Valenciano pide el voto de “todos los progresistas españoles” para erigir una UE “a la izquierda”

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En el último suspiro, combate a la abstención y grito al voto útil. Llamada al "voto de todos los progresistas españoles". 

El PSOE tenía que quemar las naves en su primer mitin de cierre de la campaña de las europeas, en Madrid. Gastar todas sus energías en luchar contra una abstención que se prevé alta y llamar al voto en conciencia, el del ciudadano que se siente de izquierdas pero recela de darle su confianza a los socialistas. A esos electores de corazón rojo, sin más apellidos, se dirigieron en bloque Elena Valenciano, Alfredo Pérez Rubalcaba y el secretario general del partido en Madrid, Tomás Gómez. Una y otra vez. Porque las elecciones "están en un pañuelo", muy apretadas, y todo voto cuenta. 

La apelación más rotunda la protagonizó la candidata. "Hay que votar por la Europa buena, por la Europa inteligente, por la Europa sensible, por la Europa solidaria, por la Europa de la izquierda, por esa Europa hay que votar. ¡Pido el voto a todos los progresistas españoles para la Europa buena, inteligente y sensible y solidaria, la Europa de izquierdas que necesitamos construir!", clamó Valenciano ante un auditorio enardecido. 1.500 personas reunidas en el pabellón Multiusos de la Casa de Campo de Madrid. "Somos el único partido que puede ganar las europeas", gritó Rubalcaba, demandando a los suyos un "último esfuerzo" para que convenzan a la gente de que apueste por el PSOE. "¡[Mariano] Rajoy quiere ganar para seguir haciendo lo mismo, y nosotros para que no siga haciendo lo mismo!". Y después: "Cañete perdió un debate, perdió los papeles y perderá las elecciones".

Gómez remató. Buscó el voto de todos los que han participado en las mareas multicolores en Madrid, a los que su partido ha apoyado activamente. "A los médicos que han defendido la sanidad pública, que voten al PSOE; a los que han luchado para que no cierren el colegio de sus hijos, que voten al PSOE; a los que les han cerrado las urgencia, vamos a pedirles que voten al PSOE; a los trabajadores de Telemadrid, que voten al PSOE...". El público se emocionó y empezó a corear "... que voten al PSOE" tras cada llamamiento del líder madrileño: a los que han quitado la beca de comedor, a los que han sufrido la reforma laboral, a los parados, a los parados, a los dependientes, a los mayores a los que "imponen" copagos, a las mujeres, a los jóvenes, a los autónomos... "¡Que voten, que voten, que voten!", chilló Gómez y bramó la grada. 

La derecha hizo "un 'strip tease' político"

El PSOE está totalmente convencido de que la victoria es posible el domingo. Que comenzó con mal pie la campaña, pero que el debate de Valenciano con Miguel Arias Cañete y el posdebate –los comentarios machistas por los que él sólo se disculpó pasados cinco días– sirvió para colocar el balón en su campo de juego, y para hacer que sus militantes, hasta entonces alicaídos, se enchufasen a la carrera del 25-M. Ferraz cree que la última semana ha sido decisiva para tornar las urnas a su favor. "Dije que unidos seríamos imbatibles y unidos vamos a ser imbatibles el domingo. Estamos muy cerca de ganar las elecciones y las vamos a ganar para quienes lo están perdiendo todo, porque se lo están quitando todo. Para ellos es para los que tenemos que ganar", dijo Valenciano. "El domingo tenemos que conseguir que sea la gente la que esté contenta y Rajoy el que esté preocupado, es lo que tenemos que conseguir". 

Valenciano, como el resto de oradores, y como ha venido haciendo el PSOE en toda la campaña, planteó su intervención final en Madrid en una clave ideológica, binaria. En una confrontación total de izquierda y derecha. La derecha, recordó, ha decidido "resolver la crisis" sobre la "espalda, vida y dignidad" de los trabajadores europeos. Y el PP hizo un "strip tease político": tardó en nombrar candidato porque "nadie quería dar la cara por Rajoy, luego "intentó que no hubiera debate", luego "acudió con miedo". "Perdieron el debate, perdieron la vergüenza y van a perder las elecciones", animó. 

Ese era el pie con el que la cabeza de lista introdujo un tema que ha recorrido el final de la campaña: las mujeres, a las que el PP quita "sus derechos y libertades", a quienes el PP y el exministro de Agricultura "desprecian". Las mujeres son una de las banderas que la candidata ha izado en esta carrera, junto con los jóvenes y los trabajadores. Y cuando se acordó de ellas, de aquellas que pelearon para que sus hijas llegaran hasta aquí, puso al público en pie. Pidió el voto por ellas, por toda la "gente honrada", por todos los que "se dejaron la vida en el exilio", por toda esa "gente generosa", porque una generación debe dejar "un futuro mejor" a la generación que viene detrás, porque votar a los socialistas significa luchar para que "el fascismo no vuelva a Europa de ninguna de las maneras". 

