El Gobierno eliminó hace dos meses sin avisar el descuento en la cuota a la Seguridad Social de las empleadas de hogar

El Gobierno ha suprimido la reducción del 20% de la cuota a la Seguridad Social de que disfrutaban hasta ahora quienes contratan a un empleado de hogar. Ese descuento de cotizaciones desapareció de los últimos Presupuestos Generales del Estado, que no prorrogan los beneficios de la ley de 2011 que lo creó. Por tanto, desde que entraron en vigor los Presupuestos, el 29 de junio, quienes contraten a un empleado de hogar han perdido ese descuento.

A preguntas de infoLibre, un portavoz del Ministerio de Empleo no precisa cuál fue la razón por la que la reducción de cuota “no entró en los Presupuestos”, que elabora el Ministerio de Hacienda. Pero recalca que la “voluntad” del departamento que encabeza Fátima Báñez es recuperarla. Y con carácter retroactivo, añade. “Se está buscando una solución para mantenerla, aún no sabemos cuál, quizá convertirla en una bonificación u otra fórmula”, explica el portavoz. Ante el problema de ingresos que aqueja a la Seguridad Social y las múltiples críticas al amplio sistema de reducciones de cuotas implantado por el Gobierno para fomentar la contratación indefinida, Empleo manifestó su intención de sustituir este tipo de descuentos en las cotizaciones sociales por bonificaciones.

Las reducciones son ingresos que pierden las arcas de la Seguridad Social, mientras que las bonificaciones se cubren con aportaciones del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE). Según explicó Fátima Báñez ante la Comisión del Pacto de Toledo el pasado noviembre, esa conversión permitiría al sistema ingresar unos 1.900 millones de euros.

Sin embargo, Empleo asegura que la reducción de la cuota de los empleados de hogar no ha sido eliminada por ese motivo. En cualquier caso, cifra en 120 millones de euros la cuantía que la Seguridad Social dejaba de ingresar por este concepto.

Sí se mantiene la bonificación de hasta el 45% para las familias numerosas que contraten empleados de hogar.

425.355 cotizantes

En la actualidad 425.355 personas cotizan en el Sistema Especial del Hogar, integrado desde 2012 en el Régimen General de la Seguridad Social. Hasta esa fecha, el número de quienes estaban afiliados no sobrepasó los 296.000. Pero los sindicatos calculan que son más de 700.000 las personas que realizan esta actividad, el 90% de ellas mujeres y la mitad emigrantes. En todo caso, no todos los afiliados pueden aplicarse la reducción del 20% y la bonificación del 45%. Quedan excluidos los que trabajan menos de 60 horas mensuales por empleador y se hayan dado ellos mismos de alta en el sistema en lugar de hacerlo su empleador.

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Este año, la cotización por contingencias comunes de estos empleados de hogar es de un 26,5% –el 22,1% lo paga el empleador y el 4,4%, el trabajador–. En 2018, el tipo de cotización aumentará en 0,9 puntos porcentuales y, a partir de 2019, será el mismo que el establecido para el resto del Régimen General. Sobre esa cotización es sobre la que se aplica la reducción del 20%. Por contingencias profesionales el tipo es del 1,1% y la paga únicamente el empleador.

A cambio de esas cotizaciones, los empleados domésticos tienen derecho al subsidio por incapacidad temporal, pero no a cobrar la prestación por desempleo.

Un empleado de hogar a jornada completa no puede ganar menos que el Salario Mínimo Interprofesional (SMI), que este año ha subido hasta 707,6 euros. en 14 pagas. Si trabaja por horas, debe cobrar un mínimo de 5,54 euros por hora. Con el aumento del SMI para 2017, también han subido los mínimos y máximos de cada tramo de cotización para estos empleados, así como los porcentajes de contribución sobre las bases. En total, se producen unas alzas de hasta el 10% en lo que deben pagar los empleadores. Y esa cantidad es aún mayor desde el 29 de junio por la supresión del descuento del 20%. “Supondrá un grave perjuicio para un gran número de empleadores, que verán aumentadas sus cuotas”, denuncia el sindicato CGT, que prevé “una avalancha de quejas en el mes de septiembre” cuando los afectados descubran la subida.