Enrique Ossorio, vicepresidente de Isabel Díaz Ayuso, no es el único alto cargo del PP madrileño que percibe el bono social térmico, una ayuda directa dirigida a “paliar la pobreza energética en los consumidores más vulnerables” garantizándoles calefacción y agua caliente. También lo recibe Alfonso Serrano, número 2 en el organigrama del PP madrileño como secretario general y portavoz autonómico de su grupo parlamentario hasta mayo de 2022. Pero en su caso, y de forma misteriosa por la ausencia de explicaciones, la cuantía de la ayuda que hace cinco meses le otorgó la Consejería de Familia del Ejecutivo regional supera en un 60% la asignada a los que la legislación califica a secas como “consumidores vulnerables”. Los 313,30 euros concedidos a Alfonso Serrano coinciden al céntimo con la cifra que la normativa señala para 2021 como el importe a pagar a los “vulnerables severos”. Y ello pese a que el dirigente conservador –que se ha negado en redondo a responder a las preguntas de este periódico– no parece cumplir ninguna de las condiciones exigibles para situarse en ese peldaño de la escala.
A diferencia de los definidos como “vulnerables”, los “vulnerables severos” son quienes, por su mayor debilidad económica, más riesgo corren de quedarse sin luz, calefacción y agua caliente. Al tratarse así de la categoría de consumidores a la que se destina más dinero en forma de ayuda, los beneficiarios están sujetos a requisitos más duros. La única exigencia que permitiría a Alfonso Serrano recibir el bono social eléctrico en la categoría de "vulnerable severo" –la que garantiza un 70% de descuento en la factura de la luz, porcentaje que sube un 80% en 2023– y obtener así el bono térmico de mayor cuantía –313,30 euros– sería el de poseer el título de familia numerosa.
A diferencia de lo que sucede en el caso de Enrique Ossorio, que con un sueldo de 102.000 euros y un patrimonio personal con activos financieros por 1,4 millones, cobra el bono social como "consumidor vulnerable", para los "vulnerables severos" sí se imponen topes económicos en cuanto a ingresos: porque en lo que respecta a las familias numerosas solo se atribuye esa definición a aquellas cuyos miembros perciben una renta anual conjunta igual o inferior a 16.800 euros por año. Es decir, una renta igual o inferior a lo que se conoce como IPREM (Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples, 8.400 euros) multiplicado por dos. Los demás requisitos exigibles están descartados para Serrano porque suponen tener unos ingresos inferiores a 8.400 euros al año o ser beneficiario del Ingreso Mínimo Vital (IMV) o que posea esa condición algún miembro de la unidad familiar.
La gran incógnita en lo que concierne a Alfonso Serrano no apunta a por qué, pudiendo renunciar al bono social térmico, aceptó su concesión al igual que Ossorio. Lo sustancial que infoLibre no ha logrado averiguar a través de sus portavoces ni por ninguna otra vía es por qué para un político cuya retribución en 2021 sobrepasó los 83.000 euros [puedes ver aquí su declaración de bienes de marzo de 2021] se ha abierto la puerta a un bono especial reservado para los más pobres de la lista.
InfoLibre remitió al equipo de prensa del PP madrileño varias preguntas sobre la situación de Alfonso Serrano a primera hora de este miércoles. El diputado y secretario general de la organización que encabeza Isabel Díaz Ayuso rehusó responder: ni ha aclarado desde cuándo se beneficia del bono social eléctrico ni por qué percibe la cantidad asignada a los consumidores "vulnerables severos" . Por la tarde, Serrano eligió el programa Todo es Mentira, de la cadena Cuatro, para comunicar que también él percibe el bono social térmico. Pero obvió el hecho de que se cuenta entre quienes dentro de la zona climática en que se encuadra Madrid capital –la intermedia en cuanto a frío dentro de esa Comunidad– cobran 313,30 euros en lugar de 195,82. En otras palabras, omitió que recibe lo previsto para los "vulnerables severos" pese a que, sin contar lo que aporte su esposa, sus retribuciones anuales equivalen a seis veces el máximo permitido para acogerse a ese grupo.
