Las federaciones del PSOE de Andalucía y Castilla La Mancha encabezan la oposición a la propuesta de Pedro Sánchez de celebrar en diciembre el 39 Congreso del partido 39 Congreso del partido. Ambas rechazaron abiertamente esta posibilidad mientras que otras federaciones insisten en hacer "autocrítica". A éstas se sumaron destacados miembros del PSOE, cuya reacción va desde la "desolación" de José Blanco a quienes hablan abiertamente de asumir responsabilidades, como pidieron Eduardo Madina o Joaquín Almunia. No obstante, las direcciones del PSOE en Navarra, Euskadi y Baleares y del PSC en Cataluña se mantienen en la defensa del secretario general, según informó Europa Press.
Los ánimos en el PSOE ya habían amanecido encendidos por los malos resultados cosechados este domingo en los comicios vascos y gallegos, pero se recrudecieron con el anuncio que realizó el secretario general, durante la reunión de la permanente de la Comisión Ejecutiva, de celebrar el 39 Congreso en el mes de diciembre.
Esta maniobra fue rechazada de plano por las federeciones de Andalucía y de Castilla La Mancha que incluso le llegaron a pedir que asuma responsabilidades. De hecho, el sector andaluz trasladó su rechazo a la propuesta del secretario general dentro de la reunión de esta mañana en Ferraz, empezando por la presidenta del PSOE, Micaela Navarro, y el secretario de Política Federal, Antonio Pradas.
Y a ellos se sumaron la exministra Carme Chacón; la secretaria de Empleo, Luz Rodríguez; la de Inmigración, Eva Matarín (próxima al ex secretario general del PSOE de Madrid Tomás Gómez) y el líder de Juventudes Socialistas, Nino Torre.
"No es el momento de celebrar Congreso sino de asumir responsabilidades políticas", dijo desde Sevilla el secretario de Organización del PSOE andaluz, Juan Cornejo, quien además criticó que la dirección del partido trate de "esconderse detrás del Congreso expréss para no hablar de lo que se tendría que hablar" que, en su opinión, es la "situación del partido" y los "nefastos" resultados.
Cornejo no escatimó en críticas al considerar de una "torpeza increíble" pretender la celebración de un Congreso del partido en el mismo mes de unas hipotéticas elecciones generales. En su opinión, el congreso debe celebrarse cuando haya gobierno y tiene que ser de "refundación".
En el mismo sentido se pronunció la federación castellano manchega por boca de su portavoz, Cristina Maestre. Esta también calificó el cónclave que quiere realizar Pedro Sánchez de "Congreso expréss" y advirtió de que "no se puede esconder" la responsabilidad por unos resultados electorales "tan negativos" de la manera en la que pretende hacerlo el secretario general.
Maestre recordó, de paso, que el resultado de gallegas y vascas no es el primero negativo que tiene el PSOE, dejó claro que su partido debe hacer una "reflexión rotunda" y no ve "responsable" mezclar un proceso orgánico interno en un momento en el que se "debe estar trabajando por la gobernabilidad del país".
Realizar "autocrítica"
El PSOE de Extremadura y el de Murcia no se pronunciaron sobre la conveniencia del Congreso, pero sí advirtieron de que el partido debe hacer "autocrítica". El portavoz del PSOE extremeño, Miguel Ángel Morales, pidió "analizar en silencio" y "objetivamente" los malos resultados. En su opinión, el partido tiene que hacer una "crítica interna" y "buscar soluciones" para volver a ser un referente.
También los socialistas de Murcia ven necesario hacer "autocrítica". Así se pronunciaba este lunes el secretario general del PSOE-RM y portavoz del Grupo Parlamentario Socialista en la Asamblea Regional, Rafael González Tovar, que también advirtió de que esta semana tendrán que analizar las responsabilidades de sus descalabros electorales. "Hay muchísimas responsabilidades en el tema de estos resultados que tenemos que asumir", afirmó.
La dirección del PSOE asturiano evitó responder sobre la gestión realizada por Pedro Sánchez, pero sí apuntó que los ciudadanos en Galicia y Euskadi han votado por "el rigor y la estabilidad" en una crítica implícita al rumbo que ha adoptado la dirección de su partido.
