Adrián de la Joya, dueño de la cuenta en Suiza donde OHL pagó presuntamente una comisión de 1,4 millones de euros a cambio de la adjudicación del tren de Navalcarnero, declaró que el alto ejecutivo de la constructora Javier López Madrid le había indicado que el dinero era “para un político”. A preguntas de los investigadores respondió que el nombre que le dio López Madrid era el de Ildefonso de Miguel, según ha podido saber infoLibre. De Miguel fue durante años gerente del Canal de Isabel II y hombre de máxima confianza de Ignacio González. El domicilio y las empresas de De Miguel fueron registradas el primer día de la operación Lezo, pero él no fue detenido, al contrario que González y otras 11 personas.
Javier López Madrid, tras ser detenido por agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil en la medianoche del jueves, negó de forma rotunda que desde OHL se hubiese pagado comisión alguna a cambio de la adjudicación de obras, ni en el caso de Navalcarnero ni en ningún otro. A última hora del viernes, López Madrid prestó declaración ante el juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco, responsable del caso. El juez ordenó para él prisión eludible bajo fianza de cien mil euros.
Adrián de la Joya es un empresario afincado desde hace años en Suiza. Este jueves declaró tanto ante los investigadores de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil como ante el juez Velasco. Su versión fue la siguiente: en 2007, su amigo Javier López Madrid, le dijo si quería “ganar” un dinero. Se trataba de una transferencia que OHL tenía que realizar de forma opaca. Él acepto y decidió utilizar como vehículo una sociedad de su propiedad, la panameña Lauryn Group, que a su vez tenía abierta una cuenta en el banco suizo Anglo Irish Bank.
La transferencia, por importe de 1,4 millones de euros, se realizó desde una filial de OHL en México. Sin embargo, siempre según la versión ofrecida por Adrián de la Joya, cuando López Madrid le dijo que el destinatario del dinero era un político, él se negó a realizar la transferencia. A preguntas de los investigadores, el empresario afincado en Suiza respondió que el nombre que le había dado el ejecutivo de OHL era el de Ildefonso de Miguel, gerente del Canal de Isabel II entre 2004 y 2009 y hombre de la máxima confianza de Ignacio González en aquella época. Por tanto, siempre según su declaración, el dinero no salió de la cuenta de Lauryn Group.
¿Y por qué decidió entonces Adrián de la Joya quedarse con el dinero? El empresario lo justificó indicando que había realizado labores de intermediación para OHL en un proyecto minero en Burkina Faso, que en aquel momento la constructora aún no le había abonado, así que se quedó con la transferencia de 1,4 millones de euros como compensación.
En libertad sin fianza
Aunque las explicaciones de De la Joya puedan parecer extrañas a priori, los investigadores destacan que está colaborando con la Justicia y creen básicamente su versión. Al menos, en un punto clave: que el dinero recibido por Lauryn Group en la cuenta suiza no se transfirió finalmente a ningún político. De hecho, tras su declaración, el juez decretó su puesta en libertad sin fianza.
En dicha cuenta del Anglo Irish Bank había más dinero, y no sólo los 1,4 millones de la transferencia de OHL, pero De la Joya detalló que se trataba de inversiones financieras. Los investigadores no encontraron ninguna otra cantidad relacionada con políticos o con el Partido Popular.
En abril de 2009, la Cadena Ser difundió un vídeo con el espionaje que un detective había realizado a Ignacio González, Ildefonso de Miguel y Edmundo Rodríguez –entonces responsable de los negocios del Canal de Isabel II en América Latina y ahora consejero de la editora de La Razón, para quien Velasco dictaminó este viernes prisión sin fianza– en un viaje a Cartagena de Indias (Colombia). En una de las escenas del vídeo se observa a los compañeros de viaje desayunando y en el informe escrito elaborado por el detective se afirma que los acompañantes del entonces vicepresidente de la Comunidad de Madrid hablan en ese momento de "un bufete panameño llamado IGRA y un banco suizo, el Anglo Irish Bank, una referencia para mover los fondos y cheques en Lauryn Group Inc en Panamá". Según dicho informe, González no participa en dicha conversación.
Pocas semanas después de la difusión de esta grabación, Adrián de la Joya disolvió la empresa panameña Lauryn Group y transfirió los fondos que tenía dicha sociedad en Suiza a otra cuenta de su propiedad.
López Madrid niega pago de comisiones
Javier López Madrid, yerno del dueño de OHL –Juan Miguel Villar Mir– y que ocupó el cargo de consejero delegado en la constructora, fue detenido en la medianoche del jueves en el marco de la operación Lezo. Fuentes de la investigación indicaron que ante los agentes de la UCO negó de forma tajante que OHL hubiese pagado cualquier comisión a políticos a cambio de adjudicaciones públicas, ni en este caso ni en ningún otro. En consecuencia, también desmintió que él hubiese hablado con Adrián de la Joya sobre Ildefonso de Miguel.
López Madrid y el exgerente del Canal Ildefonso De Miguel pagan las fianzas de 100.000 euros impuestas por el juez
Este jueves, tras el registro de su sede, OHL difundió un comunicado en el que afirmaba que nunca ha pagado ninguna comisión a un partido político.
López Madrid también está imputado en el caso Púnica por entregar presuntamente más de un millón de euros al entonces gerente del PP de Madrid Beltrán Gutiérrez. Las iniciales de López Madrid y de Beltrán se encontraron en una agenda incautada a Francisco Granados –ex secretario general del PP de Madrid encarcelado como presunto jefe de la trama–, en la que supuestamente anotaba el dinero que el ejecutivo de OHL daba al gerente del partido.
Hay una tercera causa judicial en la que se ha visto inmerso López Madrid: el caso de las tarjetas black de Caja Madrid. En este caso ya hay una sentencia: fue condenado a seis meses de cárcel por apropiación indebida de 35.988 euros gastados con su tarjeta opaca.
Adrián de la Joya, dueño de la cuenta en Suiza donde OHL pagó presuntamente una comisión de 1,4 millones de euros a cambio de la adjudicación del tren de Navalcarnero, declaró que el alto ejecutivo de la constructora Javier López Madrid le había indicado que el dinero era “para un político”. A preguntas de los investigadores respondió que el nombre que le dio López Madrid era el de Ildefonso de Miguel, según ha podido saber infoLibre. De Miguel fue durante años gerente del Canal de Isabel II y hombre de máxima confianza de Ignacio González. El domicilio y las empresas de De Miguel fueron registradas el primer día de la operación Lezo, pero él no fue detenido, al contrario que González y otras 11 personas.