De vez en cuando me gusta volver atrás, rebuscar en las estanterías de casa y encontrar alguna de esas joyas que entretuvieron mi tiempo y llenaron mis espacios físicos y mentales.
En casa hay miles de libros: poesía, novela, cómic, arte, ensayo, catálogos de exposiciones, recopilatorios, libros intervenidos por artistas… Un sinfín de palabras que buscan ojos que las quieran mirar. Todos ellos comprados con ilusión.
La lectura es un vicio y, es cierto, leer nos hace libres y felices, mientras dura. Debe ser por eso que me resulta imposible entrar en una librería y no salir con uno, dos, tres... libros. Menos mal que ahora, casi siempre, las novelas las compro en formato digital, por razones diversas: falta de espacio (y eso que mi casa es enorme) y, sobre todo, porque es más cómodo para leer en la cama.
Hoy, ahora, tengo en mis manos un libro al que recurro de vez en cuando: Cuentos completos de Carmen Martín Gaite, Alianza Editorial, edición de 1978. Normalmente no lo leo todo seguido. Suelo mirar el índice y selecciono uno o dos relatos. En esta ocasión he seleccionado "Un alto en el camino", unas 12 páginas de apretado texto que cuentan la historia del viaje en tren de una familia: Gino, Emilia y Esteban.
La historia está firmada en Madrid, en diciembre de 1958. La narración mantiene el interés de principio a fin. Aborda (como manifiesta la autora en el prefacio escrito especialmente para esta edición) "el eterno problema del sufrimiento humano, despedazado y perdido en el seno de una sociedad que le es hostil y en la que, por otra parte, se ve obligado a insertarse". La verdad es que yo podría firmar ahora esas palabras.
El universo femenino se alza con el protagonismo del profundo malestar que invade a las protagonistas en la búsqueda de la propia identidad, ante la carencia del amor. Es este un volumen especial que se podría titular "Cuentos de mujer".
El libro incluye, además del prólogo de la autora, 17 cuentos, a través de los cuales se puede intuir, conocer, sentir la vida, el amor, el desamor y la tristeza de las mujeres españolas de la época. A través de sus páginas, en palabras de la autora, desfila la rutina, pero también "la oposición entre pueblo y ciudad, las primeras decepciones infantiles, la incomunicación, el desacuerdo entre lo que se hace y lo que se sueña, el miedo a la libertad".
Martín Gaite presenta en estos relatos, todos ellos fechados al final de cada uno en Madrid, entre 1953 y 1970. Historias de "mujeres desvalidas y resignadas, pocas veces personajes agresivos, como trasunto literario que son de una época en que las reivindicaciones feministas eran prácticamente inexistentes en nuestro país", pero, mal que les pese a quienes pueda pesar, las mujeres siempre hemos encontrado la forma de dar a conocer lo que pensamos, sentimos o dejamos de sentir. De la mano de la autora, las mujeres de estos relatos lo hacen con maestría.
Carmen Martín Gaite formó parte, al comienzo de los años cincuenta, de un grupo de amigos escritores en el que la acompañaban Juan Benet, Ignacio Aldecoa, Rafael Sánchez Ferlosio, Josefina Rodríguez (quien utilizaría más tarde el apellido de su esposo: Aldecoa); todos ellos y algunos más, como Alfonso Sastre, Medardo Fraile o José María de Quinto, escribieron en la Revista Española, fundada gracias al mecenazgo del hispanista Rodríguez Moñino. En ella publicaron sus primeros cuentos. Además, en Revista Española se incluyeron, por primera vez en España, textos de Truman Capote, de Dylan Thomas o Cesare Zavattini.
La vida de la revista fue breve: entre 1952 y 1953 se publicaron seis números, con un total de 640 páginas. Las tiradas eran muy cortas. Pero, en el año 2015, Ediciones Ulises (tercer sello del grupo Renacimiento) realizó una edición facsímil, con un estudio del profesor de la Universidad de Cádiz José Jurado Morales.
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Y aquí estoy, leyendo, profundizando en la lectura, investigando y descubriendo joyas de la literatura de un país, el mío, que no deja de sorprenderme, que me hiela el corazón, unas veces, y me fortalece, otras. Pero siempre, con el regalo de un buen libro, la vida es más hermosa y la libertad me abraza y sigue emocionándome hasta la lágrima. _____
Nieves Álvarez Martín es profesora, escritora, poeta, investigadora y artista plástica. Pero, sobre todo, ávida lectora.
De vez en cuando me gusta volver atrás, rebuscar en las estanterías de casa y encontrar alguna de esas joyas que entretuvieron mi tiempo y llenaron mis espacios físicos y mentales.