Sánchez se prepara para luchar por el control del PSOE en Aragón, Asturias y la Comunitat Valenciana

El Congreso Federal del PSOE ha finalizado, pero la lucha por el poder territorial entre los socialistas comienza ahora. Según los estatutos del partido, a partir de la celebración del cónclave federal se abre un plazo de dos meses para que las federaciones del PSOE celebren sus congresos regionales –aunque agosto es inhábil–, y los partidarios del secretario general, Pedro Sánchez, tienen previsto dar la batalla para hacerse con el control de tres federaciones que dirigen presidentes autonómicos contrarios al nuevo líder: la Comunitat Valenciana, capitaneada por Ximo Puig; Aragón, donde el secretario general es Javier Lambán; y Asturias, donde la federación está liderada por Javier Fernández, el único de los tres que ha anunciado que no tiene intención de presentarse a la reelección.

La tregua en el PSOE, que se había declarado de manera provisional tras el triunfo de Sánchez en las primarias, parece tener poco futuro. No ha pasado ni un día desde el cierre del congreso y las hostilidades a raíz de la renovación de los liderazgos regionales ya han comenzado. Lambán aseguró este mismo domingo que la nueva defensa de la "plurinacionalidad" aprobada por el PSOE puede inducir a "confusión", mientras Puig lanzó un dardo a Sánchez por los nombres que ha escogido para los nuevos órganos de dirección: "Cada uno tiene un modelo, yo siempre integro", señaló. En el mismo sentido, pero con más contundencia, se expresó el portavoz del PSOE en el Parlamento de Asturias, Fernando Lastra: "De ser esta la pauta de comportamiento, vamos a un modelo de partido en el que la exclusión y el sectarismo van a ser el modo de actuación".

No es casual que Aragón, la Comunitat Valenciana y Asturias hayan sido las tres comunidades donde antes se han desatado las críticas a Sánchez. Aún no se conoce si Lambán aspirará a la reelección y tampoco hay un candidato sanchista que se haya postulado públicamente para sustituir al barón, pero en el caso de Puig la situación es diferente: él anunció este mismo domingo que competirá por la reelección, y enfrente es seguro que tendrá al alcalde de Burjassot, Rafael García, que apoyó sin ambages a Sánchez durante la campaña de las primarias y que ya ha anunciado públicamente que aspirará al sillón que ahora mismo ocupa Puig.

García sería, así, el candidato apoyado por Ferraz para las primarias valencianas que tendrán lugar a finales de julio, y él comunicó ya el sábado al entorno de Sánchez su intención de concurrir. Puig, por su parte, ya ha comenzado a tomar posiciones. "Alguien tendrá que explicar cómo se quiere romper esto después de 22 años, en el mejor momento del PSPV de su historia reciente", con el Gobierno autonómico y "más del 80%" de los ayuntamientos valencianos, retó el presidente valenciano este domingo, cuando también recordó que "sólo lleva un mandato" al frente de los socialistas en la comunidad. Un día antes, el nuevo secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos –que aún lidera el partido en la provincia de Valencia– había señalado que "Puig y Lambán no pueden dedicarse a todo", en referencia a sus tareas orgánicas y de gobierno.

Según las fuentes consultadas por infoLibre, Lambán aún no tiene decidido si se presentará o no a las primarias para ser reelegido secretario general del PSOE de Aragón. De no hacerlo, estas fuentes mencionan el nombre de su secretaria de Organización, Pilar Alegría, como candidata para sustituirle con su beneplácito. Alegría fue una de las coordinadoras de la campaña de Susana Díaz a las primarias. Mientras, en las filas sanchistas la que parecía hasta hace unos días la principal favorita para presentarse era la diputada Susana Sumelzo. No obstante, Sumelzo ha entrado en la ejecutiva de Sánchez como secretaria de Política Municipal, y el secretario general ha asegurado que no quiere barones en su dirección, por lo que se descartaría que sustituya a Lambán. Los sanchistas, de esta forma, tendrán que buscar un candidato en los próximos días.

Por su parte, el asturiano Javier Fernández ha anunciado que no tiene previsto aspirar a la reelección como secretario general de la Federación Socialista Asturiana (FSA-PSOE), que lidera desde el 2000. No se descarta que Fernández apoye a algún dirigente afín a sus postulados para que lo suceda, pero lo que dan por hecho las fuentes consultadas es que el alcalde de Laviana, Adrián Barbón, será el candidato apoyado por Sánchez. De hecho, Barbón no lo negó al ser preguntado este domingo al finalizar el Congreso Federal del PSOE –fue delegado por Asturias–, aunque matizó que aún es pronto para hablar de esas cuestiones porque el congreso de la FSA "no está ni convocado".