Por su parte, los secretarios generales del PSOE en Aragón y Valencia, Javier Lambán y Ximo Puig, no se pronunciaron sobre el Congreso, pero sí consideraron "bastante complicado" que pueda salir adelante un Gobierno presidido por Sánchez.
Sin embargo, no le atribuyeron a él toda la responsabilidad de los malos resultados obtenidos en los comicios regionales, sino que consideran que se trata de una "responsabilidad colectiva". La propuesta del dirigente valenciano es un análisis "sereno" y una toma de decisiones "oportunas, pero con la cabeza" y "lejos del frentismo".
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A estas actitudes críticas de las direcciones de varias federaciones, se sumaron las críticas individuales que realizaron destacados miembros del PSOE, como el exsecretario de Organización y exministro, José Blanco, quien, tras mostrarse "desolado" se preguntó "qué más tiene que pasar para que el PSOE reflexione".
Eduardo Madina, quien disputó en su día la secretaría general a Pedro Sánchez, pidió abiertamente que se asuman "responsabilidades" tras el hundimiento del PSOE y cambiar de "rumbo", al tiempo que advertía de que un Congreso del partido lleva a elecciones generales. Mientras Carme Chacón pidió una "profunda reflexión" en su partido para que vuelva a haber un PSOE "fuerte y unido".
El más claro fue el histórico exdirigente socialista, Joaquín Almunia, quien dijo que si el PSOE quiere sobrevivir tiene que relevar ya a Sánchez y propuso, en un artículo publicado en El independiente, una Comisión Gestora formada por los exsecretarios generales del PSOE. La misión de éstos sería ordenar el Grupo Socialista que se abstenga para que gobierne el PP y que prepare un Congreso con el que sacar a los socialistas del "sectarismo" y les "haga olvidar las utopías populistas".
PSC, Baleares y Navarra, con Pedro Sánchez
No obstante, las direcciones de las federaciones de Navarra, Baleares, Euskadi y del PSC, que también calificaron de "malos" y hasta "decepcionantes" los resultados, expusieron otras consideraciones en defensa del secretario general.
Tanto el primer secretario del PSC, Miquel Iceta, como el portavoz del PSE-EE, José Antonio Pastor, culparon al "ruido interno" y a la "división" de los socialistas como uno de los factores que ha perjudicado al PSOE en sus resultados.
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No obstante, el PSE cree que no debe haber "miedo a las críticas ni a las opiniones divergentes", pero cree que éstas deben hacerse "dentro" del partido y expresó su "curiosidad" por ver "qué proponen los llamados críticos" en el Comité Federal como "alternativa al 'no' a Mariano Rajoy" de Pedro Sánchez.
La líder del PSOE navarro, María Chivite, también se refirió al "ruido interno" como uno de los culpables de los malos resultados, pero defendió a Pedro Sánchez alegando que éste no se presentaba a los comicios vascos y gallegos.
Para el PSOE balear, Pedro Sánchez debe seguir intentando formar gobierno a pesar de que los resultados hayan sido "decepcionantes". En opinión de los portavoces del PSIB en el Parlament, Andreu Alcover y Bel Oliver, lo ocurrido el 25S no impide que Pedro Sánchez tenga que "procurar hacer un Gobierno de izquierdas". En este sentido, aseguraron que si Rajoy es "incapaz" de llegar a acuerdos no es su problema. "No podemos echar la culpa de todo lo que pasa a Sánchez", alegaron.
Las federaciones del PSOE de Andalucía y Castilla La Mancha encabezan la oposición a la propuesta de Pedro Sánchez de celebrar en diciembre el 39 Congreso del partido 39 Congreso del partido. Ambas rechazaron abiertamente esta posibilidad mientras que otras federaciones insisten en hacer "autocrítica". A éstas se sumaron destacados miembros del PSOE, cuya reacción va desde la "desolación" de José Blanco a quienes hablan abiertamente de asumir responsabilidades, como pidieron Eduardo Madina o Joaquín Almunia. No obstante, las direcciones del PSOE en Navarra, Euskadi y Baleares y del PSC en Cataluña se mantienen en la defensa del secretario general, según informó Europa Press.