La XV Legislatura ha echado a andar. La constitución de las Cortes Generales marcó el rumbo político con el bloque progresista logrando armar una mayoría absoluta con los nacionalistas y los independentistas para controlar la Mesa del Congreso y con la imagen de soledad del Partido Popular, que hasta perdió los apoyos de Vox en las votaciones del jueves.
La composición de la Mesa del Congreso (órgano de dirección de la Cámara Baja) pone sobre la mesa que Pedro Sánchez y Yolanda Díaz pueden aunar más votos que Alberto Núñez Feijóo y tienen más posibilidades de sacar adelante una investidura que el líder de los populares.
Los 178 apoyos del PSOE, Sumar. ERC, EH Bildu, PNV, BNG y Junts auparon a Francina Armengol como presidenta del Congreso de los Diputados, además de atar una mayoría en la Mesa con dos vicepresidencias (para Alfonso Rodríguez Gómez de Celis y Esther Gil) y dos puestos en las Secretarías (Gerardo Pisarello e Isaura Leal), todos ellos del PSOE y de Sumar.
Divorcio entre el PP y Vox
La derecha salió totalmente rota de la votación del jueves en el Congreso con la Mesa. El PP sólo pudo aunar 139 votos para Cuca Gamarra (los 137 del PP y los dos diputados de UPN y Coalición Canaria). Y supuso una ruptura entre los populares y Vox, que no apoyaron a los candidatos de Feijóo para la Mesa después de que el PP les llamara a primera hora para informarles de que no cederían sus votos para que la ultraderecha tuviera representación.
La votación de la Mesa del Congreso era la primera gran prueba de fuego para las mayorías de esta legislatura y un fracaso de Pedro Sánchez hubiera puesto el foco en una posible repetición electoral. Pero finalmente el socialista logró atraer a los independentistas, aunque estos aseguran que el acuerdo sólo pasa por esta votación y que no presupone un voto afirmativo para la investidura.
Se habló hasta el último momento y fue una noche muy larga, como reconocieron algunos de los negociadores, pero el pacto llegó a punto de sonar el timbre del Congreso. El punto de encuentro pasa principalmente por el impulso a las lenguas cooficiales, con los socialistas comprometiéndose a implantarlas en el Congreso y vehicularlas en las instituciones europeas. Fue esencial como prueba de que se iba en serio que el ministro de Asuntos Exteriores en funciones, José Manuel Albares, remitiera una carta a la Presidencia del Consejo de la UE para impulsar el reconocimiento del catalán, el gallego y el euskera en el régimen lingüístico (lo que requerirá una modificación del reglamento comunitario).
Asimismo, el PSOE y Sumar se han comprometido con la creación de dos comisiones de investigación: una sobre los atentados del 17 de agosto de 2017 en Cataluña y otra sobre el espionaje del caso Pegasus. Otro de los puntos marcados en el acuerdo, según explicó Esquerra Republicana, es seguir con el proceso de desjudicialización del conflicto catalán, aunque no se incluye una ley de amnistía, como había pedido el independentismo.
Como consecuencia de estos acuerdos, el propio Congreso de los Diputados implantará la utilización en las sesiones plenarias de las lenguas cooficiales, algo a lo que se ha comprometido en primera persona la nueva presidenta de la Cámara durante su primer discurso. Una intervención en la que también Armengol quiso resaltar la lucha contra la violencia machista, como contrapunto de las medidas y discursos que recorren las instituciones gobernadas por el PP y Vox tras las elecciones autonómicas y municipales del 28 de mayo.
"¿A qué investidura va a ir Feijóo?"
En La Moncloa, según fuentes consultadas, la fotografía de la votación del jueves evidencia que hay una mayoría que puede armar un Gobierno frente a la soledad del Partido Popular, que no es capaz ni de retener a Vox. Para los socialistas, el líder del PP queda muy tocado después de este jueves. Uno de los dirigentes con más poder de Ferraz decía al salir de la Cámara Baja: “¿Pero a qué investidura va a ir Feijóo?”
Fuentes socialistas subrayan que hay que ir, no obstante, paso a paso y que la investidura es otra “etapa nueva”. Por lo que habrá de nuevo negociaciones con todos los grupos para ese momento. Pero trasladan que sólo Sánchez es capaz de lograr los acuerdos: “Feijóo dijo el miércoles que tenía 171-172 votos y ha salido del Congreso con 139”. “El desastre es mayúsculo y lo inhabilita para aspirar a nada ahora mismo. Una vez más se han creído sus propios cuentos, como pasó con las encuestas”, añaden desde Ferraz.
El análisis que hace la dirección del PSOE pasa por esta idea: “Feijóo es hoy un líder muy mermado, al que la prensa de derechas está dando muy duro. Nadie en su partido, salvo su núcleo duro, comparte ni entiende qué diablos ha hecho hoy en el Congreso. Solo hay un candidato viable para la investidura y Feijóo ha tenido este jueves una masterclass de democracia parlamentaria”.
A la espera de Felipe VI
Ver másArmengol, investida presidenta del Congreso por mayoría absoluta con los votos de Junts
Las miradas ahora están puestas en la futura sesión de investidura (que no tiene fecha). Francina Armengol acude este viernes al Palacio de la Zarzuela para reunirse con Felipe VI, con el que tiene buena relación de su etapa como presidenta de Balears y las estancias del monarca en Mallorca. Los grupos tienen cinco días, desde la sesión del jueves, para constituirse y posteriormente el monarca fijará la fecha de la ronda de consultas.
En esta ronda se puede dar una situación inédita: que dos candidatos le digan al monarca que lo quieren intentar. El artículo 99 de la Constitución Española fija el procedimiento pero sólo señala que el rey designará a un candidato, pero no da el criterio exacto. Los propios expertos constitucionalistas difieren si debería ofrecérselo al más votado el 23J o abrir paso al que tenga más apoyos en la Cámara. El PSOE, a través de Patxi López, señaló este jueves que el líder popular no debe ir a esa investidura. Además, el propio Sánchez pidió esta semana a los populares que dejen de presionar a Felipe VI.
Para lograr la investidura, el candidato necesita en una primera votación mayoría absoluta (176 escaños como mínimo). En caso de no lograrla, se repite a las 48 horas y vale tener mas síes que noes. Si tampoco prospera, los aspirantes tienen dos meses para intentarlo. En el caso extremo de que nadie lo logre, se convocarían de nuevo elecciones generales. Esta vía no disgusta a Feijóo, que ha llegado a decir que prefiere comicios a un Gobierno de Sánchez. En cambio, el presidente en funciones ha trasladado a su núcleo duro en privado que no contempla tener que ir a las urnas.
La XV Legislatura ha echado a andar. La constitución de las Cortes Generales marcó el rumbo político con el bloque progresista logrando armar una mayoría absoluta con los nacionalistas y los independentistas para controlar la Mesa del Congreso y con la imagen de soledad del Partido Popular, que hasta perdió los apoyos de Vox en las votaciones del jueves.