El Gobierno insiste en que “es una consulta inútil” mientras la Fiscalía actúa

Pasadas las 21.00 horas de este domingo, una hora después del cierre de los colegios electorales, el ministro de Justicia ofreció una comparecencia sin preguntas. Se trata de la reacción oficial del Gobierno a este 9-N.

Sin moverse un ápice del argumentario del PP y del Ejecutivo en este último año, Rafael Catalá señaló que lo ocurrido este domingo en Cataluña es "un simulacro inútil y estéril". "Al margen de cualquier marco jurídico", añadió. 

Según señaló el titular de Justicia "España es un régimen democrático consolidado, en el que existe libertad de expresión y manifestación y en el que las consultas populares se rigen por estrictas normas que garantizan la imparcialidad y la neutralidad. Ninguno de esos requisitos se han dado en esta jornada".

A juicio de Catalá, "el proceso se ha llevado a cabo al margen de cualquier marco jurídico preexistente; no tiene amparo ni en las leyes catalanas ni en decreto de convocatoria alguno". Sobre sus promotores, sostuvo: "Han renunciado a cualquier apariencia de neutralidad, convertidos en juez y parte del proceso y ni siquiera se ha garantizado la igualdad de todos los catalanes ante el simulacro de consulta"

La Fiscalía seguirá investigando

En este sentido, mantuvo que La Fiscalía General del Estado continúa recabando datos para "ejercer en los próximos días las acciones legales que correspondan". 

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A su juicio, el órdago de Artur Mas con la apertura de los colegios electorales constituye "un acto de pura propaganda que carece de efectos jurídicos y solo ha servido para exacerbar la división de los catalanes, para tensionar las relaciones políticas dentro y fuera de Cataluña".

Por su parte, La presidenta del PPC, Alicia Sánchez-Camacho, aseguró que “lo que se está haciendo en Cataluña es una farsa y un pucherazo democrático”, en referencia al hecho de que el propio presidente de ERC, Oriol Junqueras, presidiese una mesa de votación.

En esta línea, señaló que “algunos están haciendo un engaño masivo a los catalanes diciéndoles que van a decidir algo sobre su futuro. Es una mentira”. “Sabemos que los cortesanos de la Generalitat aplaudirán, que los medios públicos de la Generalitat les harán el traje a medida y magnificarán los resultados, pero la verdad es que la mayoría de los catalanes no participarán de esta farsa porque no les interesan las verbenas separatistas”, añadió.