El PP no quiere que su tajazo a la justicia universal se demore un segundo más de la cuenta en las Cortes. Quiere, de hecho, que se tramite ya, sin dilación, en tiempo récord. Y le da igual que se le eche encima. Para marzo estará todo finiquitado y se archivarán automáticamente todas las causas en curso, una docena. Entre ellas, las del asesinato del cámara de Telecinco José Couso en la guerra de Irak, en 2003, el genocidio en el Tíbet –por el que se han cursado órdenes de detención de mandatarios chinos– o los vuelos de la CIA.
Los conservadores han puesto todos los recursos a su alcance. Primero, en lugar de que el Gobierno presentase un proyecto de ley, conminó al Grupo Popular a registrar una proposición de ley. Así, se ahorraba todos los informes jurídicos preceptivos que habrían alargado la tramitación. Hace unos días, después de que el Congreso aceptase la toma en consideración de la iniciativa, pidió acortar los plazos de enmiendas y que su proposición de ley se aprobase en una única sesión plenaria. Entonces, se consideraba que todo estaría concluido para abri. Pero no. Este martes acabó de descubrir todas sus cartas: va a forzar que ese pleno se celebre la próxima semana, nada más concluir el debate del estado de la nación. Así, la ley caminaría directamente al Senado, donde se aplicaría idéntico trámite de urgencia y en lectura única. Total, la norma estará lista para marzo.
El PP primero logró en la Mesa del Congreso, donde tiene mayoría, imponer el trámite de urgencia, que acorta los plazos de presentación de enmiendas. Así, obliga a los grupos a presentar sus modificaciones antes del próximo lunes, 24 de febrero. Y en la Junta de Portavoces, que se reunió a continuación, intentó modificar el orden del día del pleno que comienza esta tarde para que se aprobase la lectura única. Es decir, que la proposición de ley no pase por ponencia ni por comisión y se discuta en el pleno. Pero necesitaba la unanimidad. La oposición en bloque rechazó las prisas del PP. El Grupo Popular no se rindió y forzó entonces la convocatoria de otro pleno para este jueves. Entonces la Cámara votará a favor del trámite de lectura única. Salvado este escollo, tendrá vía libre para que el debate de la iniciativa culmine la semana próxima, después del debate del estado de la nación.
"Aberración", "desprecio a la democracia", "vergonzoso"
"Es una aberración, es pisotear el Reglamento del Congreso. Utilizan el procedimiento de la proposición de ley para hacer trampas, para tomar atajos, y ahora quieren hurtar la tramitación y el debate parlamentario de una ley que tendrán efectos directos en muchísimas personas que tienen abiertas causas penales en los tribunales y que se sobreseerán automáticamente cuando entre en vigor", reprochó Soraya Rodríguez, la portavoz socialista. Igual de contundente fue Joan Coscubiela, portavoz adjunto de Izquierda Plural (IU-ICV-CHA): "El PP ha demostrado que está dispuesto incluso a cargarse el Estado de derecho para imponer su política", evidenciando "oscurantismo y desprecio a la democracia". El dirigente ecosocialista denunció además la "connivencia" del presidente de la Cámara, Jesús Posada, que no ha puesto pega alguna. "Hemos llegado a un límite, hay cosas que el PP debiera hacer solo", abundó cuando se le preguntó si IU-ICV-CHA va a intentar que más grupos se sumen a su petición de informe jurídico.
También el portavoz del PNV, Aitor Esteban, expresó sus quejas por las prisas "inaceptables" del PP. Se ve claramente que el objetivo no es negociar. Es cargarse la justicia universal –denunció el diputado peneuvista–. Si ya se habían plegado y se habían agachado ante los poderes internacionales y económicos, pues ahora un doble pliego. Es verdaderamente vergonzoso lo que está haciendo el PP".
PP: "Somos un país soberano"
Los conservadores justificaron sin mucha dificultad sus prisas por aprobar la reforma. Obedecen a la defensa del "interés general de los españoles" y a evitar los problemas que, a su juicio, la legislación vigente está produciento. Hay que cortar cuanto antes, alegó Alfonso Alonso, portavoz del Grupo Popular, "lo que son fuentes de conflicto que ponen en riesgo la posición internacional de España". No especificó, claro, cuáles son esos "conflictos" que amenazan a España. La reforma, dijo, concederá a nuestro país una imagen de solidez, seriedad y seguridad jurídica.
Alonso explicó que el mecanismo de urgencia y lectura única no es tan inusual, y fue el que se empleó para la modificación exprés del artículo 135 de la Constitución, pactada por PSOE y PP en el verano de 2011. El portavoz negó que el Gobierno esté actuando bajo presión de otros países, caso de China o Estados Unidos: "Somos un país soberano, pero un país responsable, que tiene que tener una legislación acorde".
El PP no quiere que su tajazo a la justicia universal se demore un segundo más de la cuenta en las Cortes. Quiere, de hecho, que se tramite ya, sin dilación, en tiempo récord. Y le da igual que se le eche encima. Para marzo estará todo finiquitado y se archivarán automáticamente todas las causas en curso, una docena. Entre ellas, las del asesinato del cámara de Telecinco José Couso en la guerra de Irak, en 2003, el genocidio en el Tíbet –por el que se han cursado órdenes de detención de mandatarios chinos– o los vuelos de la CIA.