Madrid multa con 375.000 euros a las constructoras de la M-30 por incumplir el contrato

El Consejo de Administración de Madrid Calle 30 celebrado esta semana aprobó la imposición de una multa por incumplimiento del contrato en la instalación y mantenimiento del telecontrol del alumbrado a cielo abierto. La sanción asciende a 375.000 euros y se suma a otras tres aprobadas en un consejo anterior, informó este sábado el Ayuntamiento de Madrid. Ya el pasado mes de noviembre el consejo de la sociedad mixta abrió seis expedientes, iniciándose el plazo para la presentación de informes y alegaciones relacionados con los seis servicios y prestaciones analizados.

La empresa encargada del mantenimiento de esta infraestructura es EMESA. Agrupa a las constructoras Ferrovial y Dragados.

En el caso del telecontrol del alumbrado a cielo abierto, partida contemplada en el ejercicio de 2007, los trabajos para la instalación de este sistema comenzaron después de noviembre de 2016. Los estudios realizados concluyen que las obras no se corresponden a las condiciones contractuales firmadas.

La penalización aprobada, tras cumplir los plazos y procedimiento prescriptivo, sucede a las impuestas por otros tres expedientes referidos a la inspección, mantenimiento e inventariado de los apoyos del bypass, falta de instalación de una red wifi y de otra red de comunicación PDH.

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La actual dirección de la empresa mixta abrió un expediente que pueden dar lugar a sanción por esta infracción el pasado mes de noviembre. Gracias a la incoación del mismo comenzaron los trabajos para la colocación del telecontrol del alumbrado. "Sin embargo, la empresa privada ha realizado unas obras que no se corresponden exactamente con el contrato suscrito entre ambas partes en 2005 y modificado en 2007", mantienen desde el consistorio que dirige Manuela Carmena.

El próximo 6 de junio tendrá lugar la primera sesión de la Comisión no permanente de Investigación creada por acuerdo plenario en febrero de este año para aclarar su situación económica financiera y la incidencia sobre las cuentas del Ayuntamiento. Cuenta con la participación de los cuatro grupos municipales.

Madrid Calle 30 está participada por el Ayuntamiento, que tiene el 80% del capital, y por un socio privado, EMESA, que cuenta con el 20% restante. Se creó en 2004 y, a finales de ese año, el Pleno del Ayuntamiento acordó modificar la forma de gestión del servicio, que pasaba de directa a indirecta a través de una sociedad de economía mixta. En agosto de 2005 se adjudicó el concurso a favor de EMESA. Tras la concesión quedó establecido el modelo económico-financiero que había que cumplir durante la vida del proyecto, hasta el año 2040.