El PP de Madrid busca vías para forzar a Rajoy a designar candidatos

Tras una falsa tregua motivada por las elecciones europeas del pasado 25 de mayo, el PP de Madrid, liderado por Esperanza Aguirre, vuelve a la carga para exigir a la dirección nacional del partido que designe cuanto antes a los candidatos que concurrirán a la Comunidad y al Ayuntamiento en nombre del Partido Popular en las municipales y autonómicas de mayo de 2015. Así se puso de manifiesto hace una semana en un desayuno informativo protagonizado por Ignacio González, presidente de la Comunidad de Madrid, cita en la que urgió a Mariano Rajoy a que tome una decisión "cuanto antes". Y así se ha puesto también de manifiesto en las reuniones internas que se han celebrado desde el 25-M en la formación.

El PP de Madrid lleva varios meses señalando que sería "un error" que pasara el otoño sin que los madrileños conozcan a los cabezas de lista del partido para el consistorio y para el Gobierno regional. Y ahora se declaran más convencidos todavía a tenor de los resultados del 25-M. "Los votantes nos han dado una pista de su nivel de enfado. Hay que poner remedio a esto cuanto antes, ponernos a trabajar... Y nada mejor que los ciudadanos se familiaricen con los candidatos", resalta un dirigente regional.

Será muy difícil que el PP de Madrid, una formación en la que el poder lo retienen los fieles a Aguirre, contemple como mero espectador a los candidatos que proponga la dirección nacional del partido –es a Génova a quien corresponde designar los cabeza de lista de las comunidades y las grandes ciudades según marcan los estatutos del partido–. De hecho, no es un secreto que la dirección regional va a pelear por ubicar a sus propios candidatos y el pulso de poder se espera intenso. Mientras llega este momento, los conservadores madrileños están decididos a incrementar su presión para que Génova mueva ficha. Los dirigentes consultados por infoLibre apuntan a varias vías. La que gana más adeptos es la de empezar a designar a los candidatos a los municipios de la Comunidad de Madrid a la vuelta de las vacaciones de verano, una atribución que sí se le reserva al Comité Electoral Regional en las normas que rigen el funcionamiento interno de la formación conservadora.

Es una forma de dirigir la presión hacia la dirección nacional, de poner el foco sobre Génova, de que se visualice, llegado el caso, que los únicos puestos sin candidato son los de la Comunidad y el Ayuntamiento. De hecho, se baraja la posibilidad de celebrar un gran acto de partido a la vuelta de verano que serviría como pistoletazo de salida a un año electoral y en el que podrían estar ya estos candidatos designados. 

Tanto la dirección nacional del PP como la regional coinciden en la importancia de Madrid para el Partido Popular. Perder la mayoría absoluta como pronostican los últimos sondeos publicados sería un mazazo para la formación presidida por Mariano Rajoy y podría anticipar una derrota en las generales que se celebrarán meses después.

Génova: se cumplirán los estatutos

Mientras, en Génova esgrimen los estatutos cada vez que un miembro del PP de la capital desliza la posibilidad de intentar frenar un "dedazo" de Rajoy a la hora de designar a los cabezas de lista. "Es la dirección nacional del partido junto al Comité Electoral Nacional quienes tienen esa competencia. Y la decisión será tomada cuando el partido considere oportuno", señalan desde la formación. Esto no es óbice para que algunos de los dirigentes consultados consideren que si Rajoy va a apostar por caras nuevas o diferentes para Madrid, la decisión debería ser comunicada cuando antes para que "hagan el rodaje" y los ciudadanos los identifiquen. El principal problema que tendría este escenario para los conservadores es de índole interna, puesto que se cuenta con que el PP de Madrid dé la batalla. No es, no obstante, una situación inédita en el partido de Rajoy, en el que Madrid suele dar algún que otro dolor de cabeza. Sonada es la pugna que Esperanza Aguirre y Alberto Ruiz-Gallardón mantuvieron en 2008 a cuenta del deseo de ambos de ser incluidos en las listas al Congreso. Al final, ambos perdieron y se quedaron fuera de la candidatura.

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El dilema de Rajoy

La dirección nacional del PP no se ha pronunciado todavía sobre ninguno posible candidato. Pero tampoco se ha pronunciado sobre las posibilidades que tienen Ignacio González y la alcaldesa Ana Botella de encabezar una candidatura. En el partido, junto a estos nombres, también integran las quinielas la delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, y la propia Aguirre. La principal incógnita que se plantea y que sólo puede resolver Mariano Rajoy es la de si está dispuesto a que el poder en Madrid vuelva a quedar en manos del aguirrismo o da un golpe de mando a la hora de elegir cabezas de lista que culminaría con otra persona al frente del PP de Madrid en el próximo congreso regional que se celebre.

Cuentan las fuentes consultadas que la dirección nacional del partido ya hizo un amago de desbancar a Aguirre de la presidencia del partido en septiembre de 2012. La líder de los conservadores madrileños había renunciado a la presidencia de la Comunidad de Madrid y Rajoy vio en esta coyuntura la oportunidad perfecta para ubicar a otra persona al frente del partido en Madrid. Las mismas fuentes sostienen que fue María Dolores de Cospedal, secretaria general del partido, la que planteó la posibilidad de que dejara su cargo. La presidenta se negó. Por aquellas fechas, el recambio previsto era Ana Mato, ministra de Sanidad.