Nuevo crimen machista: asesinada una mujer de 79 años en Gran Canaria

Nuevo crimen machista: un hombre ha asesinado este sábado a su mujer de 79 años en su domicilio en Las Palmas de Gran Canaria, situado en La Isleta, según recoge Europa Press. Delegación de Gobierno contra la Violencia de Género ha confirmado este asesinato como crimen machista, según ha informado a través de su perfil de Twitter.

Con esta muerte se elevan a 18 las víctimas mortales de la violencia de género en lo que va de año y a 1.051 desde el año 2003, cuando se iniciaron los registros. Asimismo, este es el segundo asesinato machista desde la declaración del estado de alarma como consecuencia del crisis del coronavirus, en vigor desde el pasado 14 de marzo.

La Delegación contra la Violencia de Género confirma el asesinato machista de una mujer en Santa Úrsula (Tenerife)

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Los hechos se produjeron sobre las siete de la mañana, cuando el 1-1-2 recibió una alerta informando de que una mujer precisaba asistencia sanitaria en una vivienda ubicada en la calle La Naval, por lo que el Cecoes activó de inmediato los recursos necesarios.  Hasta el lugar acudió una ambulancia medicalizada del Servicio de Urgencias Canario (SUC), así como agentes de la Policía Nacional y de la Policía Local de Las Palmas de Gran Canaria. Una vez en el lugar, el personal sanitario del SUC realizó maniobras de reanimación a la mujer sin éxito, confirmando su fallecimiento. 

Según ha informado la Delegación, existían antecedentes previos de violencia de género del presunto agresor contra la mujer asesinada, aunque la víctima no había denunciado antes, según han confirmado fuentes de Igualdad. En cuanto a las otras 17 mujeres asesinadas por sus parejas o exparejas en lo que va de año, tampoco había denuncias previas a su agresor. Solo en un caso de las fallecidas existía una denuncia presentada por el entorno de la víctima.

El Ministerio de Igualdad trabaja en medidas para reforzar la protección de las mujeres víctimas de violencia de género durante la situación actual, ya que al decretarse la alarma estas mujeres deben permanecer confinadas en sus domicilios, en muchas ocasiones junto a sus propios agresores.