La diferencia entre el número de avales presentados y el voto arrojado en las urnas este domingo por la militancia socialista –especialmente, en la candidatura de Susana Díaz, que consiguió casi 1.200 votos menos que avales válidos, un 2% menos– alentó toda clase de especulaciones sobre supuestas presiones a afiliados para que prestaran su apoyo a la aspirante andaluza, que pretendía hacer una demostración de fuerza frente a Sánchez recogiendo el máximo número de firmas de militantes.
La dirección del partido puso a disposición de cada aspirante dos formularios distintos: uno para recoger avales individuales y otro para colectivos. En estos últimos los afiliados tienen que apuntar su nombre, sus apellidos, su fecha de nacimiento, su DNI y poner su firma. Sin embargo, no tienen que adjuntar una fotocopia del documento de identidad, como sí ocurre con los avales individuales, donde también hay que incluir todos los datos citados anteriormente. En el caso de los avales colectivos una persona se responsabiliza de que las personas que firman han manifestado pertenecer al cuerpo electoral, así como su voluntad de otorgar su aval al candidato en cuestión.
Pues bien, aunque en público los tres equipos defienden la ejemplaridad y limpieza del proceso, en privado, sin embargo, fuentes de las tres candidaturas admiten a infoLibre que las distorsión entre firmas y votos "tiene su origen en un recurso abusivo a los avales colectivos". No descartan que en algún caso concreto sí se hayan podido producir presiones a militantes. De hecho, Patxi López denunció en plena campaña que en la recogida de avales había habido "presiones y coacciones".
Las fuentes consultadas señalan que ese uso incorrecto se suele producir de dos maneras: "Los líderes de cada agrupación saben si un militante participa o no en la vida del partido. En todas las agrupaciones hay un porcentaje de afiliados que nadie conoce. Y cuando existe mucha presión para recoger avales, esos responsables de una agrupación pueden tener la tentación de incluir entre los avales colectivos los datos de afiliados que no participan activamente, sin su consentimiento. Una segunda posibilidad, que ocurre con mayor frecuencia, es que ese responsable de agrupación se ponga en contacto con afiliados para pedirles permiso para incluir sus datos en listas de avales colectivos a favor de un candidato en concreto y que el militante le diga que sí, aunque no tenga previsto votar a ese candidato concreto".
Formulario de avales colectivos a Susana Díaz.
En conversación con este diario varios dirigentes señalan que los avales colectivos suponen una una suerte de "invitación a hacer pequeñas trampas" en un contexto de presión para recabar apoyos a favor de un candidato. En estos procesos de primarias es cuando toda la maquinaria del aparato del partido se pone en marcha y es habitual que haya reclamaciones en cadena de dirigentes de más rango a los que están en escalas más inferiores, que son los que tienen contacto directo con las bases, para que consigan determinado número de firmas. "La presión no es en realidad para el militante, sino para el responsable de una agrupación que se compromete a lograr ‘x’ avales ante el secretario provincial", explican dirigentes socialistas. Nada garantiza, sin embargo, que esos avales se conviertan en votos porque el sufragio es en urna y secreto.
Resulta llamativo que alrededor del 90% de los casi 125.000 avales válidos fueran colectivos, según datos facilitados por miembros de las tres candidaturas. De hecho, estas mismas fuentes confirman que en los avales individuales Pedro Sánchez ganó "clarísimamente". Algunas fuentes sostienen incluso que dobló a los recopilados por Díaz. infoLibre reclamó oficialmente esta información al gabinete de comunicación del PSOE, pero no obtuvo respuesta a las preguntas formuladas (ver La caja negra al final de esta información).
En este sentido, los dirigentes consultados sostienen que habría que poner fin al sistema de avales colectivos y apuestan por un sistema de firmas individuales, incluso con un número máximo de avales por candidatura, para acabar con las presiones a cargos intermedios del partido y evitar este tipo de competiciones entre los equipos de los precandidatos.
Para el proceso de verificación de los avales, el PSOE contó con la colaboración de una empresa externa. Los formularios con los avales se separaron previamente entre individuales o colectivos y, estos últimos, en montones dependiendo del número de firmas incluidas en cada hoja (un mínimo de 1 y un máximo de 10). Después se pasaban por un escáner que identificaba cualquier error respecto a la base de datos de militantes del partido. En caso de duda o error, un equipo humano formado en conjunto por medio centenar de personas se encargaba de revisarlo.