Competición en otras seis federaciones 

Más allá de la Comunitat Valenciana, Asturias y Aragón, el choque entre los barones y Sánchez no es tan fuerte, pero en otras comunidades también se prevé que los actuales secretarios generales compitan contra candidatos apoyados desde Ferraz. Es el caso de Galicia, donde desde hace meses controla el PSdeG una gestora liderada por Pilar Cancela, que ha sido nombrada por Sánchez secretaria de Emigración en la ejecutiva federal del PSOE. Toda vez que este nombramiento limita las opciones de Cancela de aspirar a la baronía gallega, según señalan las fuentes consultadas por infoLibre, ésta podría prestar su apoyo –que iría unido al de Sánchez– a Gonzalo Caballero, sobrino del alcalde de Vigo, el susanista Abel Caballero, y enfrentado a él. Por su parte, Xoaquín Fernández Leiceaga, portavoz del PSdeG en el Parlamento de Galicia, tampoco descarta presentarse, aunque su principal problema es la falta de apoyos orgánicos.

Castilla-La Mancha es otra de las comunidades donde el futuro del secretario general autonómico, en su caso el presidente Emiliano García-Page, es una incógnita. Page fue uno de los principales apoyos de Susana Díaz durante las primarias, aunque ha aceptado sin críticas la victoria de Sánchez y ha asegurado que no quiere "mal rollo" en esta nueva etapa. No obstante, los dirigentes consultados afirman que Sánchez ha garantizado al barón castellanomanchego que lo apoyará en 2019 para que sea candidato a la Junta, pero que no le ha dejado tan claro su apoyo para que revalide su liderazgo al frente del PSOE en la región.

En la Comunidad de Madrid el panorama es igualmente difuso, aunque es probable que finalmente haya competición por la Secretaría General. La actual baronesa, Sara Hernández, obtuvo el puesto después de que Sánchez descabalgase del mismo al anterior líder, Tomás Gómez, pero durante las primarias Hernández apoyó a Patxi López. Y las fuentes consultadas no descartan que Ferraz impulse para sustituirla a José Manuel Franco, portavoz adjunto del PSOE en la Asamblea de Madrid, que prestó su apoyo a Sánchez durante el proceso de primarias y que coordinó posteriormente su propuesta para elegir a los delegados madrileños para el Congreso Federal.

La Región de Murcia es otra de las federaciones en las que lo más probable es que haya batalla por el liderazgo. Según las fuentes consultadas, quienes tienen más opciones de presentarse son la diputada María González Veracruz –hija del secretario general saliente, Rafael González Tovar– y el alcalde de Calasparra, José Vélez, acérrimo sanchista. Vélez protagonizó un discurso muy polémico en la campaña de las primarias, cuando tachó de "mafia" a la gestora que ha pilotado el PSOE hasta la victoria de Sánchez, y podría ser el candidato apoyado por Ferraz, aunque el hecho de que vaya a tener asiento en la ejecutiva como secretario de Pequeños Municipios la resta opciones de presentarse.

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También se competirá por el poder orgánico en Canarias –la otra federación que, junto a Galicia, está pilotada en la actualidad por una gestora tras la dimisión del anterior secretario general–, donde el mejor colocado para presentarse con el apoyo implícito de Ferraz es el exministro de Justicia Juan Fernando López Aguilar, que ya fue secretario general del PSOE de las islas entre 2007 y 2010. En estos momentos, los socialistas canarios se encuentran en el proceso de recogida de avales para las primarias, y junto a López Aguilar han confirmado su candidatura el vicepresidente del Cabildo de Gran Canaria, Ángel Víctor Torres; y la portavoz del PSOE en el Parlamento de Canarias, Patricia Hernández.

La Rioja es harina de otro costal, ya que el barón y ex número dos de Sánchez, César Luena, ha anunciado que no aspirará a revalidar su puesto. Aunque aún no hay un candidato claro para sustituirlo, suena el nombre de la portavoz del PSOE en el parlamento autonómico, Concha Andreu. También se baraja la opción de que dé el paso Francisco Ocón, actual secretario de Organización y que fue miembro de la gestora federal. Las fuentes consultadas precisan, en todo caso, que Andreu y Ocón mantienen una buena relación, por lo que sólo uno de ellos daría el paso. E, igualmente, consideran que sea quien sea tiene muchas opciones de victoria.

Así las cosas, son pocas las autonomías donde los congresos se prevén tranquilos. Sánchez no tiene previsto dar la batalla por el liderazgo en Andalucía, la federación más grande, por lo que Susana Díaz tendrá previsiblemente vía libre para revalidar su cargo al frente del PSOE-A. En la misma situación se encuentra Guillermo Fernández Vara, el barón extremeño, a quien Sánchez ha otorgado la presidencia del Consejo de POlítica Federal y contra el que no tiene intención de plantear una alternativa. Y tampoco corren peligro los puestos de Eva Díaz Tezanos (Cantabria), María Chivite (Navarra), Idoia Mendia (Euskadi) y Luis Tudanca (Castilla y León). Las dos primeras apoyaron a López durante las primarias, pero tienen buena relación con Sánchez. Tudanca, por su parte, siempre ha sido muy próximo al secretario general. Este fin de semana él fue el presidente del Congreso Federal de los socialistas.