El futuro de Cataluña
Coixet lamenta los insultos para los que dicen "con respeto y honestidad" lo que piensan
La directora de cine Isabel Coixet publica este miércoles una carta en El País en la que lamenta el "odio", el "miedo" y los insultos que padecen muchos catalanes que, como ella, pagan "un alto precio" por "decir con respeto y honestidad lo que uno piensa". La directora arranca el texto afirmando tener la cara encendida "no de vergüenza, sino de rabia", tras ser insultada por "individuos con banderas esteladas atadas al cuello" que le gritan "fascista" a las puertas de su casa.
Bajo el título de Tierra de nadie, Coixet asegura en la misiva que el "pensamiento único del independentismo" plasmado en "insultos y descalificaciones" lo lleva padeciendo desde hace tiempo, e igual que ella lo soportan todos los que "no seguimos el pensamiento único del independentismo y manifestamos nuestro desacuerdo".
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"En estos últimos meses el odio que hemos suscitado está alcanzando cotas inusitadas", señala la cineasta, que continúa: "Pero esta es la tercera vez que me gritan fascista en lo que va de semana (la primera que contesto) y hay algo en mí que se está rompiendo. Me doy cuenta con una claridad espeluznante que, pase lo que pase, no hay sitio para mí ni para nadie que se atreva a pensar por su cuenta en este lugar que me ha visto nacer".
Coixet recuerda que ha condenado "absolutamente la brutalidad policial" o que ha pedido "la dimisión inmediata de Rajoy", pero que si al mismo tiempo "no condenas la actuación del Govern, inmediatamente eres un enemigo, fascista, fascistoide, franquista, la hez". Hace hincapié en "el miedo que se ha instalado como esporas en la piel de los que callan", de los que "ni en la intimidad del hogar pueden hablar para que los niños no les oigan y en el cole no se metan con ellos".
La cineasta recurre en el mensaje a "minimizar lo que me pasa para no alimentar más el monstruo del odio que no me haría diferente de los que me insultan", y concluye: "Nunca creí que el precio a pagar por decir con respeto y con honestidad lo que uno piensa iba a ser tan alto. Y sin embargo, no cambiaría por nada esta seca y silenciosa tierra de nadie en la que me hallo".