Galicia
PSOE y BNG acuerdan una moción de censura en la Diputación de Lugo
El PSOE gallego y el BNG han registrado este viernes una moción de censura en la Diputación de Lugo tras haber llegado a un acuerdo y haber recibido el visto bueno del alcalde de Becerreá, Manuel Martínez, quien en junio propició que la presidencia pasase a manos del PP tras negarse a votar a un candidato socialista alternativo para presidir la institución, puesto que el BNG vetaba su propio nombre por estar imputado.
Desde este viernes son diez días hábiles los que prevé la ley, por lo que el pleno extraordinario para votar la moción ha sido convocado para el 8 de octubre, en una votación que se hará en "urna".
Gobierno bipartito
En su comparecencia conjunta los portavoces del PSOE, Darío Campos –alcalde de A Pontenova y candidato a presidir la Diputación de Lugo–, y del BNG, Antonio Veiga, coincidían en señalar que el objetivo es "recuperar un gobierno progresista y nacionalista".
Campos justificó que se quiere "seguir con los proyectos que se iniciaron con el mismo gobierno del PSOE y del BNG con el anterior presidente José Ramón Gómez Besteiro", secretario general del PSdeG. Así, citó como ejemplos los centros de día paralizados, las residencias o el Plan Ben Empregado, "que después de tres meses están paralizados", aseguró refiriéndose al Gobierno de la conservadora Elena Candia.
Por su parte, Veiga argumentó que con este paso se busca "devolverles a los lucenses un gobierno que nunca debió estar en manos del PP", ya que, según destacó, "la voluntad de los lucenses reflejada en las elecciones municipales era claramente favorable a un gobierno nacionalista y de progreso". Socialistas y nacionalistas suman en la Diputación de Lugo 13 diputados provinciales, frente a los 12 con los que cuenta el PP.
Martínez estará en el próximo Gobierno
Sobre si el alcalde de Becerreá estará en el Gobierno provincial, como él mismo ha sostenido, Darío Campos ha evitado aclarar qué área llevaría porque "se ha dado un primer paso y ese sería un segundo tema a hablar". "Primero vamos a votar la moción y después, sobre la organización, ya se hablará. Somos 13 diputados y aquí no se trata de repartir el pastel, sino de presentar un proyecto de futuro para la provincia". Manuel Martínez se encargó durante la pasada legislatura del departamento de Vías y Obras.
Negociaciones entre PSOE, BNG y Manuel Martínez
Antes de que la moción de censura fuese registrada, el PSdeG se reunió a primera hora de la mañana con Manuel Martínez en Rábade para exponerle los pormenores del acuerdo con BNG. El alcalde de Becerreá impuso como condición que el pacto se ajustase "a lo acordado con los alcaldes [socialistas] el 18 de agosto".
"Al parecer hay un acuerdo entre BNG y PSOE. Yo voy a ver ese acuerdo, si se ajusta a lo acordado con los alcaldes el 18 de agosto, Manolo Martínez firmará la moción, si no se ajusta a esas condiciones, no lo hará", afirmaba antes de estampar su firma en la moción de censura, pero sin detallar de qué puntos en concreto se trataba.
Candia defiende su gestión
Previamente a esta comparecencia conjunta de PSdeG y BNG, la presidenta de la Diputación, Elena Candia, defendió que en estos tres meses que lleva en el cargo "se hizo un trabajo serio, un trabajo responsable, estando siempre muy presentes los principios de ayudas a los que más lo necesitan y colaboración en los ayuntamientos".
Finalmente, Elena Candia no dudó en "hacer un balance muy positivo", y dejar claro que quedan "marrones" que resolver. "Algunos probablemente no tengan solución", apostilló.
La presidenta de la Diputación de Lugo da ayudas millonarias a ayuntamientos del PP a 48 horas de su cese
Ver más
Para el PP gallego es la "moción de la vergüenza"
El director de campaña del PP de Galicia para las próximas elecciones generales, José Manuel Rey Varela, ha considerado que esta es la "moción de la vergüenza". El exalcalde de Ferrol y presidente de la Federación Galega de Municipios e Provincias (Fegamp) ha dicho que "es una vergüenza que dos partidos políticos, después de todo lo que se dijeron entre ellos, sean capaces de alcanzar en los despachos una moción cuando ni siquiera han transcurrido cien días de gobierno provincial".
"Creo que la transparencia debe estar por encima de estos acuerdos que no responden a la normalidad democrática", ha señalado Varela, para concluir que no permitir a un gobierno, con la lista más votada al frente, gobernar "durante 100 días", no tiene "precedentes desde el punto de vista democrático".