-EE Jesús Eguiguren; la viuda e hijos del homenajeado, Mapi Heras y Fernando, Rubén y José Mari Múgica; representantes del PNV como Román Sudupe e Iñigo Barandiaran; la viuda del que fuera edil del PP en San Sebastián asesinado por ETA Gregorio Ordóñez, y Ana Iribar.

Antes de este homenaje la familia celebró una ofrenda floral en memoria de Múgica en el cementerio donostiarra de Polloe, a la que acudieron, entre otros, el alcalde donostiarra, Eneko Goia (PNV).

Alfonso Guerra recordó que los socialistas están para "seguir la senda de claridad" que marcó Múgica y "desenmascarar a los equilibristas, a los comprensivos con el horror que fantasean con razones políticas" y para "confirmar nuestro rechazo a la utilización del papel de seda para envolver los crímenes".

"Hoy se habla en despachos y periódicos del derecho de autodeterminación", apuntó, para añadir que "esa fue la bandera del terrorismo que derramó mucha sangre inocente como la de Fernando". En este sentido, advirtió de que se pretende "desvanecer la mancha de su reivindicación con palabras edulcorantes, y le llaman derecho a decidir" pero "en verdad lo que se busca es arrebatar el derecho a la democracia y a la libertad".

"Uno de los nuevos políticos, uno de esos adanes que pretenden que con ellos se inauguró el mundo ha postulado al PSOE como el búnker junto a otros partidos democráticos con motivo de la elección como presidente del Congreso de los diputados de un compañero socialista vasco, Patxi López", apuntó, en alusión sin citarlo a las palabras del líder de Podemos, Pablo Iglesias, quien se refirió a socialistas, Ciudadanos y PP como "los tres del búnker".

Ante esta "infamia", Guerra señaló que no puede y no quiere callar, porque "estos niños malcriados que confunden la novedad con la mala educación se permiten, como una pataleta infantil, identificar al PSOE con el búnker". A su juicio, estos "jóvenes altaneros" se asemejan en su posición al "búnker que se opuso a la transición política en febrero de 1981".

"Esos nuevos comparten su desprecio por la transición democrática con aquel búnker que quiso acabar con la libertad, una infamia", censuró, para añadir que "gente como ellos pervierten las palabras y terminan instalando un gulag en las sociedades democráticas".

Por otro lado, señaló que en Euskadi "fanáticos con nombres se enseñorean sobre el crimen y la persecución" y pretenden obtener "réditos y beneficios por haber matado". En este sentido, se preguntó qué se ha hecho mal para que todavía haya que reivindicar aquí "los derechos que son de naturales ejercicio en otros lugares".

"¿Qué razón histórica, si esta existiera valdría sobre la vida de tantos muertos?", insistió, para señalar que "ninguna doctrina vale más que la dignidad de un ser humano". "No hay explicación, razón, historia, ni condición política capaz de sobreponerse al derecho a vivir, al dolor de las familias, amigos y compañeros de los asesinados", subrayó. "Es imposible el triunfo de la destrucción y la barbarie", enfatizó.

"Principio irrenunciable"

Por su parte, Mendia afirmó que cuatro años después de que ETA dejó de matar "está surgiendo ya una nueva sociedad vasca, unos nuevos valores de convivencia basados en el respeto a la pluralidad y la libre identidad de todos los ciudadanos" y hay que "avanzar en ese camino", pero "sobre el recuerdo de lo aquí ocurrido" y "sobre el principio irrenunciable de que ninguna causa política puede situarse por encima de los derechos humanos". "Estamos convencidos de que la concordia ciudadana sobre la que debe establecerse el nuevo tiempo en Euskadi no puede construirse a costa del olvido de las víctimas y del dolor", subrayó.

En este contexto, abogó por "combatir la peligrosa tendencia a tergiversar los hechos" y la actitud de quienes" veinte años después, y con palabras más amables, siguen tratando de justificar los asesinatos, de enmarcarlos en un conflicto entre pueblos". "El argumento tramposo de reconocer que hubo injusticias, pero añadir acto de seguido que tenían una razón de ser", denunció, para asegurar, a continuación, que los socialistas no van a aceptar "ese juego". "Nos vamos a oponer a todo intento de dulcificar lo ocurrido", insistió.

Al respecto, aseguró que al igual que trabajan "por reconocer y reparar a todas las víctimas", pelearán porque "se deslegitimen también las causas que llevaron a personas como Fernando a ser víctimas" y porque "se diga que estuvo mal matar" y "que no hubo razones para que una organización terrorista asesinase a casi mil personas".

"Ésa, y no otra, es la frontera que todavía nos separa con quienes no hace tanto jaleaban y animaban a los terroristas. Ésa, y no otra, es la tarea pendiente que todavía tenemos como sociedad para construir una sana convivencia en democracia", afirmó.

"Herederos del terrorismo"

Por su parte, José María Múgica, hijo de Fernando, agradeció a Goia su presencia en la ofrenda floral en Polloe, "en un gesto que le honra", tras la pasada legislatura gobernada por los "bárbaros" de Bildu, "herederos del terrorismo".

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Tras recordar a su padre como un hombre de partido cuya pasión era la libertad, defendió que el PSOE debe de volver a ser "un partido fraterno y de ambición de preservar a España bajo nuestra guía que es la Constitución y a sus ciudadanos en la unidad para la libertad y para la igualdad".

También señaló que la derrota del terrorismo sigue siendo un objetivo vigente frente "a una cháchara que no significa nada", más allá de "sofismas y mentiras". "Los objetivos siguen siendo los mismos guardar historia, saber la tragedia que ha abatido esta tierra, que existió un grupo criminal que llevó a cabo un proyecto totalitario de destrucción de la tierra vasca, y hacer justicia", afirmó.

A su juicio, esa es la forma de hacer el "mejor homenaje" a las víctimas del terrorismo y quienes sufrieron "esa tragedia", así como de "preservar nuestra dignidad".