"Conocen a Elena y conocen a Cañete"

Rubalcaba se explayó más aún en lo que él mismo llamó "momento Cañete", en el "fondo del debate" que es "el machismo y el clasismo" de la derecha y que está "impregnando todas sus políticas". Y, contestando al número uno de los conservadores, le recordó que la igualdad sí es un asunto europeo, porque "Europa es eso, nació para garantizar la igualdad". "Claro que va de esto", señaló. Y va también de que una victoria del PSOE, repitió, hará que "nunca más" saque Rajoy del cajón la contrarreforma del aborto. 

A Rubalcaba se le notaba espídico, con el ánimo subido. El secretario general pidió "un último esfuerzo" a sus huestes, porque se puede "ganar", porque se puede imponer a un PP que ha atacado de forma "sañuda" y porque las campañas tienen la virtud de que son "lo más parecido a una radiografía". Y los ciudadanos "conocen a Elena y conocen a Cañete, saben cómo son". "El PSOE ha vuelto a dar la cara. ¡Hemos dado la cara! Os pido un esfuerzo adicional para convertir en victoria lo que hoy sentimos como un trabajo bien hecho, como una campaña trabajada donde hemos recuperado la cercanía con los ciudadanos". 

"¡Sí, somos unos feministas trasnochados!"

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El secretario general mostró su "agradecimiento" a su número dos, su fiel escudera, por haber reivindicado los valores socialistas y haber defendido a "muchos millones de mujeres que se han sentido insultadas por el machismo de Cañete y Rajoy". "Y ha defendido a muchos hombres que nos hemos sentido igual de insultados. ¡Estamos con vosotras! Somos unos feministas trasnochados, sí, señor Cañete, y encantados de serlo", proclamó.

Rubalcaba, Valenciano, Gómez, apelaron al corazón de la militancia, a su honestidad, a la historia que los socialistas construyeron, a los logros de los Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y Felipe González. "Os tenemos a vosotros. No tenemos sobres, pero tenemos vuestras papeletas", aseguró el secretario general, en una referencia indirecta a la corrupción y al caso Bárcenas. A ellos les dijo que sí, que el PSOE acepta que este 25-M se convierta en un "plebiscito" de las políticas de Rajoy, donde se diga "rotundamente no" a la ruptura de la sanidad universal, a la ley Wert, al recorte de becas, a la subida de tasas, al copago. "Todo eso está en juego". "Hay que votar al PSOE para que Rajoy no se sienta legitimado, ¡para todo eso hay que votar no!", advirtió. 

El de Madrid fue el primer mitin de cierre. Aún hubo otros dos más esta noche: Rubalcaba, en Alicante; Valenciano, en Sevilla. Aún para reforzar más el mensaje en dos territorios claves e intentar apuntalar la victoria que tanto ambiciona el PSOE. El 25-M es su esperanza, la salida del túnel tras amargos años de depresión. 

En el último suspiro, combate a la abstención y grito al voto útil. Llamada al "voto de todos los progresistas españoles". 

Lugar. El acto de cierre de campaña de las europeas del PSOE es triple. El primero comenzó a las seis de la tarde en Madrid, en el pabellón Multiusos de la Casa de Campo. Antes de que concluyera, Alfredo Pérez Rubalcaba tomó un AVE para cerrar en Alicante y Elena Valenciano, otro tren hasta Sevilla, para finiquitar estos 15 días con la dirigente que más poder atesora en el partido, Susana Díaz. 

Aforo. 1.500 personas. El pabellón se llenó y hubo simpatizantes que se quedaron sin silla. No ha sido, sin embargo, el mitin que ha congregado más gente en campaña. Esta misma noche, en la capital andaluza se pudo ver a más simpatizantes: más de 2.500, según la organización.

Discursos. Intervinieron, por este orden, el número 16 de la lista, el madrileño Borja Cabezón; el secretario general, Alfredo Pérez Rubalcaba; la cabeza de lista, Elena Valenciano, y el líder de los socialistas madrileños, Tomás Gómez.

La frase. "Rajoy quiere los votos para seguir haciendo lo mismo. Nosotros le vamos a ganar para que no sigan haciendo lo mismo". Alfredo Pérez Rubalcaba.

La anécdota. Un público mucho más animado, coreando los nombres de los oradores y especialmente de la candidata. Algo que no se vio en los primeros días de campaña. Efecto Cañete ha habido, al menos para la militancia. Y otra anécdota: ondearon, bien visibles, banderas arcoíris, LGTB. También fue ovacionado el concejal Pedro Zerolo, enfermo de cáncer, que hoy no estaba presente.

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