Desaparición del Banco Popular
De Guindos revela que comunidades autónomas y ayuntamientos retiraron elevados depósitos del Popular, pero no la Seguridad Social
El ministro de Economía, Industria y Competitividad, Luis de Guindos, se pronunció sobre la fuga de depósitos por parte de administraciones públicas en el Banco Popular días antes de su resolución y posterior venta por un euro al Banco Santander, asegurando que "hubo comunidades autónomas y ayuntamientos que retiraron cantidades fuertes de depósitos del banco".
Ante las informaciones de que la Seguridad Social retiró depósitos en los últimos días, De Guindos ha aclarado que esta administración "mantuvo un saldo muy superior de la media habitual que tenía en dicha entidad en los últimos días", aseguró el ministro.
"Sí es cierto que hubo comunidades autónomas y ayuntamientos que retiraron cantidades fuertes de depósitos del banco", reveló durante su comparecencia ante la Comisión de Economía del Congreso para dar cuenta de la resolución y venta del Popular.
Según datos de la Seguridad Social a los que tuvo acceso Europa Press, el saldo total en las cuentas del Popular el día 7 de junio era superior al saldo medio diario del periodo que va de agosto de 2016 a mayo de 2017, que ha sido de 1.098,5 millones de euros. El saldo en diciembre de 2016 era inferior al que había los meses anteriores puesto que se hizo frente a la paga extra de las pensiones.
"Algo debe de haber fallado"
De Guindos ha reconocido que "algo debe de haber fallado" para que Popular llegara a la situación en la que estaba la semana pasada, pero ha confesado que él solamente mira "para adelante". "Ha debido de haber algo que ha fallado. A lo mejor teníamos que mirar más en la propia entidad", ha apuntado durante su intervención.
No obstante, el titular de Economía ha apuntado que, "desde luego, ni el supervisor (BCE), ni el Gobierno, ni el Banco de España, ni la CNMV son los que determinan las decisiones que toma una entidad a lo largo del tiempo".
"Una de las grandes tristezas de todo esto es que el Popular hace quince años era un banco ejemplar", ha lamentado el ministro, que ha reconocido que tiene sus propios "planteamientos sobre qué se ha hecho bien o mal".
"Solamente miro para adelante. Si miro para atrás uno acaba convirtiéndose en estatua de sal, no avanza mucho", ha apuntado De Guindo, para quien "en este caso, independientemente de los errores, los daños de la situación de Banco Popular se han minimizado".
Durante su comparecencia, el ministro ha achacado las diferentes caídas en el precio de la acción experimentadas por Popular los días previos a su resolución y posterior venta a la falta de concreción por parte del expresidente del banco Emilio Saracho sobre la hoja de ruta del banco durante la junta ordinaria de accionistas celebrada en abril, así como a la reexpresión de las cuentas de la entidad y a las rebajas en las calificaciones crediticias del banco.