‘Filter For Good’: 14.000 dólares y más de 10 millones de publicaciones, la nueva ola del activismo en TikTok
En los últimos años, TikTok ha logrado un éxito que parece no tener fin. Atrayendo a millones de usuarios con su formato de videos cortos, la plataforma ha demostrado ser mucho más que una mera fuente de entretenimiento efímero, sirviendo como escenario no solo para la creatividad sino también para la acción social.
Tras la reactivación del conflicto entre Palestina e Israel el pasado mes de octubre, algunos usuarios de la red social han encontrado maneras de apoyar a la causa a través de la monetización que la propia plataforma ofrece. Este es el caso de Jourdan Johnson, una creadora de efectos estadounidense que ha encontrado en TikTok la manera de financiar ayuda humanitaria para Palestina.
A través del programa effect creators rewards, que permite monetizar el trabajo de los creadores de filtros y efectos, Johnson ha conseguido recaudar 14.000 dólares —el máximo que ofrece la plataforma—, en tan solo 10 días. Lo ha hecho gracias a su iniciativa ‘Filter For Good’, un filtro que a la publicación de este artículo ya cuenta con más de 10 millones de publicaciones. “Es sorprendente ver que algo que he creado pueda llegar a tanta gente en todo el mundo y por una buena causa”, explica la creadora a infoLibre.
Millones de usuarios, entre los que también se encuentran influencers españoles como Kappah, Berta Caparrós o Cristobal Guijorro, han participado utilizando este “filtro de las sandías”, una fruta con un importante valor simbólico en la lucha por la liberación del pueblo palestino, cuyas raíces se encuentran en el año 1967, durante la Guerra de los Seis Días. El gobierno de Israel, que se enfrentaba a una coalición formada por los países árabes vecinos, prohibió la exhibición de banderas palestinas en el territorio. La solución de aquellos que protestaban por los derechos de los palestinos fue utilizar la sandía, cuyos colores —rojo, verde, blanco y negro— coinciden con los de la bandera.
Johnson, que ha podido acceder al dinero recaudado el día 15 de diciembre, ha donado la mitad de los fondos, 7000 dolares, a la ONG Médicos Sin Fronteras. La otra mitad ha sido invertida en la compra de un total de 205 eSIMS –tarjetas electrónicas que permiten el acceso a internet–, para luchar contra el apagón electrónico al que se enfrenta el país.
Las redes sociales se han convertido en una herramienta fundamental a la hora de fomentar la acción política y la participación social. De acuerdo con Óscar Espiritusanto, periodista y doctor en investigación de medios, “la tecnología ha permitido poner en el foco cosas que estaban sucediendo, que de otra manera no habrían llegado a conocerse” y, por lo tanto, “a ponerles remedio”. Pero, advierte de que “el activismo en la red por sí solo no funciona”, destacando la necesidad de complementarlo con un activismo más tradicional.
Rabah Boughena, secretario y director de la Fundación Comité de Ayuda al Pueblo Palestino, está de acuerdo con que las redes sociales han transformado el activismo. “Hoy en día ya no hay que pegar carteles” para convocar manifestaciones y ayudar está a un clic de distancia. En definitiva, “son una herramienta muy importante”, sin ella, por ejemplo, “no nos habría llegado nada” del conflicto en Palestina, afirma.
Pero advierte de que también pueden suponer un peligro, ya que “los algoritmos a veces limitan la difusión de causas como la palestina”. En este sentido, Espiritusanto defiende la creación y utilización de espacios y medios que no dependan de las grandes empresas. “Tenemos que tener nodos locales descentralizados a través de los cuales podamos comunicarnos e informarnos sin esa censura”.
Este no es el único problema. Johnson también advierte sobre los posibles riesgos que recaudaciones como la suya pueden acarrear. “Las personas también deben hacer su debida diligencia con los creadores para asegurarse de que sus esfuerzos sean genuinos”, afirma preocupada porque este tipo de iniciativas puedan terminar convirtiéndose en estafas.
Tú a Instagram y yo a Prime Video: las 'influencers' dejan las redes sociales para conquistar el 'streaming'
Ver más
Cuando se habla de casos en los que este ciberactivismo se realiza a título personal y no desde la sociedad civil organizada, “es más difícil gestionar” su veracidad, afirma Espiritusanto, ya que estas causas pueden utilizarse “para embellecerse a uno mismo y no sería el primer caso”.
A pesar de la preocupación por parte de algunos, las redes sociales, que ya forman parte de nuestro día a día en todos los ámbitos, han llegado al mundo del activismo para quedarse. “La comunicación, creará conciencia y permitirá que la gente se movilice de más maneras”, concluye Johnson.
Después de este primer éxito, la creadora ha lanzado ‘Filter For Good 2’, en esta ocasión dedicado a la recaudación de fondos para la ayuda humanitaria en la República Democrática del Congo y que ya cuenta con más de 47.000 usos. Muchos usuarios de la plataforma se han unido a esta iniciativa, creando nuevos filtros y audios para continuar con la recaudación. “Creo que hemos descubierto una nueva forma de organizarnos”, dice. Para ella, “las redes sociales pueden ser una forma poderosa de defender causas sociales”.
