El Gobierno ha aprobado este viernes un techo de gasto récord, que pone la primera piedra en el camino para los Presupuestos Generales de 2023. Supone un aumento del 1,1% de 196.142 millones a 198.221. El Ejecutivo ha justificado el aumento para “proteger a las clases medias y trabajadoras, así como a los colectivos vulnerables y al tejido productivo, por el impacto del alza de precios de productos energéticos”. El Gobierno hace un fuerte recorte las previsiones de crecimiento para 2022 hasta el 4,3% (antes eran del 7%) y para 2023 al 2,7% (antes, 3,5%). Este anuncio coincide con las previsiones del Fondo Monetario Internacional, que también recorta las previsiones de crecimiento de España al 4% en 2022 y que recomienda a las economías avanzadas que recorten el gasto.
La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha defendido en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que el aumento del límite de gasto “es fundamental para la recuperación económica y para garantizar el bienestar de las familias”. La vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, ha aplaudido la elevación del gasto a través de un mensaje en Twitter: “El Gobierno de España ha aprobado hoy un techo de gasto que supone la mayor cifra de nuestra historia, 198.221 M€. Es un paso decisivo para tener unos presupuestos que cubran las necesidades de la gente”.
El récord del techo de gasto viene marcado por los recursos procedentes de los fondos europeos. Sin tener en cuenta esta inyección adicional, el límite para 2023 se situaría en 173.065 millones, un 1,9% más que el de 2022, que fue de 169.787. “Esto significa que el Gobierno apuesta por incrementar la inversión al margen de los recursos europeos con el objetivo de potenciar las políticas sociales”, expresa el Ministerio de Hacienda, en un comunicado.
El techo de gasto de 2023 contempla una transferencia de 19.888 millones a la Seguridad Social, un 8,1% más que en 2022, principalmente debido al aumento de las pensiones.
El Gobierno ha actualizado los objetivos de déficit, la diferencia entre los gastos y los ingresos del Estado, y defiende que volverá a situarse por debajo del 3% del PIB en 2025. La previsión es que en 2023 baje al 3,9%. El Gobierno recuerda que venimos de un déficit del 10,1% en 2020, debido principalmente al escudo social y los ERTE aprobados para defender a los hogares y al tejido productivo durante la pandemia. El dato se redujo a un 6,8% en 2021 y que se prevé que será del 5% en en 2022.
El FMI ve nubes negras en el horizonte
La AIReF recorta una décima su previsión de crecimiento para 2022, al 4,2%, y dispara la inflación al 7,8%
El FMI ha vaticinado un estancamiento de las economías más avanzadas del mundo, y ha recortado las expectativas de crecimiento de la mayoría de los países, especialmente por el galopante dato de inflación, que ha estrechado sus cuentas públicas. “La inflación en los niveles actuales presenta un claro riesgo para la actual y futura estabilidad macroeconómica. Devolverla a los objetivos del Banco Central Europeo debería ser la máxima prioridad para los legisladores”, ha advertido el Fondo Monetario Internacional este martes en un comunicado.
El organismo constata que la mayoría de las economías avanzadas están subiendo los tipos de interés a un ritmo más rápido de lo que se preveía en abril, en respuesta a la fuerte presión inflacionaria. “El endurecimiento monetario sincronizado no tiene precedentes en la historia y se espera que sus efectos persistan, con un frenazo del crecimiento mundial el próximo año y una desaceleración de la inflación”.
El FMI advierte que vienen nubes negras. “El horizonte se ha oscurecido significativamente desde abril. El mundo podría estar al borde de una recesión global, la segunda en apenas dos años”. En este sentido, el organismo reconoce como un motivo de la inflación el aumento del gasto público generalizado, debido a la pandemia. En ese sentido, pide a los países que eviten que la política fiscal obstaculice el trabajo de la política monetaria. Aconseja “compensar” ese mayor gasto de los años anteriores con impuestos más altos o un gasto público más bajo.
El Gobierno ha aprobado este viernes un techo de gasto récord, que pone la primera piedra en el camino para los Presupuestos Generales de 2023. Supone un aumento del 1,1% de 196.142 millones a 198.221. El Ejecutivo ha justificado el aumento para “proteger a las clases medias y trabajadoras, así como a los colectivos vulnerables y al tejido productivo, por el impacto del alza de precios de productos energéticos”. El Gobierno hace un fuerte recorte las previsiones de crecimiento para 2022 hasta el 4,3% (antes eran del 7%) y para 2023 al 2,7% (antes, 3,5%). Este anuncio coincide con las previsiones del Fondo Monetario Internacional, que también recorta las previsiones de crecimiento de España al 4% en 2022 y que recomienda a las economías avanzadas que recorten el gasto.