El porcentaje de avales invalidados en las tres candidaturas no fue muy diferente: el 8,8% en el caso de Patxi López, el 6,7% en el de Pedro Sánchez y el 5,9% en el de Díaz. Las causas principales de anulación fueron la existencia de avalistas no válidos y las duplicidades a múltiples candidatos. Por otro lado, las firmas repetidas al mismo candidato apenas superaron las 800.
Avales y votos
Tras el tajante resultado del domingo, la batalla por los avales es, sin duda, cosa del pasado. Sin embargo, en el entorno de Díaz asumen que fue el primer indicio claro de que las cosas no iban tan bien como esperaban. Los afines a la presidenta andaluza esperaban ue Sánchez obtuviera entre 25.000 y 30.000 firmas. Como mucho, 35.000. Un día antes de la entrega pensaban que con sus 64.000, el 40% de ellas conseguidas en Andalucía, podrían incluso doblar el número de respaldos de su competidor y asestarle así un duro golpe. Sin embargo, Sánchez presentó 57.524 avales, de los que fueron validados 53.692, el 93%. Los avales válidos de Díaz fueron finalmente 60.231, el 94%.
Las especulaciones sobre las supuestas presiones a afiliados empezaron a tomar fuerza tras conocerse la voluntad expresada en las urnas por los afiliados socialistas este domingo: Sánchez consiguió 74.223 votos. Es decir, consiguió mejorar en 20.531 su cifra de avales válidos. Obtuvo, por tanto, un 38,2% más de votos que respaldos cuando todavía era precandidato. Díaz, sin embargo, recabó 59.041 votos, lo que supone empeorar su cifra de avales en un -2% (-1.190 votos).
Formulario de aval individual a Pedro Sánchez.
La diferencia es más clara en Andalucía, aunque en este caso se toman como referencia los avales presentados, pues el partido no facilitó cifras del respaldo que había conseguido cada aspirante por autonomías. Juan Cornejo, secretario de Organización del PSOE de Andalucía, dijo este lunes en rueda de prensa que en las primarias en Andalucía Susana Díaz había sacado "más votos que avales", aunque no precisó el número de avales. El partido tampoco los hizo públicos a petición de infoLibre.
El equipo de la presidenta regional presentó 26.551 avales de militantes andaluces, pero en las urnas sólo consiguió 25.112 votos en su comunidad. Es decir, 1.439 menos (-5,4%). Díaz también consiguió menos votos que avales en la Comunitat Valenciana (-19,6%), Aragón (-16,5%), Canarias (-14,2%), Madrid (-12,2%), Galicia (-10,6%), Murcia (-9,3%), Castilla-La Mancha (-4,8%) y Castilla y León (-4,1%).
FERRAZ NO RESPONDE
infoLibre se puso en contacto este 23 de mayo con el departamento de comunicación del PSOE para remitirle varias cuestiones. Las preguntas trasladadas, que no han sido respondidas hasta el momento, son las siguientes:
1) Respecto a los avales presentados:
1.1 ¿De los 131.845 avales presentados, cuántos fueron individuales y cuántos colectivos?
1.2 ¿Del total de avales individuales presentados, cuál fue el reparto por candidaturas?
1.3 ¿Del total de avales colectivos presentados, cuál fue el reparto por candidaturas?
2) Respecto a los avales válidos:
2.1 ¿De los 123.373 avales válidos, cuántos fueron individuales y cuántos colectivos?
2.2 ¿Del total de avales válidos individuales, cuál fue el reparto por candidaturas?
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2.3 ¿Del total de avales válidos colectivos, cuál fue el reparto por candidaturas?
3) ¿Por qué en los avales individuales hay que aportar una fotocopia del DNI y en los colectivos no?
4) ¿Cuáles han sido las principales causas de anulación de avales?
La diferencia entre el número de avales presentados y el voto arrojado en las urnas este domingo por la militancia socialista –especialmente, en la candidatura de Susana Díaz, que consiguió casi 1.200 votos menos que avales válidos, un 2% menos– alentó toda clase de especulaciones sobre supuestas presiones a afiliados para que prestaran su apoyo a la aspirante andaluza, que pretendía hacer una demostración de fuerza frente a Sánchez recogiendo el máximo número de firmas de militantes.