Biden renuncia como candidato en EEUU y apuesta por Kamala Harris para competir contra Trump

El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, ha anunciado este domingo que renuncia a ser candidato del Partido Demócrata de cara a las elecciones que se celebrarán en noviembre.

A través de una carta publicada en redes sociales, y después de que distintos líderes de su partido así lo reclamaran, el mandatario estadounidense ha anunciado que agotará su mandato pero no optará a la reelección.

"Ha sido el mayor honor de mi vida servir como presidente", ha señalado en su misiva, y aunque declara que siempre ha sido su intención conseguir la reelección, reconoce que lo mejor para su partido y su país es dimitir y centrarse en sus labores como presidente durante lo que resta de mandato.

A través de un segundo mensaje, el demócrata ha señalado a su número dos, Kamala Harris, como su posible reemplazo: "Hoy quiero ofrecer mi total apoyo a Kamala para ser la candidata de nuestro partido este año. Demócratas, es hora de ir juntos y derrotar a Trump".

"Permítanme expresar mi más sincero agradecimiento al pueblo estadounidense por la fe y la confianza que han depositado en mí", añade en su carta a la ciudadanía, después de enumerar los "grandes avances" que ha labrado durante su mandato en los últimos tres años y medio. "Sé que nada de esto se habría podido hacer sin vosotros, el pueblo estadounidense. Juntos, superamos una pandemia única en un siglo y la peor crisis económica desde la Gran Depresión", añade el presidente.

Las presiones de sus filas

El expresidente estadounidense Barack Obama había expresado recientemente preocupación por las encuestas de cara a las elecciones presidenciales, que proyectan una caída del actual líder al frente de la Casa Blanca, y se había sumado a la lista de demócratas que clamaron por su retirada. Así se expresaron también importantes donantes del partido, senadores e incluso el actor George Clooney, uno de los mayores recaudadores de fondos del Partido Demócrata.

Las críticas se habían agravado a lo largo de estas últimas dos semanas después de que Biden confundiera al presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, con su homólogo ruso, Vladimir Putin durante la cumbre de la OTAN que se celebró en Washington, o a Kamala Harris con Donald Trump, durante una rueda de prensa.

Horas antes del anuncio, el republicano Mike Johnson, presidente de la Cámara de Representantes de EEUU, decía no descartar una apelación contra la sustitución de Joe Biden de cara a las elecciones al entender que los demócratas podrían estar incurriendo en una violación de la ley electoral.

El presidente ha acabado capitulando a pesar de esfuerzos como el realizado durante la pasada cumbre de la OTAN en Washington, donde permaneció una hora respondiendo preguntas de los medios en temas complejos de política exterior.

Fuentes próximas a la campaña de Biden ya dejaban entrever a principios de esta semana el comienzo de un periodo de reflexión que coincidió con el positivo por coronavirus que el presidente estadounidense confirmó el pasado miércoles, en una semana en la que Trump ha terminado por acaparar todo el espacio mediático tras sobrevivir el pasado fin de semana a un intento de asesinato durante un mitin en Pensilvania.