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El apoyo centroeuropeo a la guerra de Ucrania se tambalea con el triunfo de Robert Fico en Eslovaquia

Robert Fico, a su llegada a la sede de su partido en la noche del sábado.

El ex primer ministro de Eslovaquia Robert Fico tiene todas las cartas para regresar al poder por tercera vez tras el triunfo virtual de su partido Smer (Dirección) en las elecciones legislativas del sábado, donde el ascenso del partido Voz y Socialdemocracia (Hlas) de su antiguo aliado, Peter Pellegrini, le facilitaría enormemente la formación de un nuevo gobierno centroeuropeo contrario, como Hungría, a la ayuda militar a Ucrania y abierto a la negociación con Rusia, informa Europa Press.

Con un 99% de los votos escrutados, el Smer recaba de momento un 23,3% del apoyo popular, más de cinco puntos por delante por Eslovaquia Progresista, el partido europeísta de la presidenta Zuzana Caputova y del ex periodista Michal Simecka, a quien las encuestas a pie de urna daban inicialmente como vencedor sorpresa. El Hlas de Pellegrini ha quedado tercero con un 15% de los votos y el previsible socio menor de la futura coalición, el Partido Nacional Eslovaco (SNS) de Andrej Danko, ha conseguido en torno a casi un 6%.

Aunque el Smer, Hlas y el SNS obtendrían juntos unos 79 diputados de los 150 que comprende la cámara legislativa eslovaca, el populismo galopante exhibido por la práctica totalidad de los candidatos durante la campaña ni mucho menos da por cierta la consecución efectiva de esta alianza: el 18% conseguido por Eslovaquia Progresista sumado al 8,9 % conseguido por la coalición Gente Común y Personalidades Independientes (OLaNO), contraria a Fico, más un giro del Hlas podrían arrebatarle el triunfo.

No obstante, la victoria de Smer pone de manifiesto que el electorado eslovaco está cansado de la guerra en Ucrania y ha preferido atender al mensaje fundamental transmitido por Fico: los asuntos nacionales ahora mismo son prioritarios. "Me gustaría que el filete que se come Eslovaquia fuera más grande", declaró el sábado Fico tras depositar su papeleta en el final de una campaña en la que ha prometido que, de regresar al cargo, no entregará "ni una sola bala" al Gobierno de Kiev.

"La paz es la única solución. Me niego a que me critiquen y me etiqueten como belicista sólo por hablar de paz, mientras que a quienes apoyan la guerra y las matanzas se les llama 'activistas por la paz'. Tenemos la cabeza hecha un lío", proclamó Fico el pasado 6 de septiembre durante un mitin en la ciudad de Michalovce, próxima a la frontera con Ucrania.

Estos mensajes han puesto al líder de Smer al frente de unos comicios que podrían desembocar en su tercer mandato como jefe del Gobierno, cargo que ya desempeñó desde 2006 a 2010 y repitió desde 2012 a 2018, año en que presentó su dimisión tras el estallido de protestas por los asesinatos del periodista Jan Kuciak y su prometida Martina Kusnirova.

Kuciak, cabe recordar, investigaba los presuntos vínculos entre dos asesores del Gobierno Fico y empresarios relacionados por el reportero con la mafia italiana más poderosa, la calabresa 'Ndrangheta. La inmunidad parlamentaria de la que disfruta Fico ha impedido seguir con las pesquisas en su contra.

Durante su tiempo como líder opositor, Fico ha estrechado lazos con otro líder europeo contrario a la asistencia militar a Ucrania como es el primer ministro húngaro Viktor Orbán.

Si el partido gobernante de Polonia Ley y Justicia logra ganar un tercer mandato en las elecciones parlamentarias polacas del mes que viene, y sumado al tradicional apoyo serbio a Moscú, el centro de Europa podría convertirse en un sólido frente de oposición a la política de Bruselas en relación a la guerra de Ucrania

Respeto por la victoria de Smer

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El líder del partido europeísta Eslovaquia Progresista, Michal Simecka, ha expresado este domingo su total respeto al resultado, aunque ha avisado que intentará negociar una coalición de Gobierno con otros partidos para impedir que el ex primer ministro y crítico con las posturas de Bruselas sobre la guerra de Ucrania regrese al poder.

"Respeto que haya ganado las elecciones pero son malas noticias para Eslovaquia", ha lamentado el ex periodista en su primera valoración de unos comicios en los que parecía emerger como triunfador durante las encuestas a pie de urna. "La forma en la que el Hlas decida abordar esta situación va a tener un carácter decisivo. Va a tener que ser una decisión civilizada", ha añadido en declaraciones recogidas por el medio eslovaco Aktuality.

"No podemos juntarnos solo por juntarnos varios partidos que estamos separados ideológicamente. Un criterio importante será la estabilidad del futuro Gobierno", ha declarado. Simecka ha confirmado que en los próximos días mantendrá "conversaciones informales" con partidos contrarios a Fico, como los democristianos o la coalición Gente Común y Personalidades Independientes (OLaNO).

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