'Aquarius'

Calvo: "La seguridad en las fronteras no puede estar reñida con el respeto a los derechos humanos"

La vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, y el president de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, se dirigen a la rueda de prensa para hablar de la llegada del 'Aquarius'.

infoLibre

La vicepresidenta del Gobierno y ministra de la Presidencia, Relaciones con las Cortes e Igualdad, Carmen Calvo, aseguró este jueves que "la seguridad en las fronteras no puede estar reñida con el respeto a los derechos humanos", informa Europa Press.

Así lo indicó Calvo en declaraciones a los medios de comunicación en València, tras reunirse con el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, para coordinar la llegada de la flota del Aquarius, al ser preguntada por las medidas que defiende el nuevo Gobierno en la frontera con Ceuta y Melilla.

De hecho, este mismo jueves el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha defendido que se pueden controlar las fronteras y los flujos migratorios con "medios menos cruentos" y encargó un informe para suprimir las concertinas ubicadas en las vallas de Ceuta y Melilla.

Calvo aseguró que suscribe las afirmaciones del ministro e indicó que esta cuestión forma parte del trabajo inicial del Ministerio del Interior, que en algún caso será también objeto "de consideración y decisión" del Consejo de Ministros.

"Es evidente que el Gobierno de España ha dado muestras más que claras, incluso en propuestas en el Congreso de los Diputados, de que nosotros entendemos que la seguridad en las fronteras no puede estar reñida con el respeto a los derechos humanos, incluida la situaciones de asilo y refugio", subrayó.

Llegada escalonada y atención individualizada

La flota de tres barcos que transporta a los más de 600 pasajeros del Aquarius llegará de manera escalonada, previsiblemente el domingo, al puerto de València para que dé tiempo a una recepción "respetuosa y acogedora" y una atención física, psicológica y jurídica adecuada. Además, se atenderán las necesidades de cada uno de los pasajeros de manera individualizada atendiendo a sus circunstancias personales.

Según explicó Calvo, los barcos llegarán "seguramente a la zona de cruceros" del recinto portuario, aunque esta es una decisión que corresponde a los técnicos, no a políticos, y lo harán con dos o tres horas de decalaje entre cada una de las embarcaciones para garantizar una recepción "acogedora".

Tras agradecer la colaboración de la Generalitat "desde el minuto uno", explicó que había que responder a esta "crisis humanitaria" con 600 personas "sin posibilidad de llegar a ningún puerto seguro" y en una situación "de completa incertidumbre y penurias".

"Somos un país acostumbrado a responder con solvencia ante estas situaciones", dijo, resaltando que la española es "una democracia garantista" que respeta los derechos humanos y un país avanzado en las políticas sociales de refugio y ayuda.

Señaló que esta situación "concierne a Europa" porque el puerto valenciano es también frontera, pero España respondió "como no podía ser de otra manera". Asimismo, negó que este sea "un problema entre España e Italia", sino que "es un problema de España consigo misma y de la consideración que debemos cumplir por ser europeos".

Una vez atraquen los barcos, se proporcionarán las primeras atenciones sanitarias, que competen a Sanidad Exterior, y posteriormente actuará la sanidad valenciana, que "está preparada" para la operación.

En una segunda fase se atenderá de manera individualizada a cada una de estas personas para ver cuál es su situación jurídica, atender a las peticiones de asilo y prestando especialmente a la situación de los menores –especialmente los no acompañados–, que podrían haber sido víctimas de delitos como el tráfico de menores, y a las mujeres posibles víctimas de la trata con fines de explotación sexual.

Calvo detalló que el Ministerio del Interior tiene una oficina específica para abordar esta cuestión y un protocolo, con una entrevista personal, para evaluar cada situación y ver si la persona reúne las condiciones para considerarse refugiado.

Posteriormente, corresponde al Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social abordar los ofrecimientos de las distintas comunidades para ayudar y acoger a estas personas. En este punto, Calvo destacó la predisposición también a ayudar por parte de organizaciones como Cruz Roja, Médicos sin Fronteras o Acnur, entre otras.

Para coordinar la operación se creó un comité de seguimiento del que forman parte los ministerios implicados y el titular de Fomento, José Luis Ábalos, como responsable de los puertos estatales y de Salvamento Marítimo, "estará en suelo valenciano atento" y seguirá de cerca la operación.

La vicepresidenta señaló que la recepción de estas personas tiene que ser "respetuosa, eficiente, tranquila y plenamente solidaria" y, preguntada sobre si esto supone que no debe haber políticos, respondió: "Sí, exactamente". Agregó que las instituciones están haciendo su trabajo en reuniones como esta pero después serán los expertos los que deben decidir.

El futuro de los migrantes

Preguntada sobre cuál será el futuro de estas personas una vez pisen suelo español y qué pasará con quienes no consigan la consideración de refugiados, Calvo explicó que se va a actuar "con los protocolos establecidos" de acuerdo a la legislación española y habrá que atender "a qué personas piden asilo" y los condicionantes por los que se otorga, lo que se evaluará con entrevistas personales.

Ante la pregunta de si irán a los CIE (Centros de Internamiento de Extranjeros), señaló que "unos irán a los centros de extranjeros, otros irán a centros de ayuda humanitaria y políticas sociales" y los menores "en principio se quedan en València" por la necesidad de identificación y comprobación de edad y de circunstancias en las que llegan.

Acción "sin precedentes"

Por su parte, el presidente de la Generalitat calificó esta operación como "una acción de solidaridad sin precedentes", agradeció el ofrecimiento de "miles y miles de personas, entidades, sociedades cívicas y religiosas" a prestar apoyo, y destacó que "lo primero son las personas que van a bordo de estos barcos" y que "puedan tener un destino y, finalmente, un proyecto de vida".

"Hemos dado un gran ejemplo", dijo, mostrando a una Comunitat Valenciana "abierta, solidaria y hospitalaria" y manifestó su deseo de que la ayuda que presta España sea "una referencia en el mundo" en materia de derechos y libertades, porque así debe enfocarse la nueva política europea de inmigración.

Cuidado con los Derechos Humanos

Preservar la intimidad

Sobre los lugares que se habilitarán para recibir a estas personas tras su llegada, indicó que están preparados, pero no quiso concretar, por ejemplo, dónde se alojará a los menores, cuestión en la que coincidió con Calvo, quien dijo: "No podemos decir a dónde van a ir, hay que preservar sus derechos de intimidad y tranquilidad".

Puig pidió así, preservar esa intimidad tanto por parte de los políticos como de los medios de comunicación, porque "lo importante son las personas", y señaló: "La sobriedad es la respuesta".

Más sobre este tema
stats