Cospedal entrega la Medalla de Oro a Adolfo Suárez y nadie acude a recogerla

La presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, envió su "más sincera y agradecida" felicitación a todos los castellano-manchegos en el Día de la Región que, a su juicio, "ya se perfila como el punto de inflexión hacia la mejor etapa de prosperidad de nuestra tierra".

Durante su intervención en el acto institucional del Día de Castilla-La Mancha, celebrado en Talavera de la Reina, Cospedal también anunció la puesta en marcha de siete nuevos quirófanos en los hospitales de Talavera de la Reina, Cuenca y Albacete y otros cuatro en el Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo, así como trece nuevos centros de salud "en los municipios que lo necesiten". La apertura de estos centros, que se llevará a cabo "en lo que queda de legislatura" según comentó, tiene prevista una inversión de 56 millones de euros.

Cospedal aprovechó este día para trasladar a los castellano-manchegos el mensaje de que sus esfuerzos, "lejos de resultar estériles", han sido "cruciales" para asentar "los pilares de la merecida recuperación y para salvar lo más sagrado de nuestro patrimonio común: los servicios sociales básicos, la sanidad y la educación, sin cerrar un solo hospital ni un solo centro educativo", según informa Europa Press.

En este acto, se concedió la Medalla de Oro de Castilla-La Mancha al expresidente del Gobierno, Adolfo Suárez. Sin embargo, ningún familiar del galardonado acudió al acto para recoger el premio. María Dolores de Cospedal hizo también entrega del reconocimiento de Hijo Adoptivo de Castilla-La Mancha a título póstumo a Paco de Lucía, siendo su hermano, José de Lucía, quien recogió ese galardón.

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Mientras en Talavera de la Reina se celebraba el acto institucional que presidía Cospedal, miles de personas se manifestaron en Toledo con el lema “Nada que celebrar”.

La manifestación fue convocada por CCOO, UGT, STAS y USO, pero también se sumaron partidos políticos como PSOE, IU y Equo, junto a organizaciones sociales como las Plataformas por la Sanidad Pública, Contra la Privatización del Agua de Alcázar o de la Ley de Dependencia. Al finalizar, los responsables de los sindicatos convocantes enviaron duras críticas a las políticas que el PP ejecuta en la Comunidad.

Los portavoces de los sindicatos hicieron referencia las 750.000 personas que se encuentran en el umbral de pobreza en la región, así como a los 130.000 empleados que no reciben ya prestaciones. Achacan a los recortes del Gobierno de la Comunidad los problemas que sufren los hospitales, con denuncias por fallecidos en urgencias y falta de atención, o la desatención a la que se ven sometidos los dependientes.