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El coste del rescate bancario

El Gobierno alega que la fusión Bankia-BMN ayudará a recobrar el rescate, pero buena parte de los 24.000 millones se perderán

El presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, saluda al presidente de BMN, Carlos Egea (dcha.).

El Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) ha detonado la fusión de Bankia con Banco Mare Nostrum (BMN), dos de las entidades que fueron nacionalizadas durante la crisis financiera. La decisión se esperaba desde el pasado mes de septiembre, cuando el FROB anunció la contratación de asesores externos para analizar las posibilidades de la operación. Una vez recibidos los trabajos de Analistas Financieros Internacionales (AFI) y de Société Générale, el FROB ha pedido a Bankia y BMN que pongan en marcha la maquinaria para fusionarse, considerando que vender en Bolsa ambas entidades le reportará 401 millones de euros más que si las ofrece al mercado cada una por separado.

Pero lo cierto es que también se trata de la solución menos mala, toda vez que el interés de otras entidades por BMN ha sido escaso. El banco, fruto de la fusión de Caja Murcia, Caja Granada y Sa Nostra, no tiene una posición determinante de mercado y su ámbito de actuación está muy localizado. Las fuentes del sector consultadas por infoLibre aseguran que el Gobierno invitó a las principales entidades a pujar por BMN. Pero el propio FROB reconoce en su comunicación a la CNMV que Société Générale sólo ha recibido una oferta firme por el banco. Y ésta asciende a 1.300 millones de euros, por debajo del valor que el propio banco francés había calculado.

En cualquier caso, la operación tiene “toda la lógica industrial y financiera”, destacan otras fuentes bancarias. Como señala el mismo comunicado del FROB, se trata de dos entidades complementarias desde el punto de vista geográfico, por lo que el sector descarta también que se produzcan distorsiones en la competencia: “Va a ser irrelevante para el mercado”. El FROB justifica la fusión en que es “la mejor estrategia” para recuperar las ayudas públicas inyectadas en ambos bancos, tanto por esos 401 millones adicionales como por la “sinergias” que generaría la operación y que también “podrían ser capitalizadas”. El FROB las cifra en 616 millones de euros por el 100% de BMN.

Sin embargo, eso no significa que el Estado vaya a recobrar el dinero público invertido en sanear Bankia y BMN. La entidad que preside José Ignacio Goirigolzarri recibió 22.424 millones de euros para su rescate, mientras que BMN consiguió 1.645 millones. Un total de 24.069 millones de euros. El Estado, a través del FROB, posee el 65,9% y el 65% de las acciones de las dos entidades, respectivamente. Hasta el momento, Bankia ha devuelto un total de 1.835 millones de euros, sólo el 8,1% del rescate. De esa cantidad, 1.304 millones corresponden a la venta en Bolsa del 7,5% de su capital en febrero de 2014. Otros 128 millones proceden del dividendo que recibió el FROB por los beneficios obtenidos en 2014 y 194 millones más por el de 2015. Finalmente, el porcentaje que le corresponde al Estado como accionista del dividendo de 2016 asciende a 209 millones de euros.

La mitad de las ayudas públicas recibidas

Bankia vale en Bolsa 12.173 millones de euros, por lo que el 65,9% que el FROB –el Estado, todos los contribuyentes– posee de la entidad vale ahora unos 8.022 millones de euros. El 65% de los 1.300 millones en que se ha fijado el precio de BMN son 690 millones más. Es decir, el Estado podría sacar vendiendo hoy ambas entidades 8.712 millones de euros. Si a esa cifra se le suman los 1.835 millones ya devueltos por Bankia, el Estado recuperaría 10.547 millones. Añadiendo los 401 millones adicionales calculados por el FROB y los 616 millones de sinergias capitalizadas, la cantidad total ascendería a 11.564 millones de euros. Aún menos de la mitad de los 24.069 millones de euros públicos utilizados en rescatar a Bankia y BMN.

