OTAN no, bases fuera

Luis del Castillo Vergara

Mucho ha llovido desde aquel "de entrada, no" que como un mantra repetía el PSOE años antes de acabar defendiendo el SÍ en el referéndum de 1986.

España eligió entonces permanecer bajo el paraguas de EEUU en un mundo con dos bloques aún diferenciados, aunque, en los albores de la perestroika y la glasnost, estas fronteras comenzaban ya a diluirse.

Nuestra permanencia y sumisión al país norteamericano nunca ha sido entendida en una España plenamente asentada en Europa y lejos de las ansias belicistas de quien, en aras del mundo libre (?), ha auspiciado intervenciones paramilitares y militares en los cinco continentes desde mitad del pasado siglo. 

Europa no necesita ser tutorada, menos aún por quien con sus políticas se muestra tan lejano de esa idea sobre la que un día se construyó

En este mundo globalizado en el que vivimos, con acuerdos comerciales a un lado y a otro de esa imaginaria línea que ha ido trazando la OTAN con el único fin de expandirse militarmente por medio de sus bases, ¿qué sentido tiene que Europa y, por ende, España, sigan bajo el mando militar de EEUU?

Más si cabe ahora, cuando nuestro supuesto aliado nos declara una guerra económica y nos ningunea sin disimulo alguno al tiempo que nos impone un mayor gasto en defensa, ¿para defendernos de qué? ¿De quien es ahora su amigo ruso? Ese con el que juega a repartirse el mundo como si un tablero fuera y del que no es más que su reflejo, postrado igualmente en manos de oligarcas y con similares ínfulas dictatoriales.

Una inversión en armas y tecnología que les serían compradas precisamente a ellos mismos

Europa no necesita ser tutorada, menos aún por quien con sus políticas se muestra tan lejano de esa idea sobre la que un día se construyó.

Quizás vaya siendo el momento de recuperar aquel viejo eslogan que resonaba en las calles de España a mediados de los ochenta:

"OTAN no, bases fuera"

_______________________

Luis del Castillo Vergara es socio de infoLibre.

Más sobre este tema
stats