Sindicatos
Todos los miembros de la nueva ejecutiva de UGT ya se sentaban en la dirección
El secretario general de UGT, Cándido Méndez, fue reelegido hoy sábado en su cargo al frente del sindicato por otros cuatro años más, tras recibir el respaldo del 86,32% de los delegados asistentes a la votación en el 41º Congreso Confederal. En concreto, de los 569 votos emitidos, fueron válidos 563. La lista encabezada por Méndez obtuvo 486 votos a favor, 77 en blanco y seis nulos, informa Europa Press.
Este será el sexto mandato de Méndez en UGT desde que fuera designado por primera vez secretario general de la central sindical en 1994, sucediendo en el cargo a Nicolás Redondo. Méndez, que no recibió ningún voto en contra, vio reducido en siete puntos el apoyo de los delegados respecto al anterior cónclave (93,2%), pero sigue teniendo el respaldo mayoritario de su organización. No obstante, ya no volverán a producir reinados tan largos: la asamblea aprobó reducir a tres el número de mandatos.
Además de Méndez, la Comisión Ejecutiva Confederal elegida por el 41º Congreso, que contrajo su número de trece a diez miembros, está compuesta por cinco hombres y cinco mujeres, todos ellos ya presentes en la anterior dirección. En concreto, la ejecutiva de UGT la formarán Cándido Méndez (secretario general), José Javier Cubillo (Organización, Comunicación y Coordinación del Área Interna); Toni Ferrer (Acción Sindical y Coordinación del Área Externa), Almudena Fontecha (Igualdad), Antonio Retamino (Tesorería), Teresa Muñoz (Formación), Frederic Monell (Participación Sindical e Institucional), Carmen López (Política Social), Ana Micó (Política Territorial y Movilización), y Marisa Rufino (Salud Laboral y Medio Ambiente).
Todos ellos ya ocupaban esas carteras en la dirección saliente. Ahora abandonan la cúpula Isabel Navarro, cuya área de Cambio Climático y Medio Ambiente pasa a Rufino; Manuel Bonmatí, responsable de Internacional, y Francisco Javier Sanjuán, secretario de Innovación e Industria.
Rubalcaba, Toxo, Báñez, Terciado y Lara
El 41º Congreso de UGT, que se ha desarrollado desde el miércoles en la sede de UGT Madrid, en Avenida de América, ha contado estos días con la presencia del secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, el presidente de Cepyme, Jesús Terciado, y el secretario general de CC.OO., Ignacio Fernández Toxo. A esta sesión de clausura, además de Toxo, acudió la ministra de Empleo, Fátima Báñez; el coordinador federal de IU, Cayo Lara, y la portavoz socialista en el Congreso, Soraya Rodríguez.
Méndez, nacido el 28 de enero de 1952 en Badajoz, fue nombrado por primera vez secretario general de UGT en 1994, recibiendo el testigo de Redondo. En abril de 1995 se convocó un cónclave extraordinario en el que fue reafirmado en el cargo, cerrándose la crisis abierta tras la dimisión de tres miembros de la ejecutiva. En el 37º Congreso Confederal, celebrado en 1998, fue reelegido secretario general, y en 2002 fue designado para seguir al frente del sindicato con el 79,37% de los votos. Tres años más tarde, los delegados de UGT volvieron a darle su confianza y renovó en el cargo, aunque obtuvo menos apoyos que en el anterior congreso (78,05%). En la última cita congresual, celebrada en abril de 2009, fue reelegido por el 93,2% de los votos.
"Nos han enterrado vivos"
En cuanto a los cambios, este congreso aprobó reducir a tres el número de mandatos de sus secretarios generales. Hasta ahora, en cambio, no había ningún límite. Fuentes de UGT precisaron no obstante a Europa Press que esta restricción comenzará a operar desde este cónclave, con lo que Méndez podría volver a competir dentro de cuatro años, si bien hay voces dentro del sindicato que apuntan a que este sexto mandato será para él el último.
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En su discurso de proclamación, el secretario general advirtió al Gobierno de Mariano Rajoy que contará con su apoyo si se "planta" ante Bruselas. Méndez afirmó que España "está atrapada" entre la "dureza y arrogancia" de Berlín, "el cinismo y la contumacia" de Bruselas y la "impotencia y resignación" de Madrid, y pidió al presidente que cambie sus políticas. "Están gobernando al albur de Bruselas y Berlín", insistió, para alertar de que las políticas de austeridad europeas lo único que están provocando es un "tsunami social y laboral". En este sentido, avisó al Ejecutivo de que si no modifica la orientación de sus políticas y las sustituye por solidaridad y estímulos económicos "se encontrará" con los sindicatos en frente.
"Nos han enterrado vivos, boca abajo y encima nos piden que escarbemos y cuanto más escarbamos, más nos enterramos", criticó el dirigente sindical, quien remachó que la triple A (austeridad, austeridad y austeridad) defendida por las autoridades europeas puede provocar un frenazo de la economía mundial.
Méndez también aprovechó para lanzar un aviso sobre el sistema de pensiones, cuya reforma pactaron las centrales con la patronal y con el Gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero. Pidió al Gobierno que no incorpore la dimensión de la dimensión de la crisis en el modelo público de jubilaciones para así certificar su "insostenibilidad". "No es desde el sistema de pensiones desde donde se puede crear empleo, es desde la política económica", recordó ante Báñez.
