Inquietud en el PP por la próxima encuesta del CIS, marcada por el ébola y las ‘tarjetas B’

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Dirigentes del PP han expresado su preocupación ante la fotografía electoral que pueda ofrecer el barómetro de opinión del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) del mes de octubre, el próximo estudio que incluye estimación de voto, pues las entrevistas se han realizado en pleno escándalo de las tarjetas opacas de Caja Madrid y en los primeros días de la crisis del ébola en España.

Esta encuesta, cuyos resultados se esperan para principios de noviembre, se basa en cerca de 2.500 entrevistas personales realizadas en las dos últimas semanas, en un contexto político adverso para el PP, según admitieron fuentes de los conservadores a Europa Press.

Y es que, a lo ocurrido a finales de septiembre –la dimisión del ministro Alberto Ruiz-Gallardón tras frustrase la reforma del aborto y la convocatoria de la consulta soberanista catalana–, se une la aparición del escándalo de las tarjetas, que viene copando los informativos desde el día 3 y que ha salpicado a los grandes partidos y a figuras tan destacadas del PP como su exvicepresidente Rodrigo Rato.

La rectificación del ébola no entra en la encuesta

Las entrevistas también se han hecho en los días siguientes a la aparición del primer caso de ébola en Europa, en de la española Teresa Romero, las polémicas protagonizadas por el consejero madrileño de Sanidad, Javier Rodríguez, y la controvertida rueda de prensa inicial de la ministra Ana Mato. No fue hasta el día 10, una fecha que posiblemente ya no entre en el trabajo de campo de la encuesta, cuando se creó el comité político científico que preside Soraya Sáenz de Santamaría.

En la última encuesta con estimación de voto, correspondiente al mes de julio, tanto el PP como el PSOE marcaron sus peores registros de los últimos años, con un 30 y un 20,2%, respectivamente. Pese a todo, los conservadores ampliaron hasta los 8,8 puntos su ventaja sobre los socialistas, pero entonces era el PSOE de Alfredo Pérez Rubalcaba, pues la encuesta se hizo antes de que Pedro Sánchez se hiciera con las riendas de Ferraz.

La preocupación del PP se fundamenta en el temor de que, en el contexto político de octubre, sus expectativas no mejoren respecto a julio mientras que el PSOE puede recuperarse, aunque sólo sea por el efecto de la llegada de una nueva dirección.

Podemos ya superó al PSOE en intención de voto

Y luego está el fenómeno Podemos, que en julio llegó a situarse como tercera fuerza política del país con una estimación de voto del 15,3% e incluso compitió de igual a igual con los dos grandes partidos en voto ya decidido: 12,8% del PP, 11,9% de Podemos y 10,6% del PSOE.

La irrupción del partido de Pablo Iglesias en aquella encuesta hizo retroceder tanto a IU como a UPyD, cuya portavoz nacional, Rosa Díez, perdió por primera vez en julio el primer puesto en la lista de valoración de líderes políticos. Ahora en octubre, IU está inmersa en un proceso de búsqueda de confluencia de la izquierda mientras el partido magenta ha vivido una crisis con su cabeza de lista en las europeas, Francisco Sosa Wagner, y ha abierto negociaciones con Ciudadanos.

Dirigentes del PP han expresado su preocupación ante la fotografía electoral que pueda ofrecer el barómetro de opinión del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) del mes de octubre, el próximo estudio que incluye estimación de voto, pues las entrevistas se han realizado en pleno escándalo de las tarjetas opacas de Caja Madrid y en los primeros días de la crisis del ébola en España.

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