Abascal advierte a Casado de que si vota 'no' aumentará su "distancia" con el PP

Los primeros compases del debate en el Congreso de la moción de censura contra Pedro Sánchez han evidenciado las grietas que la pugna por el liderazgo de la derecha está abriendo en la relación entre el PP (88 diputados) y Vox (52).

El propio candidato, el líder ultra Santiago Abascal, lo certificó en el momento en el que pidió a Pablo Casado que se apoye la moción. “Señorías del PP, les ofrecimos liderar esta moción, creíamos que era su responsabilidad. Peor no han querido”, lamentó. “La distancia que nos separa es aún mayor”, subrayó antes de recordar lo que los conservadores le deben: “Les hemos datos tres gobiernos” para evitar ejecutivos “socialcomunistas y librar a los andaluces de cuatro décadas de corrupción socialista”.

A pesar de ello, Abascal volvió pedir al PP que apoye la moción. “En sus manos está demostrar que entre todos se puede construir una alternativa a este desastre”,señaló en referencia al Gobierno de Pedro Sánchez.

El PP, tras el discurso del líder de Vox, siguió sin revelar qué votará en la moción, tachó de “tuits encadenados” el discurso de Abascal y defendió el liderazgo de Casado basándose en las tesis antieuropeístas del candidato. La moción, declaró su secretario general, Teodoro García Egea, es“una tomadura de pelo” que sólo sirve para fortalecer a Sánchez, polarizar el país y “movilizar a la izquierda. El único éxito de Pedro Sánchez en dos años”, remarcó.

El líder de Vox pidió este miércoles al Congreso apoyo para poner fin al Gobierno de coalición, convertirse en presidente y convocar elecciones este mismo año. Todo ello en nombre de la negación de la validez de las elecciones celebradas hace un año en la que combinó la denuncia de suspuestas conspiraciones internacionales que estarían detras de las decisiones de Pedro Sánchez.

Tanto Abascal como su predecesor en el uso de la palabra, el portavoz ultra Ignacio Garriga, afirmaron que el oresidente, en aianza con Unidas Piodemos y los independentistas catalanes y vascos, tiene un plan para destruir las instituciones, romer la unidad de España y acabar con la monarquía.

El presidente de Vox justificó la moción, que previsiblemente sufrirá la mayor derrota de todas las presentadas en democracia, diciendo que “a los españoles se les ha acabado la paciencia” y asegurando hay que “devolverles la palabra” para que, en plena segunda ola de la pandemia, puedan juzgar los “meses de caos y ruina” a los que según él ha llevado al país el Ejecutivo de Pedro Sánchez. “Hay que devolver la palabra a los españoles para que puedan elegir representantes que les respeten y les digan la verdad sobre futuros pactos”, enfatizó.

“Si ustedes se cayeran del caballo”, explicó admitiendo que carece de los apoyos que necesita para lograr su propósito, su objetivo sería configurar “un Gobierno de emergencia nacional reducidísimo”, subrayó, “con personas de distintas sensibilidades ideológicas para tomar decisiones técnicas con el único objeto de proteger a los españoles y convocar a los españoles”.

Abascal intentó retratar el Gobierno como una “mafia” en manos de conspiradores internacionales como el magnate George Soros, arremetió contra la Unión Europea —cuyo proyecto es traer al viejo continente el proyecto de la República Popula China, dijo— y retrató al gobierno chino como el enemigo del mundo, al que es necesario pedir que “pague” comensaciones por un virus del que le hace responsable.

En un discurso de algo más de dos horas de duración —y que cerró con un “Viva el Rey y viva España”—, desgranó desde la tribuna del hemiciclo su proyecto para gobernar ysubrayó repetidamente la necesidad de desalojar al Gobierno de PSOE-Unidas Podemos del Palacio de la Moncloa antes de que hagan "más daño" al país.

Mejor la dictadura

El actual Ejecutivo es "el peor" de los últimos 80 años, insistió remarcando que considera mejores los gobiernos de la dictadura, y "el que peor ha afrontado la pandemia de todo el mundo". De manera que quienes no apoyen la censura serán "responsables ante el pueblo español" de "sus públicas y conocidas fechorías".

La moción no está únicamente justificada en la "criminal" gestión de la crisis del coronavirus, sino también en los "ataques" del Gobierno a la monarquía, a la independencia judicial, a la oposición democrática o al Estado de Derecho, enumeró. “Son un frente popular social comunista en alianza con separatistas y terroristas. Un Gobierno "ilegítimo" que llegó al Palacio de la Moncloa "traicionando" sus promesas electorales y la confianza de sus votantes.

El candidato de la moción no olvidó trufar su discurso de afirmaciones falsas, como la supuesta “invasión” de inmigrantes que estaría sufirendo España provocando graves problemas de inseguridad, o de araques a la reivindicaciones del feminismo en su batalla por la igualdad entre hombres y mujeres. 

Y defendió que la soberanía está siendo "atacada" por un proceso "revolucionario y golpista" que cuenta con el apoyo de los "enemigos de la nación", que según él son los partidos nacionalistas y sberanistas, a los que llamó “renegados” y tachó de "okupas". Según él, sus escaños son “ilegítimos”.

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Abascal apeló al PP para que se sume a su estrategia. Aseguró respetar “a todos los que creen de buena fe creen que es estéril” la moción, pero pidió el mismo trato para quienes sostienen, como él, la urgencia de “detener el proceso de destrucción de España”.

Por eso “mantengo mi ofrecimiento a todos ustedes para construir una alternativa política, cultural, económica y de modelo territorial”. Porque “nadie va a venir a salvarnos ni a rescatarnos”, subrayó. “Algunos de ustedes”, añadió en referencia a Pablo Casado, “han perdido al fe en el pueblo español y ponen sus esperanzas en Bruselas, el FMI o las multinacionales” Frente a quienes así piensan, proclamó, “venimos a decir que tenemos el deber de asumir nuestra responsabilidad histórica: a España sólo la pueden rescatar los españoles. Dependemos únicamente de nosotros mismos”.

“Hoy cada uno de nosotros se retrata para la posteridad", avisó. Dentro de muchos años se preguntarán qué hicieron para evitar "la ruina económica y moral" que suponen Sánchez e Iglesias en el poder. "Qué hice en este momento crítico de la historia".