El presidente riojano encargó a dos miembros de su Gobierno negociar con el Santander la financiación de la sede del PP

Pedro Sanz, presidente de La Rioja desde 1995, designó en 2008 a dos miembros e su Gobierno regional, el consejero de Hacienda y el director general de Presupuestos, como “interlocutores” ante el Banco de Santander para negociar el préstamo de 900.000 euros con que afrontar la compra de una sede para el PP en Logroño.

Así consta en un documento aportado por el banco al juez Pablo Ruz e incorporado a la pieza separada donde se investiga el supuesto uso de 180.000 euros de dinero negro de la caja B del partido para la adquisición de uno de los locales comerciales que terminarían integrándose en la nueva sede.

Con fecha de 26 de mayo de 2008, Bárcenas hizo un apunte de 200.000 euros junto al que escribió esto: "Entrega de La Rioja". La Policía cree que estamos ante uno de los episodios de blanqueo o reintroducción en el circuito detectados en la contabilidad paralela del PP: una organización territorial entregaba a la sede central en metálico una donación opaca y la sede central devolvía el dinero ya por cauces ordinarios, mediante banco o cheques. O sea, con absoluta apariencia de pulcritud.

Aunque no se trata aquí de la adjudicación de un contrato público a cambio –presuntamente– de donativos sino de las conversaciones con el mayor banco del país para la obtención de un crédito, el acento vuelve a estar en este episodio situado sobre uno de los puntos clave la investigación sobre los papeles de Bárcenas: los viajes de ida y vuelta desde la frontera del  PP como partido a sus gobiernos como administraciones públicas. Y viceversa.

De hecho, el directivo del Santander que escribió la misiva recomendando la concesión del préstamo aportó el siguiente argumento: “Desde aquí apoyamos la propuesta, ya que devolvemos la confianza que el presidente [Pedro Sanz] deposita en nosotros y eso nos puede permitir obtener un mayor grado de vinculación con la Comunidad Autónoma de La Rioja gobernada por el Partido Popular, que en la actualidad no es cliente [del Santander] en la comunidad”. El texto resulta tan meridiano que no precisa aclaraciones.

Firmado por el entonces director de instituciones del Santander en La Rioja y dirigida a otro cargo del banco solo identificado por su nombre de pila, la carta relata cómo el hecho de que el PP hubiera solicitado en exclusiva al Santander un préstamo de 900.000 euros para financiar su sede debía atribuirse directamente a Pedro Sanz. Sus motivos, el “agradecimiento a la visita realizada por nuestro presidente [el recientemente fallecido Emilio Botín] y director general a mediados del año pasado a su residencia en el transcurso de la firma del convenio con la Universidad de la Rioja”.

La invocación implícita a Botín figura en el primer párrafo. El último contiene numeradas dos indicaciones inequívocas. “Queremos insistir en que se valore quién nos está haciendo esta propuesta” arranca el texto para, a continuación, marcar los dos puntos clave: “1º. Ordenado por el presidente de la Comunidad Autónoma de La Rioja que se proponga solo a nuestra entidad en agradecimiento a nuestro presidente y a nuestro director general"

Y este es el segundo punto: "2º. Los interlocutores que ha designado para reunirse y plantearse esta operación han sido el secretario general del Partido Popular de La Rioja y senador nacional [Carlos Cuevas], el consejero de Hacienda de la Comunidad [Juan José Muñoz] y el director general de Planificación y Presupuestos de la Comunidad [Jesús Francisco Rojas Soto], con los que nos hemos reunido en la mañana de ayer”.

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Todo indica que el banco estaba dispuesto a magnificar las potencialidades económicas del PP con tal de cerrar una operación que podría mejorar su posición ante el Gobierno regional.

Entre los documentos entregados por el Santander al juez Ruz figura un informe “confidencial” cuyo último párrafo, referido al PP riojano, dice lo siguiente: “Por los datos que nos han facilitado tienen unos ingresos por parte del Parlamento Riojano de unos 800 mil (sic) euros, que vamos a intentar que nos los domicilien al pasar a ser su banco financiador”.  En otro documento anterior, esa cifra se ve rebajada a 400.000 euros, que pese a todo continúa siendo desorbitada.

A priori, ambos números se perfilan descabellados. Para que el PP riojano obtuviera del Parlamento autonómico 800.000 euros, cada habitante de los 317.501 censados durante 2008 en esa pequeña comunidad debería haber desembolsado solo con ese fin 2,51 euros al año.