El presidente está “convencido de la inocencia” de la infanta

8

No quiso concretar sus líneas rojas en lo que a la negociación parlamentaria de la reforma de la ley del aborto se refiere. Tampoco dio pista alguna sobre su hoja de ruta para Cataluña más allá de su compromiso de que "no se va a celebrar". Ni precisar cómo va a aplicarse la rebaja del IRPF que anunciará este año y empezará a aplicarse en 2015. Pero sí quiso mojarse por el futuro judicial de la infanta Cristina de Borbón, imputada por un delito contra la Hacienda Pública y blanqueo de capitales.

El presidente del Gobierno, que concedió este lunes una entrevista en Antena 3, se salió del argumentario del Consejo de Ministros para el escándalo judicial que afecta a la hija del rey. Hasta la fecha, Rajoy se amparaba en el respeto al trabajo de los jueces para no pronunciarse. Pero este lunes, quiso ir más allá. No faltó esa coletilla que insta a dejar trabajar a la Justicia –"Tengo que respetar las decisiones de los jueces y los fiscales", dijo– y acto seguido mostró su absoluto convencimiento "de que las cosas le irán bien".

"Estoy convencido de su inocencia", dijo Rajoy al tiempo que recalcó que "todos somos iguales ante la ley". Es precisamente lo que dijo el rey en su discurso de Nochebuena en 2011, cuando Urdangarin empezaba a estar en el punto de mira por implicación en el caso Nóos.

Tras esta defensa cerrada de la hija del rey Juan Carlos, la entrevistadora, Gloria Lomana, le preguntó si consideraba que sería bueno que la infanta renunciara a sus derechos para quitar presión a este caso. Su respuesta fue rotunda: "No".

Este apoyo cerrado del presidente del Gobierno se produce una semana después de que el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, se mostrara a favor de que la Audiencia de Palma dé un trato especial a la infanta cuando vaya a declarar. A su juicio, sería bueno que ésta se evite el "paseíllo" a fin de evitar "penas paralelas". Una tesis a la que también se sumaría la presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre.

Rajoy recordó que habla todas las semanas con el monarca y que, como es lógico, "le duelen estas cosas", dijo en alusión a la situación judicial de Cristina de Borbón.

Dejando al margen el caso Nóos, el tema que más tiempo consumió de esta entrevista fue el repaso a la situación económica. "Se están produciendo ya datos positivos", dijo. No obstante, no quiso precisar cuándo percibirán los ciudadanos esos efectos positivos de los que hablan las cifras macroeconómicas. "Estoy en condiciones de decirle a los españoles que lo peor ya ha pasado. Pronto podrán comprobar que los esfuerzos tendrán resultados", fue su respuesta.

Rajoy ha incumplido su programa electoral. Él mismo lo recordó en esta entrevista. Quizá por ello, evitó hacer promesas muy concretas. La más clara que hizo fue la de que cuando termine esta legislatura habrá menos parados que cuando llegó. Pero si bien en un principio se mostró "convencido" de que de aquí a noviembre de 2015 abandonarán el paro 632.000 personas, antes de terminar la entrevista dio marcha atrás para señalar que no le gusta dar cifras exactas.

"¿Es capaz de empeñar su palabra de que no habrá más recortes en sanidad, educación...?",

se le preguntaría después. Y, de nuevo, tras otro rodeo, el presidente respondió que no tiene "previsto hacer más recortes en el gasto que los que están previstos en el presupuesto de este año".

El "lío del aborto"

No es un secreto que para el presidente del Gobierno, la reforma de la ley del aborto que encomendó a Ruiz-Gallardón, se ha convertido en un problema. Tanto a nivel interno, dentro de su propio partido, como en sus relaciones con el resto de fuerzas parlamentarias. En esta materia, poco se movió de lo ya dicho con anterioridad. Rajoy se mostró dispuesto a trabajar para lograr el mayor consenso posible. Pero no entró a valorar la posibilidad de que esta nueva ley se asimile más a la de 1985, que tanto alaba el PP en las últimas semanas, y recupere el supuesto de malformación del feto.

"Estoy dispuesto a hablar. Lo que no estoy dispuesto es a adelantar mis posiciones", dijo. "Nuestra intención, dentro de la doctrina del Tribunal Constitucional, es llegar al mayor acuerdo", recalcó.

Respecto al caso Bárcenas, el presidente del Gobierno dijo haber pedido perdón ya en el Congreso de los Diputados y aseguró haber roto su relación con él. Además, señaló que no le ha vuelto a escribir mensajes de texto.

La irrupción de Vox

Menos de una semana después de que el exidirigente del PP vasco Santiago Abascal y el exfuncionario de prisiones José Antonio Ortega Lara anunciaran la creación de un nuevo partido, Vox, Rajoy no ocultó su preocupación.

"Siempre es preferible que esas cosas no ocurran. Pero estas cosas ocurren en democracia y no son algo tan extraño", valoró.

Su fría relación con José María Aznar volvió a ponerse de manifiesto cuando no supo precisar cuándo se habían visto por última vez. "Mis relaciones con Aznar son buenas, lo que pasa es que no nos vemos mucho".

Gallardón espera que la Audiencia dé trato de favor a la infanta y le evite el 'paseíllo'

Ver más

Defensa cerrada de sus ministros

Una vez más, hizo una defensa cerrada de todos sus ministros. Y subrayó que si por el fuera terminaría la legislatura con los mismos. "Son ministros que han tenido el coraje de tomar decisiones difíciles", valoró.

"A los ministros que toman decisiones difíciles, los voy a apoyar siempre. A veces es duro y se siente poco apoyo", sentenció.

No quiso concretar sus líneas rojas en lo que a la negociación parlamentaria de la reforma de la ley del aborto se refiere. Tampoco dio pista alguna sobre su hoja de ruta para Cataluña más allá de su compromiso de que "no se va a celebrar". Ni precisar cómo va a aplicarse la rebaja del IRPF que anunciará este año y empezará a aplicarse en 2015. Pero sí quiso mojarse por el futuro judicial de la infanta Cristina de Borbón, imputada por un delito contra la Hacienda Pública y blanqueo de capitales.

Más sobre este tema
>