Coincidiendo con el anuncio de la fusión, las acciones de Bankia subieron en Bolsa este miércoles un 3,22%, por lo que el valor de cada título alcanza los 1,057 euros, aun así muy lejos de los 1,58 euros a que cotizaba en febrero de 2014 cuando el FROB hizo la primera y única venta de una pequeña parte de sus acciones.

Es decir, en tres años la acción de Bankia ha perdido un 33% de su valor. El FROB pretende colocar en el mercado “paquetes accionariales” de las entidades fusionadas “aprovechando los momentos más favorables de mercado” antes de diciembre de 2019, el plazo que se ha fijado el Gobierno para la completa privatización de la entidad. El fondo asegura que de esta forma “optimizará” la capacidad de recobrar las ayudas públicas concedidas a Bankia y BMN. Pero, para acercarse a un porcentaje “óptimo” de recuperación, los beneficios de ambos bancos y su valor en Bolsa deberían "multiplicarse por cifras casi imposibles", según explican las fuentes del sector consultadas: recuérdese que el actual importe bursátil de Bankia equivale sólo a la mitad de las ayudas públicas que recibió.

Las fuentes del sector apuntan también que Bankia tiene capacidad suficiente para hacerse con BMN y, de hecho, el mercado ya ha descontado que no necesitará una ampliación de capital –operación que la Unión Europea no le permitiría hacer, en cualquier caso, antes de julio–. Sí precisará de la luz verde de las autoridades de competencia de Bruselas.

Habrá recortes de plantilla

Los trabajadores despedidos en ERE se disparan un 78% en enero por culpa del sector financiero

Además, habrá otros costes. “Los de la restructuración”, advierten en el sector. Los sindicatos se han apresurado a exigir el mantenimiento del empleo en Bankia y BMN. Fuentes de UGT en la primera entidad no descartan que la fusión implique recortes del plantilla. “Exigiremos que se hagan con medidas lo menos traumáticas posible, con prejubilaciones y traslados, sobre todo teniendo en cuenta los muchos esfuerzos hechos ya en los dos bancos”, explican. Bankia ejecutó en 2012 el mayor Expediente de Regulación de Empleo (ERE) del sector financiero español, que afectó a 4.500 trabajadores, entre despidos y venta de unidades de negocio completas. Cientos de los despidos terminaron en los tribunales. El Supremo aún está pendiente de dictar sentencia en algún caso y el Tribunal Constitucional debe dictaminar igualmente sobre los recursos de amparo presentados por cuatro trabajadores. Mientras, BMN ha sufrido tres ERE desde 2010, que han recortado su plantilla a la mitad.

El problema estriba en que, pese a la complementariedad geográfica de ambas entidades, en Alicante, también en Murcia, sí se pueden producir duplicidades –Bankia integra la antigua red de Bancaja en la Comunidad Valenciana–. Igualmente estarán en el centro de la diana los servicios centrales de BMN. Además, el banco que preside Carlos Egea se apoya aún más en sus oficinas de lo que lo hace Bankia, lanzada sin freno a la transformación digital del negocio. En 2015 puso en marcha sus oficinas multicanal, con gestores remotos que dan asesoramiento personalizado a clientes digitales. Además, una vez fusionadas las empresas, habrá que equiparar las condiciones laborales de ambas plantillas. Las secciones sindicales de UGT en ambos bancos ya empezaron a intercambiar información sobre sus plantillas el pasado mes de septiembre, cuando el FROB reveló su intención de comenzar el proceso.

Tras la reestructuración sufrida, Bankia cuenta con una red de 1.866 sucursales y BMN, con 660. La plantilla de la primera incluye a 13.505 empleados, a los que la segunda añadirá otros 4.029. La entidad resultante seguirá siendo la cuarta del ránking nacional, tras Santander, BBVA y Caixabank. Sumará 190.167 millones en activos de Bankia y 38.874 millones de BMN. Éste aportará al nuevo banco un 20% tanto de los depósitos –22.600 millones– como de los créditos –22.465 millones– que posee Bankia.

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