El PP ve “prematuro” abrir la batalla de Madrid

Cuando Mariano Rajoy dio el visto bueno, a finales de 2011, a que Ana Botella sucediera a Alberto Ruiz-Gallardón al frente del Ayuntamiento de Madrid sabía que el debate sobre el próximo candidato al consistorio iba a estallar tarde o temprano. Lo mismo ocurrió cuando en septiembre de 2012 Ignacio González heredó la presidencia de la Comunidad de Madrid de manos de Esperanza Aguirre. También sabía que el tema había sido cerrado en falso. Lo que no esperaba es que ambos casos fueran a estallarle tan pronto, cuando quedan dos años para los próximos comicios. 

En la dirección nacional del partido no quieren oir ni hablar de los próximos cabezas de lista a Comunidad y Ayuntamiento. Consideran que el debate es "prematuro" y que tanto González como Botella cuentan con la máxima confianza del partido para desarrollar el resto de legislatura. "Están haciendo muchos esfuerzos en medio de la crisis y cuentan con todo el apoyo del PP", asegura un miembro del Comité de Dirección que recuerda que Madrid, por la cuestión de la capitalidad está siempre en el punto de mira. "En Madrid tienen lugar las mayores manifestaciones, las marchas de la 'marea blanca', de la 'marea verde', las concentraciones más numerosas del 15-M... es el escenario aglutinador de las protestas contra las políticas del Gobierno. Y eso hay que tenerlo en cuenta", añade un diputado. 

El miedo a perder Madrid

Lo que no impide el empeño del equipo de Rajoy en cerrar este debate es la inquietud en el partido por el desgaste que están sufriendo los herederos de los que fueron candidatos en 2011 a Comunidad y Ayuntamiento. Un desgaste del que hablan las encuestas publicadas. Y un escaparate perfecto para que quienes aspiran a ascender en política o quienes están interesados en que cambie el mapa de poder empiecen a mostrar sus cartas.

Es en este contexto en el que un sector del PP entiende lo que califica de "sobreexposición" de Esperanza Aguirre de las últimas semanas. Todo empezó con un post en su blog instando a Rajoy a que emprenda una "reforma radical" de la administración, continuó con su reclamación de la esencia del liberalismo y conluyó con un sonoro enfrentamiento con el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro a cuenta de la subida de impuestos. subida de impuestos. 

El entorno de la expresidenta de la Comunidad de Madrid se muestran convencidos de que tras su actitud no se esconde ningún tipo de ambición política. "Simplemente quiere generar un debate. Y lo hace en los órganos de partido correspondientes, a la cara", justifica un dirigente madrileño. Otros, sin embargo, van más allá y consideran que está empezando a tomar posiciones de cara a una posible candidatura al Ayuntamiento de Madrid para 2015. "Ana Botella está muy desgastada, la tragedia del 'Madrid Arena' es una losa para su gestión y muy bien le tiene que ir los próximos años para que Rajoy siga contando con ella", analiza un diputado regional.

La misma fuente considera que la presidenta del PP de Madrid añora ser alcaldesa y que el presidente del Gobierno estaría dispuesto a contar con ella, pese a sus diferencias, si las encuestas demuestran que Aguirre sería capaz de conservar el Ayuntamiento madrileño para los conservadores. Los suyos están convencidos de que arrasaría, de que ella, por sí misma, arrastraría votos tanto para el consistorio como para el Gobierno regional.

La pregunta que se plantearía entonces es si el líder del PP iba a estar dispuesto a cambiar solo de candidata al Ayuntamiento sin tocar a Ignacio González como cabeza de lista a la Comunidad. Hombre fuerte de Aguirre en los últimos años, todas las fuentes consultadas coinciden en que desde que asumió la presidencia ha intentado limar asperezas con la dirección nacional del partido. La muestra de ello se producirá este lunes en un Foro convocado por el diario ABC en el que será arropado por ministros del Gobierno y por la plana mayor del partido.

La opción Cifuentes

La expresidenta quiere marcarle otra vez el paso a Rajoy

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A este escenario hay que sumar la entrada con fuerza de un nuevo actor. Se trata de Cristina Cifuentes, delegada del Gobierno en Madrid. Se trata de Cristina Cifuentes, delegada del Gobierno en Madrid. Su nombre venía sonando en los últimos meses como posible recambio tanto para la Comunidad, como para el Ayuntamiento. Incluso se habla de ella para suceder a Aguirre al frente del PP de Madrid. Estos rumores han ido cobrando fuerza esta semana después de que la número dos del PP, María Dolores de Cospedal, la amadrinara en un desayuno informativo organizado por Europa Press. Tanta fuerza cobraron que la secretaria general del partido tuvo después que frenar en seco estas especulaciones en rueda de prensa.

En el PP insisten en que este desayuno llevaba mucho tiempo planeado y en que nada tiene que ver con el futuro paisaje del PP en Madrid porque no es nada que ahora esté en juego.

Menos ruido levanta el nombre de Lucía Figar, consejera de Educación de la Comunidad de Madrid, y a la que, al igual que a Cifuentes, muchos ven como perfil a no perder de vista en el futuro escenario político madrileño. Ha quien considera que su bajo perfil, intentando siempre huir de los focos y de las polémicas, gusta mucho en la dirección nacional del partido.