Emotivo adiós a Ramón Lobo con una procesión de flores por las tumbas de grandes personajes que lo inspiraron
"La muerte no es ningún problema si has vivido antes", comentaba el periodista Ramón Lobo, fallecido este pasado miércoles a los 68 años, en una entrevista en el programa A vivir que son dos días de la Cadena Ser, donde se despedía de los oyentes cuando sabía que le quedaban pocos meses de vida. Este viernes ha sido el funeral del legendario reportero de guerra, que ha concluido con un recorrido, encabezado por la periodista de la Cadena Ser y amiga de Lobo, Nieves Concostrina, por el cementerio de la Almudena de Madrid. Más de 300 personas entre amigos, familiares y seguidores del periodista han paseado, portando flores, por los lugares donde están enterradas algunas de las personalidades que más admiraba el reportero.
La "procesión muy laica", tal y como la había definido el propio periodista en un tuit, ha comenzado en la tumba de Vintila Horia, importante escritor rumano y profesor de Lobo, y ha continuado por otras como la de la escritora Almudena Grandes, el teniente Castillo, el fundador del PSOE Pablo Iglesias, el dirigente de CCOO Marcelino Camacho, el presidente de la Primera República Nicolás Salmerón, la periodista Carmen de Burgos, el dibujante Forges o los escritores Pío Baroja y Benito Pérez Galdós.
En cada una de ellas, los asistentes han ido depositando flores mientras escuchaban las explicaciones de Concostrina, cumpliendo el deseo de Lobo de "llenar de flores" el cementerio de la Almudena. El recorrido, tal y como quería Ramón Lobo, ha finalizado en dos lugares icónicos del recuerdo a la represión franquista, el muro de las Trece Rosas y el monumento por los represaliados durante la dictadura, del que el Ayuntamiento de Madrid retiró los nombres de los fusilados en la capital.
Entre los asistentes al funeral, celebrado en el crematorio del cementerio, se encontraban algunos de los amigos más cercanos de Lobo. Entre ellos los periodistas Guillermo Altares y Gervasio Sánchez, el presentador de A vivir que son dos días de la Cadena Ser, Javier del Pino, que ha sido el encargado de dedicar unas palabras al reportero fallecido en el crematorio, la portavoz de Más Madrid en la Asamblea, Mónica García, el actor Juan Diego Botto y el director editorial de infoLibre, Jesús Maraña.
El periodista había anunciado el octubre pasado que padecía dos tumores simultáneos y, durante el tiempo que ha durado su enfermedad, ha continuando informando sobre su estado de salud, manteniendo una actitud siempre positiva ante ella y dando una auténtica lección de vida. Pese a la condición de hipocondríaco que recordaban muchos de sus amigos más cercanos, Lobo mantuvo una actitud optimista ante la muerte, nunca rindiéndose y siempre dando un mensaje de vitalidad que han resaltado las decenas de compañeras y compañeros que han acudido a su despedida, desde Joaquín Estefanía o Rosana Torres a Olga Rodríguez, Enric González o Pere Rusiñol.
Muere Ramón Lobo a los 68 años, gran corresponsal de guerra y analista de infoLibre
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Lobo se encuentra, como especificó en su artículo de despedida Gervasio Sánchez, en el olimpo de los reporteros de guerra españoles. Una "tribu", liderada por Manu Leguineche y Enrique Meneses, en la que Lobo se encuentra por méritos propios. El reportero cubrió para el diario El País guerras en Croacia, Serbia, Bosnia-Herzegovina, Albania, Chechenia, Irak, Argentina, Haití, Ruanda, Nigeria, Guinea Ecuatorial, Sierra Leona, Uganda, Congo, Zimbabue, Namibia y Filipinas, siempre desde un lado humano y dando voz a los más vulnerables.
Fue despedido del periódico en el ERE de 2012 que afectó a 129 periodistas. A partir de ahí, comenzó a colaborar en infoLibre y tintaLibre donde fue analista y columnista. Su último artículo en tintaLibre lo dedicó a analizar su profesión en un mundo ahora digitalizado, mientras que su última columna en infoLibre trató sobre la serie del momento, El juego del calamar, y su relación con la política. Además, fue colaborador en elDiario.es o la Cadena Ser, en el programa A vivir que son dos días. También escribía frecuentemente en su blog y en Twitter, donde era muy activo y donde ha ido contando el desarrollo del cáncer y su evolución. Sin embargo, además de por su trayectoria periodística, sus compañeros le han recordado por su gran calidad humana.
Tras su muerte, en infoLibre, el director editorial del periódico, Jesús Maraña, y el periodista Javier Valenzuela le recordaban en sendas columnas en las que mostraban su cariño y admiración por el reportero de guerra.