A última hora de la tarde, sus portavoces se limitaron a afirmar que "las cantidades [a pagar] no las designa la Comunidad de Madrid sino que vienen asignadas desde el Gobierno central".
Fuentes de la Consejería de Familias de Madrid, la que gestiona y tramita el bono social térmico, tampoco explicaron por qué a Serrano se le abona una cuantía más alta. Un portavoz del departamento lo expuso así: "Las comercializadoras [eléctricas] entregan a las comunidades autónomas los listados de las personas beneficiarias de estas ayudas con las cantidades que deben percibir y que vienen determinadas por la propia norma estatal".
Datos que se cruzan con los de Hacienda
Tanto el bono social eléctrico como el térmico son ayudas estatales reguladas por el Gobierno central, que define los baremos de quién es considerado un consumidor vulnerable. Como las dos ayudas van ligadas, el ciudadano que quiere optar a ellas debe pedir a su compañía de la luz que le ponga en la lista de receptores del bono social eléctrico, por lo que tanto Serrano como Ossorio pidieron motu proprio la concesión de esta asistencia social. Una vez solicitada, la empresa energética introduce los datos del cliente en un sistema informático que cruza los datos de Hacienda para comprobar si efectivamente el ciudadano cumple los requisitos económicos. De nuevo, surge aquí la duda de cómo pudo el número dos del PP de Madrid cumplir con los requisitos económicos pese a su sueldo comparativamente astronómico.
Una vez concedido el bono social eléctrico, las compañías de último recurso (las únicas que pueden suministrar estas ayudas) transmiten a las comunidades autónomas una lista con los beneficiarios que hay en la región acogidos al bono de la luz, y a lo largo del siguiente año las autonomías reparten el bono térmico entre los receptores en un único pago.
El vicepresidente de Ayuso recibe de su Gobierno el bono de calefacción para "consumidores vulnerables"
Las rebaja del bono eléctrico es normalmente del 40% de la factura de la luz, pero en 2021 se amplió al 70% y el pasado octubre se extendió de nuevo hasta el 80% debido a los azotes de la pandemia y de la guerra de Ucrania. Es decir, el secretario general del PP en Madrid se ahorró 8 de cada 10 euros de la factura de la luz. Si bien es cierto, este apoyo tiene un límite de consumo de 4.140 kilovatios al año para personas vulnerables y vulnerables severas, y una vez superado, el resto de la electricidad deja de estar subvencionada.
Las cuantías del bono social térmico, en cambio, pueden variar entre comunidades porque el gobierno regional tiene margen para incrementar las partidas con presupuesto autonómico. En el caso de la Comunidad de Madrid, las ayudas al pago de la calefacción y el agua caliente oscilaron entre los 128,86 euros y los 373,17 euros en 2021, en función de la zona en la que se ubique la casa y si se trata de un consumidor vulnerable o vulnerable severo.
En el caso de Alfonso Serrano y como ya se ha expuesto en párrafos anteriores, recibió la cuantía correspondiente a una vivienda situada en zona D (hay C, D y E) con una condición de vulnerabilidad severa, por lo que le correspondieron 313,36 euros de ayuda en 2021, que recibió finalmente en otoño de 2022.
Enrique Ossorio, vicepresidente de Isabel Díaz Ayuso, no es el único alto cargo del PP madrileño que percibe el bono social térmico, una ayuda directa dirigida a “paliar la pobreza energética en los consumidores más vulnerables” garantizándoles calefacción y agua caliente. También lo recibe Alfonso Serrano, número 2 en el organigrama del PP madrileño como secretario general y portavoz autonómico de su grupo parlamentario hasta mayo de 2022. Pero en su caso, y de forma misteriosa por la ausencia de explicaciones, la cuantía de la ayuda que hace cinco meses le otorgó la Consejería de Familia del Ejecutivo regional supera en un 60% la asignada a los que la legislación califica a secas como “consumidores vulnerables”. Los 313,30 euros concedidos a Alfonso Serrano coinciden al céntimo con la cifra que la normativa señala para 2021 como el importe a pagar a los “vulnerables severos”. Y ello pese a que el dirigente conservador –que se ha negado en redondo a responder a las preguntas de este periódico– no parece cumplir ninguna de las condiciones exigibles para situarse en ese peldaño de la escala.