Los abogados del rey emérito han defendido este martes, durante una vista celebrada en la Corte de Apelaciones de Inglaterra y Gales, que si su examante Corinna Larsen implica al CNI en el acoso que dice haber sufrido por parte de Juan Carlos I el hecho de que los servicios secretos del Estado intervinieran implica que eran "actos soberanos" que estarían amparados por la inmunidad.
Así lo ha plasmado uno de los abogados de Juan Carlos en un largo alegato de unas dos horas y media en el que se ha agarrado a las "acusaciones específicas" relatadas por Larsen en su demanda ante los tribunales británicos que describen dos pasajes concretos: una visita que le habría hecho en el entonces jefe del CNI Félix Sanz Roldán en Londres y un registro que agentes del CNI habrían llevado a cabo en su vivienda de Mónaco, ha recogido Europa Press.
El letrado ha razonado que, si según la versión de Larsen el CNI la acosó en una "misión encubierta" orquestada por Sanz Roldán supuestamente por mandato del entonces rey, se trataría de un caso "clásico" de "actos soberanos" que están amparados por la inmunidad.
Y ello independientemente de que dichos actos pudieran suponer un "abuso de poder" por parte de los agentes estatales implicados en ellos, ha subrayado el abogado del ex jefe de Estado citando abundante jurisprudencia al respecto.
El representante legal de Larsen, por su parte, en una intervención de unos 45 minutos que se ha visto cortada por un receso de una hora, ha incidido en que el antiguo monarca solo estaría protegido por la inmunidad en el caso de que dichos actos hubieran sido en interés "oficial", esto es, del Estado español, si bien en este caso ha argumentado que lo habrían sido en un mero interés personal, en beneficio propio.
Hasta la abdicación
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El objetivo de esta vista, que continuará a partir de las 15.00 (hora española), es que las partes expongan sus argumentos respecto a la decisión adoptada el pasado 24 de marzo por el juez Matthew Nicklin de no reconocer inmunidad ninguna al rey emérito.
El 18 de julio, los magistrados británicos autorizaron a los abogados del emérito a recurrir la decisión de Nicklin, pero ya acotaron que solo respecto a los hechos transcurridos entre 2012 y 2014, cuando aún era jefe de Estado, ya que entendieron que en los hechos que habrían tenido lugar después de la abdicación el juez británico estuvo acertado al no apreciar inmunidad.
La empresaria fija el marco temporal del presunto acoso entre 2012 y 2020. De acuerdo con la demanda, Juan Carlos I la habría acosado después de que ella pusiera fin a la relación que habían mantenido. Primero para procurar que la retomaran y después a modo de venganza para perjudicarla en sus negocios.
Los abogados del rey emérito han defendido este martes, durante una vista celebrada en la Corte de Apelaciones de Inglaterra y Gales, que si su examante Corinna Larsen implica al CNI en el acoso que dice haber sufrido por parte de Juan Carlos I el hecho de que los servicios secretos del Estado intervinieran implica que eran "actos soberanos" que estarían amparados por la inmunidad.