Esta es la casa de todos, carajo
Esta “mileidista” expresión define muy bien a quien la dijo. Creo que su autora, Ayuso, encarna la expresión oída en cualquier tasca por aficionados a las barras de un bar. Pero lo peor nos es el bajo nivel de la política encarnada por los representantes de un populismo miserable que, como el caballo de Troya, se ha introducido en nuestras democracias con el único objetivo de alcanzar el poder utilizando precisamente la democracia para destruirla. Lo peor es la foto. Sí, la foto de los que encabezaban la reciente manifestación del PP. Da miedo o como mínimo preocupación. Los que quieren gobernar a “su España”, todos juntos.
El pasado Aznar, quizás presidente de uno de los gobiernos mas corruptos de esta débil democracia (atendiendo a la cantidad de ministros encausados), junto a M. Rajoy, que según los papeles de Bárcenas, es un personaje real, existe, pero no se le espera (con anuencia de la justicia); y cerrando la imagen, Feijóo junto a Ayuso, que representa perfectamente a Abascal, (quizás sea la razón de no salir en la foto), que quiere gobernar a una España antigua y rencorosa aunque sea utilizando el bulo como dialéctica.
Son momentos para no ser neutrales y quitar la careta a esta gente que ni idiomas hablan, y que su discurso termina con un carajo para implantar una libertad que me da miedo
Si esta plantilla gana las europeas y sus ideas entran en Europa, es para ponerse a temblar. Primero, porque encarnan la España muy alejada de Europa, si entendemos a Europa como el continente en el que la democracia alcanzó sus máximas, en cuanto a hacer posible aquel grito que proclamaba liberté, fraternité y egalité. Grito que derrotó al fascismo-nazismo, dejando en los campos de batalla a cincuenta millones de muertos, si incluyéramos a los que cayeron en las frías planicies de Rusia, la gran aliada pero a veces olvidada por ser roja, (tristemente valen mas los muertos azules que los rojos, y no solo en España).
Segundo, porque estos personajes y sus ideas, los de la foto, son los herederos de aquel franquismo (nunca lo denunciaron ni denunciarán), que exportó ingente mano de obra, a esa Europa que ellos, hipócritamente, quieren cerrar sus fronteras, a los que desean buscar un futuro, como de hecho hicieron millones de nuestros paisanos que, con su trabajo, llenaron nuestros bancos con divisas que paradójicamente ayudaron a modernizar a aquella España antigua y anti-europea. Son momentos para no ser neutrales y quitar la careta a esta gente que ni idiomas hablan, y que su discurso termina con un carajo para implantar una libertad que me da miedo.
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Eduardo Vazquez Marful es socio de infoLibre.
