Dos editores de Mongolia han sido imputados por un juez acusados de ofensas a los sentimientos religiosos por una portada satírica donde se ironizaba sobre el belén navideño. La ilustración cambiaba la imagen de Jesús en el pesebre por el emoticono de la "mierda". Un juez de Barcelona ha admitido la denuncia contra la revista del número de diciembre, en concreto por la portada y las páginas 10 y 24.
La denuncia ha sido interpuesta por la asociación ultraderechista Manos Limpias que acusa a la revista satírica de atentar contra los cristianos y contra su fe católica, parodiando y mofándose de la figura de Jesús y de la Navidad. El sindicato se refería en su denuncia a "una serie de reportajes y artículos gravemente atentatorios".
Irán amenaza a 'Charlie Hebdo' para que no "juegue" con los musulmanes con sus caricaturas
ElDiario.es y la Ser han accedido al auto de una página donde el magistrado ve indicios de una posible infracción penal. El magistrado ha abierto una investigación contra la revista y los periodistas Darío Adanti y Pere Rusiñol, a los que ha citado a declarar el próximo miércoles 26 de julio.
La revista Mongolia se enfrenta a otras tres querellas análogas que han sido presentadas en el juzgado de Mataró. José Luis Mazón asumirá la defensa en las cuatro causas. La revista ha cargado en un comunicado contra las políticas de censura en los nuevos gobiernos PP-Vox: "Las querellas contra Mongolia son un ejemplo más del aumento del acoso contra el humor y la libertad de expresión por parte de grupos ultracatólicos en los últimos años, envalentonados por el ascenso de Vox".
En marzo de 2019 un juez ya condenó a pagar 40.000 euros más intereses y costas judiciales por una portada satírica sobre el torero José Ortega Cano. La publicación anunció en su día que el Tribunal Constitucional había inadmitido el recurso contra esa condena y avanzó que llevaría el caso ante la Justicia europea.
Dos editores de Mongolia han sido imputados por un juez acusados de ofensas a los sentimientos religiosos por una portada satírica donde se ironizaba sobre el belén navideño. La ilustración cambiaba la imagen de Jesús en el pesebre por el emoticono de la "mierda". Un juez de Barcelona ha admitido la denuncia contra la revista del número de diciembre, en concreto por la portada y las páginas 10 y 24.