Venezuela

Beiras llama al PP “golpista”, que le pide que se marche y no vuelva

El portavoz de AGE, Xosé Manuel Beiras, en el hemiciclo del Parlamento gallego.

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El debate sobre una iniciativa impulsada por el PP gallego en la que se recoge la declaración de la Unión Europea sobre Venezuela, acabó con un nuevo enfrentamiento directo entre el portavoz de Alternativa Galega de Esquerda (AGE), Xosé Manuel Beiras, con los diputados conservadores, a los que acusó de "golpistas, racistas y fascistas".

La actitud de Beiras, que tras su intervención y antes de abandonar el hemiciclo recorrió las bancadas del PP con esas palabras y que se llegó a parar frente a diputados como Aurelio Núñez Centeno y Pedro Puy –portavoz parlamentario–, enfadó al portavoz del PP gallego, Miguel Tellado, que le espetó (pese a su ausencia): "Si le quiere hacer un favor a la democracia, lo mejor que puede hacer es marchar y no volver".

La iniciativa contó con el voto favorable del PSdeG, cuya diputada Marisol Soneira, con todo, arremetió contra el PP por haber actuado como "nacionalistas" al llevar al hemiciclo gallego una iniciativa ya debatida en la UE y en el Congreso, y quien le afeó que esta propuesta "sólo tuviese la finalidad" de "examinar", como publicó un periódico, a la oposición.

La propuesta aprobada –con los votos en contra de AGE, BNG y Mixto– supone una declaración por la que el Parlamento "asume como propio el contenido de la resolución del Parlamento Europeo, del 12 de marzo de 2015, sobre la situación de Venezuela".

También "muestra la solidaridad con el pueblo venezolano en este difícil periodo y en particular con la comunidad gallega allí residente" y solicita al Gobierno de Nicolás Maduro "que cumpla lo dispuesto en su Constitución y con sus obligaciones internacionales en lo que atañe al respeto a los derechos de libertad de expresión, asociación, reunión pacífica y pluralismo político como principios fundamentales de un sistema democrático".

"Teorías conspiratorias"

"No vale escudarse en teorías de la conspiración", advirtió, ya antes de que interviniesen los grupos parlamentarios Tellado, quien reclamó a la oposición que "defienda lo mismo que defienden" para los diputados gallegos. "Sólo pedimos el voto a favor de la democracia. Votar en contra  es votar en contra de la democracia y abstenerse es abstenerse de la democracia", avisó el portavoz conservador.

Al salir Beiras, se escuchó desde las bancadas populares un "¡vaya fiesta!" y, posteriormente, fue la presidenta de la Cámara, Pilar Rojo, la que consideró "una vergüenza el espectáculo" que se estaba dando en el hemiciclo por la actitud del diputado de AGE.

Desde la tribuna, el veterano político apeló a varios escritos del recientemente desaparecido Eduardo Galeano para acusar al expresidente José María Aznar "de ser cómplice del golpe de Estado" contra Hugo Chávez. "Son cómplices de intentar derrocar el régimen democrático [de Venezuela]", acusó. Por ello, calificó a los conservadores de "golpistas", y advirtió del "error grave" que acometería quien "apoyase" la propuesta, algo que hicieron los socialistas.

También acusó de política "racista" al PP y a la UE por "dejar morir en el Mediterráneo" a miles de inmigrantes que salen de África. "¿Quiénes son para venir a hablar de derechos humanos?", espetó, antes de volver a acusar a Aznar de "propagar la mentira" de las armas de destrucción masiva por la que "siguen hoy muriendo" miles de personas en Irak. "Son infames, racistas, golpistas y fascistas", atribuyó Beiras, que tras salir de la tribuna caminó entre la bancada de los conservadores para decirle estas acusaciones, ante el apercibimiento de la presidenta de la Cámara.

En su turno de réplica, Tellado, quien advirtió inicialmente del "grave riesgo social y político", incidió en que "es francamente lamentable acudir a teorías conspiratorias" y "un insulto a la inteligencia", y apeló a la "falta de libertades" para la oposición venezolana, así como para la población.

Asimismo, censuró que la oposición gallega "anteponga sus simpatías ideológicas" y "no sea capaz" de defender la "separación de poderes" y censuró la "escasa voluntad democrática" de la oposición. También criticó la ausencia de Beiras, ante lo que la diputada del Grupo Mixto Chelo Martínez (antes de Anova, formación que lidera el veterano político), salió en su defensa para decir "te está escuchando".

"Chinchar"

La diputada socialista Marisol Soneira calificó la propuesta como iniciativa de "chinchar" y, si bien mostró el apoyo del PSOE a la iniciativa, lamentó que los conservadores la llevasen a la Cámara autonómica. Soneira afirmó que su respaldo a la iniciativa no es "porque no haya un Gobierno legítimo" en Venezuela, sino por la "falta de garantías" de miembros de la oposición que están en la cárcel.

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Por su parte, la diputada del BNG Montse Prado acusó a los conservadores de "imperialistas fracasados" y recriminó a esta formación "estar al servicio del amo yanqui y de los poderosos", mientras ocurren investigaciones a nombres vinculados con el PP como "[Rodrigo] Rato, Rita Barberá, [Federico] Trillo y [Vicente Martínez-]Pujalte".

Además, ironizó con la defensa de la libertad de expresión por parte de un partido que ha aprobado una "ley mordaza" que establecen "sanciones por protestas" y defendió que en 19 años hubo "14 procesos electorales con observadores internacionales", que los dieron por "válidos, limpios y demócratas". "No pida para los demás lo que no están dispuestos a hacer", espetó.

Carmen Iglesias, por su parte, también se fijó en la "ley mordaza" del PP y advirtió de que las "arengas" del líder de la oposición venezolana, Henrique Capriles, para "descargar la rabia" tras el triunfo de Maduro supuso un "desenlace" que remató con "11 asesinatos y asedios".

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