Expertos del Centro Europeo para la prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC) concluyeron, tras visitar desde el pasado jueves 9 de octubre las instalaciones del Hospital Carlos III de Madrid, que la infraestructura "actual" de este centro sanitario "no está diseñada para cubrir este tipo de emergencias". Este hospital es en el que se trató a los religiosos fallecidos afectados por ébola y en el que está ingresada Teresa Romero, la técnica de enfermería afectada por el virus, así como otras 16 personas que son consideradas contactos de alto riesgo, según el último balance oficial difundido por el Gobierno en la mañana de este sábado.
Que las instalaciones no son las adecuadas es una de las "consideraciones iniciales" que hicieron los inspectores de esta agencia dependiente de la Unión Europea, que tiene como misión evaluar y proporcionar información sobre amenazas para la salud procedentes de enfermedades infecciosas. Esta observación contrasta con las declaraciones que hizo Mariano Rajoy el pasado miércoles en Milán, cuando afirmó que sus colegas europeos –con los que se había reunido en una cumbre sobre el empleo– le habían felicitado y comentado que las cosas se estaban "haciendo muy bien" en España en relación a la crisis del ébola.
La constatación hecha ahora por expertos de la agencia europea sobre enfermedades infecciosas –que creen, no obstante, que las actuaciones "que se han llevado a cabo y continúan realizándose tienden a mejorar" las instalaciones– vienen a refrendar las quejas del personal sanitario, que vienen denunciando en los últimos meses la carencia de recursos para atender a posibles casos de ébola. De hecho, cuando comenzó el proceso de integración con La Paz, en el Carlos III se cerraron la UCI, los laboratorios de microbiología, el servicio de anatomía patológica o el banco de sangre, tal y como se describe en una notificación enviada al juzgado por profesionales de enfermería que, sin embargo, fue archivada.
Ver másLa crisis del ébola se cuela en los corrillos de la primera recepción de los reyes por el 12 de octubre
Sobre las instalaciones, el doctor Daniel Bernabéu, radiólogo de La Paz y presidente del sindicato médico AMYTS, aseguró en declaraciones a infoLibre que las esclusas (las habitaciones puente que dan acceso a las estancias de aislamiento donde están los pacientes infectados y en la que los profesionales se desprenden de los trajes y el material infectado) son tan pequeñas que sólo cabe una persona y que no hay el espacio suficiente para deshacerse del traje "con comodidad". "Es un sitio pequeño, incómodo para hacer una labor que es crítica y que puede durar hasta cuarenta minutos. De hecho, los compañeros que indican cómo se retira el traje tienen que permanecer fuera de la estancia y observar el proceso a través de una ventana tipo ojo de buey. Llegaron incluso a instalarse unos espejos para que la visualización de esta persona fuera mejor", detalló.
Una protección "adecuada"
Por otro lado, tras revisar los trabajos del personal sanitario y los medios de los que disponen los expertos sí señalaron que la actuación de los profesionales del hospital es "correcta" y que "se ajusta a los protocolos establecidos". Sobre la protección del personal sanitario determinaron que es "la adecuada", aunque señalaron que "en el mejor de los niveles de protección siempre puede haber un accidente". No obstante, incidieron en que si las cosas se "hacen correctamente" hay una "muy baja probabilidad" de que se produzcan "accidentes fortuitos".
Expertos del Centro Europeo para la prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC) concluyeron, tras visitar desde el pasado jueves 9 de octubre las instalaciones del Hospital Carlos III de Madrid, que la infraestructura "actual" de este centro sanitario "no está diseñada para cubrir este tipo de emergencias". Este hospital es en el que se trató a los religiosos fallecidos afectados por ébola y en el que está ingresada Teresa Romero, la técnica de enfermería afectada por el virus, así como otras 16 personas que son consideradas contactos de alto riesgo, según el último balance oficial difundido por el Gobierno en la mañana de este sábado.