Miguel Blesa ya ha iniciado su estrategia de defensa contra la acusación de la Fiscalía Anticorrupción por haber aprobado subidas de sueldos ilegales de sus directivos y cuantificadas en 14,8 millones de euros.
Y para eso el expresidente de Caja Madrid, que junto a su número dos en la entidad, Ildefonso Sánchez Barcoj, ha sido citado el próximo 24 de febrero a declarar como investigado (imputado) en el Juzgado de Instrucción número 45 de Madrid, pretende demostrar que él no era el responsable de las subidas de sueldo denunciadas por la Fiscalía Anticorrupción.
Así, el expresidente de la entidad financiera madrileña ha reclamado al magistrado que instruye en la Audiencia Nacional el caso Bankia, Fernando Andreu, las actas de las reuniones de la Comisión de Retribuciones de la desaparecida entidad financiera madrileña.
"Interesamos el testimonio de las actas de las reuniones de la Comisión de Retribuciones de Caja Madrid con sus correspondientes anexos, incluyendo las notas manuscritas remitidas", indica el escrito firmado por el abogado Ignacio Aguilar en representación de Blesa, y que trata de obtener unos documentos que probarían la responsabilidad de este organismo en la subida de sueldos investigada por Anticorrupción.
Blesa y Rato, procesados
El expresidente de Caja Madrid, que junto a su sucesor en la entidad Rodrigo Rato ha sido ya procesado por el caso de las tarjetas blackblack, hace referencia a los documentos cuya existencia adelantó infoLibre. En ellos, se muestra que los integrantes de la Comisión de Retribuciones negociaban las subidas de los sueldos que la Fiscalía considera ilegales.
Entre los documentos aportados por la Fundación Caja Madrid al juez Andreu sobre las tarjetas black, y que ahora reclama Blesa, e incluye un manuscrito fechado el 18 de junio de 2008, fecha en la que se celebró una reunión de la Comisión de Retribuciones. Con el encabezado por "C. Retribuciones", también se puede leer: "Guillermo, ausente. Preside: ARomero". En referencia a Guillermo Marcos Guerrero y Antonio Romero. Pero el texto aporta otros datos, como por ejemplo "incremento" y "4,5%". Pero también "7.942 en 2007" y "8.300 en 2008-9". Guillermo Marcos Guerrero, representante de los impositores de la caja falleció hace varios meses.
Tal y como adelantó infoLibre, los correos de Blesa apuntaban a que siete directivos y consejeros de Caja Madrid controlaban estas tarjetasCaja Madrid. Estas eran, además del presidente Miguel Blesa, sus dos hombres de confianza: el director general, Ildefonso Sánchez Barcoj, y el secretario general, Enrique de la Torre; los tres integrantes de la comisión de retribuciones (José Antonio Moral Santín (IU), Antonio Romero (PSOE) y Guillermo Marcos), y el consejero a propuesta del PP Estanislao Rodríguez-Ponga.
Estanislao Rodríguez-Ponga
Aunque Rodríguez-Ponga no formaba parte de la Comisión de Retribuciones de forma oficial, un correo de Blesa llega a asegurar que sí había participado en una reunión "no oficial", en la que iban a hablar "de sus cosas, imagino que dieta de participadas", según consta en un mensaje de 18 de julio de 2007. Fuentes cercanas a Rodríguez-Ponga consultadas por este diario negaron que éste hubiera participado en la Comisión de Retribuciones.
El correo electrónico mencionado alude a que en la reunión de la Comisión de Retribuciones de 18 de julio de 2007 abordarían datos tales como los diferentes pagos, "y la tarjeta de consejeros". En esa cita, los representantes en Caja Madrid del PP, PSOE e IU aprobaron aumentarse las retribuciones por dietas y por las tarjetas B el mismo día en el que acordaron una subida del 8% del sueldo de Blesa y su equipo, que pasaron a cobrar 7,37 millones anuales.
Otro correo electrónico de Enrique de la Torre, de 1 de septiembre de 2009, y que sirvió para iniciar la investigación sobre las tarjetas black, confirma que la Comisión de Retribuciones era la responsable de la asignación de las retribuciones: "Quede claro, ante todo, que el tema es competencia de la Comisión de Retribuciones para todo el Grupo, incluidos consejeros y directivos de primer nivel".
El FROB y la Fiscalía
El caso de las subidas de sueldo en Caja Madrid se inició después de que el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) remitiera a la Fiscalía un expediente sobre los sueldos de la alta dirección de Caja Madrid, que incluía un perjuicio económico estimado para la entidad de 14,8 millones de euros.
Estas posibles irregularidades se refieren fundamentalmente al periodo comprendido entre 2007 y 2010. Tras la revisión de estas operaciones, el FROB encargó un estudio forensic a terceros independientes para analizar eventuales responsabilidades de administradores y directivos de la entidad.
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Colectivo Xnet
Según el informe, un total de 26 directivos de Caja Madrid y Bankia percibieron hasta 5,2 millones en total en concepto de "gratificaciones extraordinarias, liquidación de vacaciones, exceso de aportaciones en concepto de vivienda y seguros médicos", indica un dossier de la consultora PricewaterhouseCoopers (PwC) que Anticorrupción incluyó en su denuncia contra Miguel Blesa y sus ejecutivos.
El trabajo del colectivo ciudadano Xnet ha jugado un papel importante en la investigación y difusión de los correos secretos de Blesa. Y precisamente el contenido de estos mensajes ha inspirado ya dos procesos judiciales: el de las tarjetas black y ahora el caso de los sueldos de la cúpula de Caja Madrid.
Miguel Blesa ya ha iniciado su estrategia de defensa contra la acusación de la Fiscalía Anticorrupción por haber aprobado subidas de sueldos ilegales de sus directivos y cuantificadas en 14,8 millones de euros.