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Golf, economía y sostenibilidad: la tecnología pide paso
Unos 1,2 millones de turistas extranjeros visitan España cada año por sus campos de golf, un sector que factura más de 12.000 millones de euros, según un estudio de IE University. Se trata de un importante motor económico que busca maneras de aumentar la sostenibilidad de su gestión. Una tarea a la que las nuevas tecnologías tienen mucho que aportar.
Así lo ha destacado el ministro para la Trasformación Digital y Función Pública, José Luis Escrivá, en la apertura del Curso de Verano de la Universidad Complutense “Golf y Sostenibilidad”, promovido por el Real Club de Golf La Herrería y patrocinado por Iberdrola.
“La digitalización puede mejorar el sector en diversos aspectos, como la eficiencia en las operaciones, la experiencia de los jugadores, tanto profesionales como amateurs, o el diseño y la planificación de las infraestructuras”, subrayó Escrivá.
Le acompañaron en la presentación del curso Natalia Abuín, directora de los Cursos de Verano UCM; Rocío Ingelmo, presidenta del Real Club de Golf La Herrería; Manuel Parga, director en Sostenibilidad, Marketing y RRHH del Comité Olímpico Español y Luis Gómez, director General de Iberdrola.
Dos transiciones de la mano
Para el ministro para la Trasformación Digital y Función Pública, hay dos transiciones necesarias que van de la mano: la digital y la verde.
Precisamente la transformación digital y la transición de la sostenibilidad en las empresas fueron objeto de análisis de una de las jornadas del curso en la que intervino Beatriz Crisóstomo, directora global de Innovación de Iberdrola. Junto a otros expertos acercó la experiencia en digitalización y sostenibilidad de las grandes empresas y ayudó a identificar los grandes retos del sector del golf en este sentido.
En este ámbito, la tecnología puede hacer mucho por la gestión sostenible empresarial. De hecho, la eclosión de la inteligencia artificial y del internet de las cosas permite optimizar el consumo de recursos en todo tipo de suelos y cultivos. El golf no es una excepción.
En relación con esto, Escrivá puso como ejemplo cómo la inteligencia artificial puede “monitorizar y gestionar el consumo de energía y agua en tiempo real, reduciendo el desperdicio y las emisiones de carbono” en la industria del golf.
Tecnología para una gestión más sostenible
Los campos de golf ya emplean estas herramientas para su gestión y mantenimiento. Se trata de soluciones similares a las que se aplican en el sector agritech para ahorrar agua en el riego o reducir al mínimo el uso de pesticidas, gracias a la gestión inteligente de su aplicación.
Es el caso de aplicaciones de inteligencia artificial que informan en tiempo real sobre las condiciones del campo e incluso predicen la aparición de enfermedades del césped con hasta 72 horas de antelación. También el de sistemas de irrigación basados en esta tecnología, que permiten desarrollar estrategias de riego de precisión mediante el uso de la cantidad adecuada de agua en áreas específicas.
Existen incluso experiencias en el uso de drones no solo para monitorizar el estado de los campos de golf, sino también para rociar pesticidas exactamente en el lugar en el que se necesitan. Todo esto es posible gracias al uso de sensores conectados que recaban los datos y de algoritmos que procesan esa información.
Como resultado del uso de este tipo de tecnologías es mucho más sencillo desarrollar estrategias de gestión sostenible para los campos, ya que facilitan la optimización máxima del uso de agua, energía, fertilizantes o pesticidas. Son aspectos esenciales para reducir el impacto medioambiental del sector del golf.
Se trata de mitigar riesgos asociados a la propia actividad. En el caso de los fertilizantes, reducir su uso ayuda a evitar la contaminación de aguas tanto superficiales como subterráneas que, a su vez, pueden provocar graves desequilibrios a los ecosistemas.
Algo similar ocurre con los pesticidas, que también pueden deteriorar la calidad del agua e incluso provocar pérdida de biodiversidad al afectar a otros organismos presentes en el ecosistema.
Descarbonizar la actividad
También la transición energética ha tenido su protagonismo durante el curso “Golf y Sostenibilidad”. Concretamente, ha sido la directora global de Innovación de Iberdrola quien ha destacado durante su intervención a las energías renovables como la palanca clave para la descarbonización de la economía.
“En este sentido, la transición energética debe realizarse de una manera que sea compatible con la necesidad de preservar la biodiversidad y el capital natural. Esto será posible gracias a soluciones que garanticen una energía limpia e impulsen el crecimiento industrial y la sostenibilidad económica, medioambiental y social”, añadió Beatriz Crisóstomo.
También en el ahorro de energía tienen mucho que aportar las herramientas de optimización en el mantenimiento de los campos de golf. Es el caso de las que emplean tecnología para efectuar una gestión inteligente del riego.
Sus ventajas van más allá del evidente ahorro de agua que aportan. Los propios procesos de riego consumen una importante cantidad de energía por dos motivos. Uno de ellos es que los propios sistemas de irrigación acaparan gran parte del consumo energético de un campo de golf. El otro tiene que ver con la gran cantidad de energía necesaria para producir el agua regenerada que muchos recintos utilizan para no competir por la potable.
El uso de herramientas que permiten reducir el consumo de energía junto al de energías de origen renovable son claves para potenciar la descarbonización de estas instalaciones.
Plan de sostenibilidad y normativa
Durante el curso, los asistentes han tenido también la ocasión de conocer la relación entre los campos de golf y la biodiversidad, con especies que han hecho de estos espacios su hábitat para vivir y reproducirse. Entre las actividades en las que participaron los asistentes se encontraba un taller de anillamiento científico de aves impartido por el ornitólogo José Antonio Fimia.
El desarrollo e implantación de un plan de sostenibilidad en campos de golf, el establecimiento de alianzas para afrontar los retos ambientales, sociales y económicos del sector o la adaptación de las empresas del sector a las políticas ambientales fueron otros de los temas tratados durante el curso.
La encargada de clausurarlo fue la secretaria de Estado de Turismo, Rosario Sánchez Grau, quien recordó el valor de esta actividad para desestacionalizar el turismo en España. “Nuestra prioridad es hacer de España un destino turístico sostenible, contando con la colaboración de todos los actores del turismo de golf”, destacó en su intervención.